La verdad es que se me ha pasado julio casi sin darme cuenta y mucha culpa de ello lo tiene la gente del Beltane Fest que, desde junio y hasta finales de agosto, han animado las noches de la localidad de Comillas, habiendo asistido allí al menos una vez por semana desde su inicio.
Y este último viernes del citado mes llegaba a la citada localidad una de las bandas más esperadas por la organización y es que llevaban contando con The Baboon Show para su cartel desde hace ya algunos años pero ya sea por cuestiones personales de la banda o bien por el maldito Covid no los habían podido traer, estando anunciados para la edición del pasado año que, como es lógico, tuvo que cancelarse por la pandemia.
The Baboon Show son un cuarteto sueco que practican un rock potente, con ciertos ramalazos punks y que fue surgió en el 2003 en Estocolmo, estando integrado por sus miembros fundadores Cecilia Boström a la voz, Niclas Svensson a la bateria y Håkan Sörle a la guitarra, contando desde hace 8 años con Frida Ståhl al bajo y habiendo publicado hasta la fecha 8 discos de larga duración, además de diferentes Ep´s, singles y recopilaciones, por lo que, como se puede ver, la actividad de la banda es importante.
Se había generado mucha expectación con la visita de dicho grupo y es que son una de esas formaciones que se han ido ganando el cariño y el respeto de los seguidores de esta música en nuestro estado a base de conciertos realmente explosivos, como pudimos comprobar in situ, y grandes canciones que son ya auténticos himnos.
Una mezcla de nervios e ilusión se unían de camino a la citada villa, pero también cierta incertidumbre porque la tarde era muy lluviosa, aunque parece que la lluvia cogió miedo y, poco antes de la actuación de los suecos, cesó para no aparecer nada más que de manera muy puntual y de forma leve.
The Baboon Show
La organización del Beltane había adelantado en media hora tanto la apertura de puertas como el comienzo de la actuación debido a las nuevas medidas del gobierno de Cantabria, facilitando así el desplazamiento a aquellos que tuvieran que viajar lejos y llegar antes del toque de queda.
Mientras cogía mi asiento en primera fila y charlaba con alguna de las personas que tenía cerca, fuimos oyendo por megafonía como nos recordaban las medidas a tener en cuenta para el perfecto funcionamiento del evento, con una buena presencia de público, que fue llegando de manera paulatina para que, cuando 15 minutos después de la hora fijada, estuviera cada uno en su asiento adjudicado.
Nada mejor que poner como intro el “Take on the world” de Judas Priest que fue unida al “There' s gonna be some rockin'” de AC/DC para que supiéramos lo que nos íbamos a encontrar en esta noche, subiendo todos al escenario menos su vocalista y comenzando la velada con ese “No afterglow”, de su último Lp “Radio rebelde” del 2018, apareciendo, ahora sí, Cecilia como un huracán, un gran tema con el que buscaron y lograron que la gente cantase con ellos.
Tras saludarnos brevemente, llegaba el turno de “The shame”, que abría aquel “Damnation” del 2014, muy pegadiza y con una buena muestra de la calidad del guitarrista, mientras la cantante no paraba ni una segundo, tirándose por el suelo, algo que haría en reiteradas ocasiones, continuando su actuación con el sonido machacón de “Queen of the dagger”, que iniciaba su “People’s Republic Of The Baboon Show Formerly Known As Sweden” del 2013, haciéndonos mover la cabeza con la intensidad de dicha pieza, mientas Cecilia movía el cable del micro como si quisiera atraparnos.
Agradecieron nuestra acogida con un eskerrik asko, sin duda por sus habituales visitas al territorio vecino y agradeciendo al Beltane el haber contado con ellos, para presentarnos lo último que han grabado, un Ep llamado “I never say Goodnight”, publicado a finales del pasado 2020 y que es un extracto de lo que la banda estaba trabajando cuando llegó la pandemia, y en donde cuentan con temas como ese “Which way will you go”, con esa machacona batería y que empieza lento, relajando levemente la noche pero igual de pegadizo e intenso, saliendo un amigo de la formación a tocar la armónica, que fue seguido, como en el citado trabajo, por “Some piece of peace”, antes del cual saludaron y brindaron con agua, un corte con un ritmo más pesado y contundente que el precedente, con ese parón hacia la mitad en que fue Håkan el que se hizo de la voz principal y metiendo aún más tiza a medida que acababa la canción.
Uno de los temas que más me gustan de la banda y en lo que, por lo visto esta noche, coincide mucha más gente, es el magistral “Me, myself and I”, de su obra del 2016 “The world is bigger than you”, muy celebrado nada más reconocerlo y con ese genial final, con su cantante dándolo todo y consiguiendo meterse en el bolsillo a toda la concurrencia, para continuar con la muy pegadiza y coreable “Tonight”, de ese mismo trabajo, con la que en un concierto normal no pararíamos de saltar y dejándonos un gran solo de guitarra.
The Baboon Show
Pese a que aquí lo del inglés lo llevamos de aquella manera, los miembros de la banda no paraban de buscar la interacción con la gente, agradeciendo el recibimiento de manera frecuente, saliendo Niclas a saludar con una música sexy de fondo, siendo a continuación presentados los integrantes del grupo con breves solo, rompiéndose una cuerda de la guitarra lo que obligó a cambiarla, pasando a ser el guitarrista precisamente el que se hiciese cargo de la voz en “Dig on”, también de su obra del 2016, sin Cecilia sobre las tablas que subiría en la parte final para arropar con los coros, contando el corte con una prolongada parte instrumental y con constante arengas de Håkan.
