Después de haber disfrutado ya de algún concierto de bandas locales en esta nueva realidad que nos toca sufrir, era el momento de acercarnos a un evento algo más numeroso y poder contemplar a un grupo de gran importancia para la historia del Rock and roll estatal de las tres últimas décadas como son los murcianos M Clan.
Aún recuerdo cuando los oía en la radio con su maqueta y me engancharon de tal manera que compré su primer disco nada más salir a la venta en 1995 en una primera tirada que era más económica y que tenía sólo 11 temas, para luego verlos en directo por vez primera en 1996 en Gijón acompañando en el campo de El Molinón a Bon Jovi, Gun y David Palau: ¡casi nada!
Luego llegaría el aclamadísimo “Coliseum”, los exitosos “Usar y tirar” y “Sin Enchufe”, continuando con una carrera en la que han publicado ya 9 discos de estudio, dos directos y un recopilatorio, siendo en todo momento uno de esos grupos respetados por todos los seguidores del rock por sus buenas canciones y sus buenos directos.
Y la verdad es que, por diferentes circunstancias, solo había visto a la banda en dos ocasiones en directo, la mencionada en 1996 y otra en el 2015 en el mismo lugar donde esta noche de miércoles iban a tocar dentro de la gira Viva La Vida junto a un buen puñado de artista que actúan durante los meses de julio y agosto y que aquí a Torrelavega ha traído la gente de Mouro Producciones; por tanto, no me lo pensé dos veces y me apunté la fecha en mi personal agenda.
En esta ocasión el formato que nos traían era acústico y con la sola presencia de Carlos Traque a la voz y Ricardo Ruipérez a la guitarra, muy acorde a esta situación actual en la que el público tiene que permanecer sentado y en donde harían un amplio repaso a su dilatada trayectoria.
Una vez acabé la jornada laboral me acerqué al recinto con tiempo de sobra para entrar y observar el buen ambiente que había en el exterior de recinto de la Lechera, con sillas por toda la zona y con la orientación del escenario, no especialmente grande, al lado opuesto a donde se había ubicado en otras ocasiones, es decir que esta vez estaba en dirección sur. Como es habitual en estos eventos, se nos tomó la temperatura al entrar.
Después de saludar a algunos amigos, me dispuse a ocupar mi localidad y esperar a que comenzase el evento, un cuarto de hora más tarde de la hora fijada para dar tiempo a sentarse a la gente, la cual en un buen número ocupaban las 700 localidades habilitadas para estos conciertos.
M Clan
Nada más salir a escena y vacilarnos sobre lo modositos que estábamos, todos sentados y relativamente tranquilos, comenzaron su recorrido por su amplia trayectoria con “Filosofía barata”, el corte que abría su disco “La sopa fría” del 2004, con el dúo pidiendo palmas a un público bastante animado, que no paró tampoco de cantar el conocido “Souvenir” de aquel famosísimo trabajo llamado “Sin enchufe” del 2001.
Tras agradecernos el venir y este reencuentro tras estos meses tan complicados que todos hemos vividos, esperando que nunca haya que volver a pasar por ello, llegaba el momento de “Para no ver el final”, la canción que daba nombre a su séptimo disco de estudio y que fue publicado en el 2010, siendo elogiada la labor de Tarque, al que desde mi posición le adivinaba más que le veía, por Ricardo Ruipérez, pasando a preguntarnos para cuantos de nosotros era el primer concierto post confinamiento, con muchas manos levantadas y a los que dedicaron su popular versión de la Steve Miller Band bautizada como “Llamando a la Tierra” muy coreada por los presentes y que estaba registrada en aquel “Usar y tirar” de 1999.
Turno ahora de recordar aquel “Defectos personales” del 2002 que contenía canciones como “Dando vueltas”, con la gente dando palmas y un Tarque que alternaba la armónica con otros instrumentos en función de la pieza, siguiendo con “Calle sin luz”, que iniciaba su obra del 2010, pidiéndonos que diésemos palmas e intercalándola con fragmentos del “Gloria” de los Them de Van Morrison, mientras la gente lo daba todo desde sus asientos.
