The Bridge Tavern La Finca, Puente San Miguel, Cantabria
www.insonoro.com
Siguen saliendo conciertos más que interesantes a pesar de los límites de capacidad y al hecho de tener que verlos sentados, pero al menos durante los meses de verano y pese a esta pandemia que aún sufrimos está habiendo cierta actividad, no tanto como la quisiéramos, pero algo es algo.
Y uno de los locales que ha consolidado la propuesta de ofrecer música en vivo es The Bridge Tavern La Finca, el local situado en Puente San Miguel que todos los viernes y muchos domingos oferta diversos eventos, como ya hemos comprobado en diferentes ocasiones, la última hace más o menos un mes.
En esta ocasión íbamos a disfrutar con la propuesta de la Green River Tribute, un cuarteto cántabro compuesto por Víctor Quevedo a la voz y guitarra, David Holgado a la guitarra eléctrica y coros, Miguelo Sánchez al bajo e Iván Sainz-Rozas a la batería, a los que había visto en directo en otra ocasión y con diferente formación y que, como su nombre bien indica, homenajean a esa banda única como es la Creedence Clearwater Revival.
La verdad es que me apetecía mucho recordar esos viejos temas de la banda, disuelta hace casi 50 años, y que en sus apenas 5 años de existencia dejaron 7 grandes discos que han perdurado en la memoria de la mayoría de los seguidores del rock y cuyas canciones siguen siendo versionadas por muchos grupos a día de hoy.
Tras una espera que se prolongó durante media hora sobre la hora fijada, comenzaron su actuación con el genial “Born on the bayou”, del segundo disco de la banda “Bayou country” de 1969, con Víctor cantando con mucha fuerza y la formación en su conjunto tocando con mucha clase y desmelenándose al final, para, después de presentarse y agradecer al local el haber contado con ellos, continuar con “Up around the bend”, del quinto trabajo “Cosmo´s factory” de 1970, otro mítico corte del grupo y con David, como durante casi toda la velada, reforzando la propuesta con sus coros.
Green River Tribute
Seguimos en el mencionado quinto plástico del grupo con “Who'll stop the rain”, más tranquila y con Víctor acompañándose de una guitarra acústica en vez de la eléctrica, tras la que nos preguntaron si estábamos a gusto con afirmativa respuesta antes de lanzarse a tocar “Commotion” de su tercer disco “Green River” de 1969 y que habla sobre las ventajas de la vida rural, con su cantante arrodillándose y viéndose disfrutar a toda la banda.
Continuaron interactuando con el público en cada pausa y siempre que la ocasión lo requería, como cuando nos anunciaron como una balada la movida “Travellin´ band”, presente en su quinto trabajo, para recordar un tema mucho más clásico, concretamente de los año 50, como es ese “Suzie Q” de Dale Hawkins y que el grupo versionó en su primer y homónimo disco “Creedence Clearwater Revival” de 1968, con David haciéndola sonar como debe, un corte muy mítico y con la banda disfrutando su interpretación.
No paraban de buscar nuestra complicidad pasando a tocar ese temazo que es “Hey, tonight”, del sexto álbum de la banda “Pendulum” de 1970, con las guitarristas acaparando todo el protagonismo sin parar de moverse y con un genial David a los coros, para seguir con la no menos mítica “Down on the corner” que abría su cuarto trabajo “Willy and the por boys”, en la que Miguelo cobró más protagonismo.
Después de ajustar el sonido y charlar un poco con los presentes, se dispusieron a tocar el “Hello, Mary Lou” de Ricky Nelson que el grupo publicó en su séptimo y último disco “Mardi gras” de 1972, muy movido y bailable, para, después de tomarse un breve respiro, regresar a su tercer plástico con el genial “Lodi”, un gran corte que les quedó muy bien.