Parece ser que las charlas no eran del agrado de todo el mundo y en primera fila tuvimos que aguantar a un tío muy pesado diciendo a todas horas que se aburría y molestando a los presentes, para continuar con ese “Faster faster harder harder” de aquel “Betsy’s revenge” de hace ya 14 años, que, como su título indica, fue tocado a toda pastilla, con la gente enloquecida y la cantante tirándose por el suelo, para retornar a su trabajo del 2018 con esa potente y rápida “Holiday”, muy pegadiza y con la concurrencia vibrando con la intensidad y la entrega de la formación.
Reiterando los saludos y agradecimientos a los asistentes, no dejaron el citado “Radio rebelde” para continuar con ese “You get what you get”, una auténtica pasada de canción, muy pegadiza y de las que en directo disfrutas a tope, siendo muy aplaudida, para continuar el repaso a la citada obra con otra de mis favoritas como es su versión del “Same old story” de sus paisanos Knutna Nävar, una maravilla y muy celebrada, con todos los músicos cantando en primera fila puño en alto en la parte final y que nos puso los pelos de punta: un gran homenaje a esa banda comunista de los años 70.
Después de esta canción Cecilia abandonó el escenario, siendo el momento de ese “Again” que cierra su último larga duración, haciéndose Håkan de la voz, con ese sonido rockero y ese estribillo tan pegadizo y reiterativo, mientras se despedían y nos agradecían nuestro trato, marchándose mientras nos saludaban y dejando el final de la pieza de fondo mientras se iban apagando las luces.
The Baboon Show
No tardaron mucho en volver a las tablas, haciéndolo con ese sonido muy rockero de “It's a sin”, de su disco debut “Don´t don´t don´t” del 2005, con Cecilia bajando al foso de los fotógrafos, lo que provocó que la gente se animará y aquello pareciera una olla exprés, continuando con la machacona “Class war”, que abría su obra del 2016, con la batería muy presente, siendo un corte breve pero muy directo.
Llegaba el momento de recordar aquel disco del 2010 llamado “Punk rock harbour” y que contenía temas como ese “Playing with fire” o la del fuego como dijeron desde el escenario, rápido y muy pegadizo y con todo el mundo dando palmas a instancias de la banda, con una parte cantada en castellano por Håkan, para, sin dejar dicho trabajo, lanzarnos ese “We fight in the night in the bushes”, muy corta y directa y tocada a toda pastilla por el grupo.
Y como en el citado trabajo, a la anterior pieza le seguía la que da nombre a esa obra de hace 11 años, “Punk rock harbour”, con la hiperactiva Cecilia haciendo flexiones, para luego echarse agua por encima, mientras ese sonido de batería machacón del principio nos introducía en un tema muy aclamado, aunque nada que ver a cuando llegó el esperadísimo “Radio rebelde”, del disco de igual nombre, con la gente entregada y dándolo todo, con muchos levantándose de sus asientos y otros tantos aguantándonos las ganas porque es ralamente una pasada de canción y en directo aún más, agudizando ese poder de convocatoria que tiene la banda, especialmente Cecilia.
The Baboon Show
Y aunque la formación abandonó el escenario, de allí nadie se movía y la gente pedía más y allá que regresó el cuarteto para tocar las dos últimas canciones que sonaría esta noche, comenzando con ese “Hurray”, de su trabajo del 2018, con ese sonido rockero a lo AC/DC que nos hizo mover la cabeza con muchas ganas, antes de anunciarnos que iban a tocar una más, siendo esta “You got a problem without knowing it” de su disco del 2010, aunque la han revisado en formato acústico para su Ep de finales del pasado año, pero esta vez sonó eléctrica, muy machacona y pegadiza y demostrando que suena genial en directo, terminando con la cantante encima de la bateria y poniendo así final a su velada.
Y así, tras hora y cuarenta cinco minutos sobre las tablas, acababa el concierto de The Baboon Show que recogieron muchos aplausos, con todo el mundo puesto en pie y celebrando la genial actuación de esta banda sueca que pasó por Comillas como si fuera un ciclón musical, ganándose, eso sí, el reconocimiento de todos los presentes que, estoy seguro, repetiremos visitan en cuanto vuelvan cerca y, a ser posible, en primera fila y saltando con sus canciones.
Personalmente me dejaron con la boca abierta y las pilas cargadas para una buena temporada, y es que dieron un concierto muy intenso y vibrante, en el que, por poner algún pero, en algunos momentos se dedicaron mucho a hablar y eso hace que pueda perderse el interese y más aquí que el nivel de inglés es el que es, pero, con todo lo que nos dieron esta noche, es solo una mera anécdota.
Si te gusta el rock and roll salvaje, ese que te hace moverte aunque no sabes quién es el grupo y no conoces a The Baboon Show, no sabes lo que te estás perdiendo, así que te aconsejaría que les pegaras una escucha a su música por las redes sociales y que, sin dudarlo, fuera a verlos en directo.
¡Uno de los mejores conciertos que he visto recientemente!
Y así, con una sonrisa de oreja a oreja por lo vivido esta noche, me fui para casa, muy contento por este concierto y, aunque siempre hay algunos que no entienden la situación que estamos pasando y dieron algo de trabajo al personal de seguridad el evento, en lineras generales la gente se comportó muy bien y todos disfrutamos, una vez más, de esa fiesta que es el rock and roll.