Comenzaba el mes vacacional por excelencia como es agosto y, además, el de las fiestas de Torrelavega y lo hacía en dicha ciudad, donde, durante la primera semana de agosto y en el Teatro Municipal Concha Espina, iba a tener lugar una edición de ese ciclo llamado Escenario 39300 que el año pasado organizó la gente de Noche de Rock en colaboración con el ayuntamiento de esta localidad, aunque este año ha sido la concejalía municipal la que ha tirado para adelante con la idea: es bueno que esta programación se asiente y sobre todo que sea de la mano de las instituciones.

Aunque los actuaciones habían comenzado el lunes, mi primera aproximación al mencionado lugar sería en la jornada de martes en la que íbamos a disfrutar de la actuación de R.A.D, una banda a la que vi en su primer concierto, hace ya dos años y en donde ya apuntaban maneras y a los que no había podido volver a ver aunque si algunos compañeros de esta web que hablaban maravillas del grupo.

Este trió torrelaveguense, que está integrado por Darío a las voces, Germán a las guitarras y Álvaro a la batería, pese a que no han podido tocar todo lo que les hubiera gustado por cuestiones de localización y por supuesto por la pandemia, ya han registrado un primer trabajo llamado “Vindio live session” , que publicaron poco antes del confinamiento general y del que nos hablaron en una entrevista que les hicimos

Llegué con cierta prontitud al Teatro y aún no había mucha gente, pero, a medida que se acercaba la hora del concierto, éste se fue llenando, consiguiendo una más que buena entrada de gente necesitada de música en directo, apagándose las luces a la hora fijada, mientras nos daban las indicaciones a seguir por megafonía.

Y allá que fueron subiendo, de manera escalonada, los integrantes de la banda, siendo recibidos por unos aplausos que se tornaron silencio cuando empezaron a sonar las primeras notas de ese “20”, uno de los temas registrado en el Ep del que hacía mención antes, con ese inicio tranquilo y sosegado, mostrando mucha sensibilidad y dramatismo en su propuesta, a la vez que iban sumergiendo a los presentes en su visión de la música.

Continuábamos el repaso a sus canciones con “Immersion”, que comienza de manera  lenta y relajada pero que va ganando fuerza en la parte del estribillo, para luego alternar calma e intensidad en la parte central, con mucha presencia escénica del cantante y con un intenso final. Realmente me gustó mucho esta pieza en directo.

No querían perder esa magia que se había creado, con la gente escuchando con mucha atención y sin oírse nada más que la música, continuando con “Flutter”, que también  empieza relajado pero que va ganando fuerza a medida que avanzaba el corte, trasmitiendo muchas sensaciones con esos cambios de ritmo y de intensidad que nos muestran. Es de admirar como consiguen envolvernos con su música casi sin darnos cuenta.

El trío es muy parco en palabras y se centran exclusivamente en su música pero nos saludaron fugazmente antes de recuperar otro tema de ese Ep como es “Lucidez”, precisamente el que le abría, casi sin saborear los aplausos y con ese comienzo calmado que es roto por el rasgado sonido de la guitarra, ganando en fuerza y haciéndonos mover la cabeza en la recta final.

Un silencio casi sepulcral se hizo mientras Germán afinaba la guitarra, siendo el momento de “Dark days”, con un bonito y sosegado comienzo a cargo del mencionado Germán, sumándose luego Álvaro y poco después Darío, manteniendo ese tono tranquilo para, hacia la mitad, meter más intensidad de manera paulatina y luego acabar de manera calmada.

Íbamos avanzando en la actuación de los R.A.D y ahora era Álvaro quien dio inicio a “Burn it slow”, dando caña desde el comienzo, siendo más potente que las precedentes y demostrando que también se saben defender muy bien en las partes más contundentes, para volverse luego más lenta y pesada y con Darío cantando casi a cápela, dejándonos una gran interpretación.

Sin casi pausa llegaba ese inicio lento de “Hive mind”, siendo solo Germán el que la arrancar para luego entrar Darío, dotándolo de más energía y fuerza con la presencia de Álvaro, para sonar más adelante la guitarra más cruda y potente, dotando de otro matiz a su música que, si se profundiza en ella con calma, es rica en variedad.

Probablemente la canción que más nos gusta a muchos de sus seguidores es “Discipline my soul”, la tercera y última pieza que registraron en ese Ep y que, además, era la que le cerraba, dejándonos una gran interpretación, con ese comienzo tan relajado que luego va poco a combinándose con momentos más cañeros, especialmente es su parte final. Temazo.

Tras ésta llegaba el momento de “Blackout”, muy intensa y potente desde su inicio y con un estribillo cañero, agudizada por ese sonido crudo de la guitarra que nos hizo vibrar, mientras su cantante acababa tirado por el suelo.

Y no hubo tiempo para más porque, nada más terminar esta canción, la banda se fue del escenario, saludando ligeramente, para no volver más y eso que la gente pedía otra pero el tiempo de su actuación, en torno a una hora, se había terminado.

Lo cierto es que R.A.D dieron un muy buen concierto, corto pero intenso y, además, demostrando la calidad  que tienen todos ellos, con esas canciones que no solamente son buenas sino que te saben enganchar, gracias a ese aire melancólico que tienen y recordando que esos sonidos que triunfaron hace 3 décadas también han calado en las actuales generaciones pero dotándolos de una personalidad propia.

Habrá que seguir muy de cerca la trayectoria de esta banda que en poco tiempo se ha hecho un hueco dentro de la escena local torrelaveguense y que, si todo va como debe, será reconocida en el resto de nuestra comunidad con rapidez.

¡Una de las bandas de más futuro de Torrelavega!

www.facebook.com/R.A.D.39300
rad39300.bandcamp.com/releases

Y nada más terminar esta actuación me fui del Teatro Municipal Concha Espina, aunque, por lo que me dijeron algunos amigos, parte del público se quedó para despedir al grupo a la salida del recinto con una fuerte ovación, la que no les pudieron dar como merecían en el interior, algo más que ganado por este trío que nos ofreció una gran velada en estas jornadas Escenario 39300 que se iban a desarrollar durante toda la semana en este céntrico recinto.