Tras pedir un aplauso para el camarero que les había acercado un poco de bebida, era el momento de otra pieza de ese mismo disco, la movida y dinámica “Tombstone shadow”, para, tras algún cambio de guitarra, adentrarse en ese sonido más country de “Lookin' out my back door”, de su quinta obra, muy bien ejecutado, relajando aquello con un tema del mismo álbum titulado “Long as I can see the light”, una bella canción que quisieron dedicar a las parejas presentes.
Lo que le faltaba a la actuación eran sombreros vaqueros y alguno apareció por allí antes de dedicar ese “Good golly, Miss Molly” a su autor, recientemente fallecido, Little Richard y que la banda versionó para su segundo álbum, lo que hizo que la gente no parase de moverse en sus sillas, para continuar con otra versión, en este caso del “The night time is the right time” de Nappy Brown, que el cuarteto grabó para su tercer disco, llevándonos por un sonido más rhythm and blues.
Green River Tribute
Llegaba el momento de recordar el último trabajo de la banda que se cerraba con la movida y pegadiza “Sweet hitch-hiker”, para relajar un poco el ambiente con “Someday never comes”, también presente en la mismo obra, una bella canción que supieron acabar con brillantez.
Pero no había tiempo para dormirse en los laureles y llegaba el momento de la genial “Molina” de su sexto trabajo y con Víctor sentándose en el prao mientras tocaba, antes de anunciarnos que ahora venía la que se llama como ellos, es decir “Green river”, ese gran tema que también daba nombre al tercer disco de la banda, muy guapo y movido y con el grupo demostrando su gran calidad.
Sin parar de vacilarse entre ellos, continuaban con “I heard it through the grapevine”, el tema que compusieron Norman Whitfield y Barrett Strong y que la banda registró en su quinto trabajo, quedándoles muy bien y con Víctor paseándose por la terraza con esa chulería que le caracteriza, para seguir con otra versión, en este caso del “I put a spell on you” de Jay Hawkins que abría su primer disco, una canción muy eléctrica y a la que supieron sacar provecho sobre todo en la parte central, donde dieron una auténtica exhibición técnica.
Regresábamos a los temas propios del grupo homenajeado con el genial “Bad moon rising”, presente en su tercer plástico, anunciando que se acercaba el final del concierto, aunque después seguirían tocando otro clásico como es “Proud Mary”, uno de los cortes más reconocibles de la banda, presente en su segundo álbum y con la gente todavía más animada.
Aunque hicieron amago de irse todos sabíamos que alguna más caería, siendo la primera esa versión del tema popular “The midnight special”, muy movido y que grabaron para su cuarto disco en donde también aparecía el inmortal “Fortunate son”, durante el cual fueron presentados los músicos y con el que supuestamente acababa su actuación.
Pese a que volvieron a intentar engañarnos con que se iban lo cierto es que todos esperamos al menos un tema más y, tras agradecer al local y a los presentes la respuesta que habíamos dado, con la terraza llena hasta los topes, llegaba el muy esperado “Have you ever seen the rain?” de su sexto trabajo y con el que, tras un video de recuerdo con los presentes cantando el estribillo de fondo, concluían sus dos horas sobre las tablas.
Sin duda alguna me quedé maravillado con la actuación que dieron Green River Tribute, repasando la amplia y grandiosa discografía de la Creedence Clearwater Revival, dando un concierto muy divertido y ameno, pero sin dejar a un lado la mucha calidad de todos los integrantes de la formación.
Siempre es un placer recordar estos temas de una banda de la que seguro conoces muchos más canciones de las que crees y que posiblemente sea una de la mejores bandas de rock de todos los tiempos y si su legado es más que dignamente interpretado como esta noche por la Green River Tribute, mejor que mejor.
Y así, tras despedirnos de algunos amigos allí presentes, nos fuimos del The Bridge Tavern La Finca de Puente San Miguel que sigue apostando por la música en directo, algo que siempre hay que agradecer, tras pasar un más que genial rato con la Green River Tribute.