Recuerdo conocer a los Platero y Tú en el año 1990, en las páginas musicales del diario vasco Egin, que era un punto de referencia para saber lo que se cocía por Euskal Herria; todavía pasaría un tiempo hasta que los empecé a escuchar, viéndoles en directo 2 veces durante el año 1993 en la desparecida discoteca Saja de Torrelavega. Después, seguí de cerca la trayectoria del cuarteto, pero no pude volver a verlos en concierto.
Por todo ello, cuando Fito formó Fito y Fitipaldis en 1997, militando todavía en la añorada banda, a casi todos los que seguíamos la escena rockera nos gustó aquella aventura y recuerdo verlos en los conciertos de Radio 3, aunque lo cierto es que pensaba qua aquello solamente era un proyecto al margen, sin más pretensión.
Lo cierto es que el final de Platero y Tú hizo que el artista bilbaíno se centrará en ese otro proyecto, el cual le ha llevado a cuotas de popularidad tremendas, algo por todos conocido, siendo en este momento la banda de rock que más tirón tiene dentro del estado español.
El año pasado, dicho grupo editó su séptimo disco, “Cada vez cadáver”, y la gira se iba a iniciar este 2022 en Santander con dos fechas, ya que de la primera se habían agotado las entradas, algo que también pasaría con la segunda, pero al final, todos los problemas derivados del Covid llevaron a que los conciertos se pospusieran al final de dicha gira.
Hacía ya 15 años que no veía a Fito y Fitipaldis en directo y las dos anteriores veces que lo había hecho fue en el mismo Palacio de los Deporte de Santander, lugar en donde iban a tener lugar estos eventos, el recinto cerrado más grande que tenemos en nuestra comunidad y en donde había estado por última hace más de 3 años.
Como ya he comentado, este era el último concierto de esta gira, por lo que había mucha expectación, algo acrecentado por el hecho de que la capital cántabra celebraba durante esas fechas sus fiestas patronales, entrando estos conciertos dentro del programa de festejos.
Morgan
Precisamente por esto, me temía que me iba a encontrar o bien atasco o bien que tendría que aparcar bastante lejos, ya que enfrente de donde tenía lugar el concierto se situaban las atracciones de la feria, y al final hubo un poco de atasco y tuve que dejar el coche a unos 2 Km del Polideportivo: del mal el menos porque llegué a tiempo para poder recoger mi acreditación y ubicarme en la zona de la grada que me correspondía, detrás de los técnicos de sonido y luces y justo enfrente del escenario.
Los horarios que nos habían pasado se cumplieron a rajatabla y enseguida estaban sobre el escenario la gente de Morgan, ese grupo formado en Madrid hace una década, compuesto por Nina de Juan a la voz y al piano, Paco López a la guitarra, Ekain Elorza a la batería y David Schulthess a los teclados, contando para estos conciertos con los refuerzos de David González al bajo y Gabi Planas a los teclados y guitarras.
Pese a que en esta web hemos ido hablando de ellos, no había profundizado mucho en su música hasta esa semana, encontrándome una más que interesante propuesta y una discografía compuesta por “North” del 2016, “Air” del 2018, el directo “Home (Live at Circo Price)” del 2021 y “The River and the Stone”, su última referencia y que se publicó también el pasado año.
Lo cierto es que, cuando la banda se subió al escenario, con una intro de fondo, fue recibida con muchos aplausos, algo que iría aumentando con el paso del tiempo y es que es una de esas formaciones que ya se ha ido labrando un nombre, como demostraron desde el principio con “Alone”, ese corte recogido en su último disco y en donde los teclados tomaron el protagonismo inicial dentro de una pieza muy suave y cantada de manera muy dulce, pero que luego fue intensificándose y que fue muy aplaudida, lo cual no es de extrañar ante semejante temazo.
La anterior fue unida por el sonido de la batería con “Blue Eyes”, de su segundo disco, con la gente dando palmas y la sección rítmica sonando intensa, para luego relajarse temporalmente y más adelante retomar esa intensidad que acompañará el tema, para, sin parar, presentarse y agradecernos nuestras presencia, esperando que pasásemos un buen rato con ellos y continuando con “Attempting”, de su ópera prima, más guitarrera y más potente dentro del estilo de la banda y con un gran solo de teclados en la parte final.
