Desde hace muchos años el rock and roll y la música en general tiene su punto de referencia en Los Corrales de Buelna en el Bar Kalimba, un local por donde han pasado muchos grupos de nuestra tierruca y que ha sido lugar de reunión del rockerío de la zona, siempre con un buen ambiente y con el querido Gustavo al frente.

Por allí me he dejado caer muchas veces a ver conciertos, quizás no tantas como me hubiera gustado, siendo la última vez que vi allí uno ya hace 3 años, si mi cabeza no me falla, aunque haya parado en muchas ocasiones más a tomar algo.

Esta semana central del mes de mayo iban a tener lugar una serie de conciertos en dicho local para homenajear a Juanma “El Rata”, una persona muy querida en el ambiente musical de la zona, que falleció ya hace unos cuantos años y en cuya memoria desde entonces se organiza el Rat & Roll, siendo en esto ocasión un evento de 4 días.

La primera jornada no acudí por motivos laborales, pero, según pude saber, la jam session que se organizó fue realmente impresionante y tanto los músicos como el público disfrutaron a tope; donde si nos íbamos a dejar caer era en la velada del viernes ya que allí iban a actuar Ojo Pipa.

De este trío cántabro, integrado por Daniel García guitarra y voz, Rodrigo David bajo y coros y Víctor de Oliveira batería y coros, os hemos ido hablando mucho en los últimos años ya que son unas cuantas las veces que los he visto en directo, la última a principios de este mismo 2022, habiendo editado hasta la fecha un solo disco llamado “Ojo pipa” que salió en el 2020.

Nos acercamos con cierta antelación para coger un buen sitio y poder ver el concierto de la mejor manera posible, habida cuenta que el local no es muy grande, saludando a algunos de los presentes y es que ya había una buena presencia de público pese a que todavía restaba media hora para su inicio.

El evento se retrasó en torno a una hora sobre el horario fijado debido a cuestiones laborales de Rodrigo que llegó con el tiempo justo para probar un poco el sonido y comenzar la actuación para no demorar aquello más.

Y los Ojo Pipa comenzaron su actuación con “R.R.C.”, tocada a toda velocidad y dejándonos un tema corto y directo que puso en antecedentes a aquellos que no conocían a la banda de lo que les esperaba, para continuar con uno de los que no pueden faltar en su repertorio, “Lijas”, y es que es un temazo, muy cañero y de los que me gustaron desde la primera vez que le escuché.

Tras un breve respiro para tomar aire habida cuenta la intensidad que tienen sus actuaciones y más con el calor que había allí dentro, continuaron con otra que ha calado muy bien entre la gente, ya de esta etapa más actual como trío, como es “Chavalería tiquismiquis”, muy intensa y vacilona, después de la cual pidieron algo de bebida para refrescarse y continuar con “Oda”, una canción que todavía no había escuchado y que comenzó de manera  tranquila para luego endurecerse y terminar con un enloquecido final.

Llegaba el momento de “Reintegro”, una pieza de reciente factura pero que pude escuchar la anterior vez que los vi en directo, con ese comienzo relajado y con Dani tomando todo el protagonismo, aunque bien arropado por los coros de sus compañeros, siendo unida con la mítica “Tortilla de patata”, de su único trabajo hasta la fecha y de la que en su momento hicieron un vacilón video clip, siendo muy cantada por todos los presentes como suele ser habitual.

Tras ésta, era el turno de tomar aire y recodarnos que tenían camisetas a la venta, para pasar a interpretar “Scalextric”, que se inicia muy relajada para luego intensificarse y dejarnos una maravillosa locura, siendo seguida por “Moreno” con ese comienzo movido y que se acelera más en el estribillo, relajándose un poco al final pero solo brevemente ya que luego vuelve a enloquecer.

Pasábamos ahora a una que ya escuché la primera vez que los vi en directo hace ya más de 3 años pero que aún no han publicado en redes, “Tarta de galleta”, que empieza relajada y con un sonido más ligero, pero con una parte instrumental muy lograda y con mucha calidad, para, después de afinar, ser el turno de “Flor”, otra que presentaron la anterior vez que le vi en el Rock Beer The New, comenzando intensa y con la guitarra muy presente, para luego relajarse y conteniendo muchos contraste de sonidos que hicieron lucir a la canción.

Nos comenzaron a avisar de que ya quedaba poco, mientras se quejaban del calor y nos recordaban las camisetas que tenían a la venta, siendo Dani el que en solitario comenzó “Chicha o fasito”, aunque luego le acompañaron sus compañeros, primero a los coros y luego con sus instrumentos, siendo un corte muy intenso y potente, con el batería desatado, siendo precisamente Víctor el que nos avisó de que después llegaba “Espumito”, una pieza muy potente e intensa y que siempre va vinculada a la anterior.

Y nos anunciaron que la siguiente era ya la última, agradeciendo nuestra presencia y reconociendo que se lo habían pasado  muy bien, siendo el turno de “Pifostio”, ese ya clásico de la banda que aparecía en su único trabajo y que nos dejó un enloquecido final de concierto.

De esta manera, tras algo más de cuarenta y cinco minutos sobre las tablas y con los músicos exhaustos después de haberlo dado todo, concluía este concierto de unos Ojo Pipa que nos ofrecieron una actuación con un sonido muy intenso y potente, en un local repleto de gente con ganas de pasárselo bien, lo cual hizo que todos saliésemos muy contentos por lo allí vivido.

El trío se ha sabido hacer un nombre dentro de la escena cántabra a base de sus conciertos, ya que no han parado de actuar siempre que han podido y es que sus actuaciones son de esas experiencias que si te gustan la primera vez, repites siempre que puedes.

Mientras la banda sigue preparando nuevos temas que, suponemos, en poco tiempo suban a las redes sociales, seguiremos disfrutando de su música en vivo allá por donde pasen, algo que recomiendo a todos aquellos que no lo hayan hecho ya.

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