Tal y como él mismo nos indicó, Tarque ha empezado a tocar la guitarra en esta gira y acompañó a Ruipérez en la genial “Roto por dentro”, presente en “Memorias de un espantapájaros” del 2008, recibiendo el cantante un aprobado por su interpretación con la guitarra, para pasar a preguntarnos si tenemos esperanza, dando paso precisamente a “La esperanza” de su última obra “Delta” de hace 4 años, animando a la gente a que les acompañasen con las palmas, algo para lo que no tuvieron que insistir.
Ya con Tarque sólo a la voz recordaron los orígenes de la banda a primeros de los 90 con la primera canción que tocaron como grupo, “Perdido en la ciudad”, esa temazo presente en su estupenda ópera prima “Un buen momento” de 1995, buscando en todo momento la complicidad con la gente como en ellos es habitual, tras la cual el cantante volviese a coger la guitarra en “Gracias por los días que vendrán”, la que cerraba su disco de hace exactamente una década.
Llegaba ahora el momento de recordar un par de temas de su último trabajo, ese “Delta” del 2016 que han recuperado para este formato y que muestran lo que fue su sueño americano, comenzando por “California”, en la que quisieron agradecer a sus técnicos y road manager y a todos los que están haciendo posible que la música vuelva a sonar en directo, antes de continuar con el corte que daba nombre al disco esa “Delta” que es una bella y tranquila canción.
M Clan
Siguiendo la evolución más “reciente” de la banda hay dos temas que me encantan y casualmente fueron interpretados esta noche de manera consecutiva, comenzando por ese “Las calles están ardiendo”, o deberían como dijo Tarque, de su disco del 2008, con la gente entregada y dando palmas, y la preciosa “Miedo” de su referencia del 2004, que fue dedicada a los verdaderos héroes de estas últimas semanas, los sanitarios, confiando en que no se vuelva a repetir y recordándonos que en nuestra mano está, mientras la gente no paraba de cantar y de alzar las manos.
Reiteraron lo contentos que estaban de volver a estar con nosotros, antes de despedirse de los presentes, al menos de manera temporal, con “Hasta la vista rock and roll”, la que cerraba “La sopa fría” de hace 16 años, mientras la gente arropaba dando palmas y el grupo interpretaba algún fragmento de otra canción que no logré reconocer.
Aunque se fueron, la gente demandaba insistentemente su vuelta y esta fue con su revisión del corte de Rod Stewart que la banda rebautizó como “Maggie despierta”, que aparecía en “Sin enchufe”, con Tarque a la guitarra y Ruipérez animándose a ponerse de pie y acercarse a las primeras filas, concluyendo con un fragmento del “Te quiero igual” de Andrés Calamaro, siendo unida a la esperada y cantada “Quédate a dormir” del “Usar y tirar” y con el dúo animando a la gente a arroparles con los coros, en uno de los momentos de mayor comunión entre grupo y asistentes de toda de la noche.
Tras salir de nuevo del escenario y volver al poco tiempo, quisieron agradecer a la organización el esfuerzo por hacer estos eventos en fechas tan complicadas, llegando el turno de la inmensamente esperada “Carolina” de aquel “Sin enchufe”, grabada por muchos de los presentes y cantada por prácticamente todos, para despedirse definitivamente con ese “Concierto salvaje” de su último disco, con Tarque a la guitarra y deseando que nos podamos ver el próximo año en un concierto a la antigua usanza, con los dos músicos tocando de pies y dejando las tablas tras casi dos horas sobre ellas.
M Clan o Carlos Tarque y Ricardo Ruipérez dieron un gran concierto, muy entretenido y ameno dentro de las circunstancias que nos toca vivir, consiguiendo que todos los presentes saliésemos con la sensación de haber vivido una noche especial en compañía de dos músicos de un nivel muy grande.
Esperemos que cumplan lo prometido y el próximo año puedan volver en formato eléctrico, disfrutando de un concierto de los de antes, lo que será buena señal para todos, músicos, público, organizadores y la sociedad en general.
Y tras dejar la zona en la que estaba ubicado y mientras la gente iba saliendo por secciones, me fui del exterior de La Lechera después de haber disfrutado este concierto, más intimo de lo habitual, de unos M Clan que han sabido amoldarse a las circunstancias con mucha clase y esa noche lo pudimos disfrutar gracias a la gente de Mouro Producciones.