Morgan
Llegados a este punto del concierto, la banda se volvió a presentar y recordó que tenían algunos discos de los que iban a seguir presentando temas como el pegadizo y movido “Oh Oh”, de su trabajo de hace 4 años, muy bueno y de los que se te quedan rápidamente, pasando ahora a “Roar”, de su ópera prima, con un ritmo constante y relajado pero con cierta intensidad y una batería potente.
Nos preguntaron qué tal estábamos, con positiva respuesta tanto del público como de la propia banda, para continuar en su primera referencia con “Work”, la cual se inicia de manera relajada pero con ritmo, para luego intensificarse y con los presentes acompañando con sus palmas, pasando el grupo a confesar que les da pena que se acabe la gira por los buenos momentos pasados, siendo el turno de “Home”, la que abría su primer álbum y que fue dedicada a la gente de Fito y Fitipaldis y a su equipo, comenzando con esa guitarra relajada y mostrándonos Nina, por si alguien no se había dado cuenta, que tiene una gran y muy bonita voz.
Empezaron a despedirse con “River”, uno de los singles de su actual disco, muy pegadizo y animado y que hizo que la gente disfrutase todavía más de lo que allí se estaba viviendo, para seguir, tras agradecernos nuestra acogida, con “Paranoid Fall”, también de su más reciente obra, con un comienzo potente y con la cantante dejando los teclados y situándose en medio escenario, con un gran solo de guitarra que hizo que la canción brillase todavía más.
Morgan
Regresando Nina a su posición inicial para tocar los teclados, nos recordaron que tienen alguna pieza en castellano como es el caso de “Sargento de Hierro”, de su segunda obra, tranquila y relajada pero con fuerza en el estribillo y sobre todo en la parte final, para despedirse definitivamente, agradeciéndonos nuestra acogida y presentando a los músicos que estaban en el escenario, concluyendo con “Another Road (Gettin' Ready)”, la que la precedía en dicho trabajo de hace 4 años, muy movida, con un cierto aire funky y una importante presencia del bajo
De esta manera y tras más o menos una hora sobre las tablas, concluía la actuación de unos Morgan que dieron un concierto muy bueno, siendo muy bien recibidos tanto por sus propios seguidores como por los de Fito y Fitipaldis y es que demostraron ser una banda que te engancha pese a que no hayas escuchado mucho de su música.
La verdad es que me gustaría verlos en un concierto propio porque tienen mucha calidad y canciones que te llegan muy dentro, con una vocalista con un registro vocal fantástico y un grupo de músicos con una calidad y una clase musical fuera de toda duda, quedando todo ello muy bien empastado.
Lo cierto es que fui a ver a Morgan por la curiosidad de ver que me encontraba y cuando acabó su actuación estaba rendido a su música, que os recomiendo deis una escucha si todavía no lo habéis hecho y, sobre todo, que los veáis en directo.
Mientras se producía el habitual cambio de instrumentos en el escenario, algo que se hizo de manea fluida, pude observar la enorme cantidad de gente que allí había, uno de los privilegios de estar en la grada, y es que no paraba de entrar más y más público tanto a la pista como a las gradas.
A estas alturas, todo el mundo conoce la carrera de Fito y Fitipaldis, compuesta por siete discos, titulados “A puerta cerrada” de 1998, “Los sueños locos” del 2001, “Lo más lejos a tu lado” del 2003, “Por la boca vive el pez” del 2006, “Antes de que cuente diez” del 2009, “Huyendo conmigo de mí” del 2014 y su más reciente y el motivo de esta gira, “Cada vez cadáver”, del pasado año, además de algunos discos en directo, recopilatorios y trabajos con otros artistas.
Junto a Fito Cabrales a la voz y las guitarras, se encuentras desde el inicio de este grupo Javier Alzola al saxofón, Carlos Raya a las guitarra y que lleva con ellos desde el 2006, Boli Climent, bajista desde el 2009, y el último en llegar, Coqui Giménez batería desde el pasado año.
Y la actuación se inició con un video introductorio de la banda en dibujos animados, mientras los presentes gritaban con ganas y grababan en video el inicio del concierto el cual, ahora sí, arrancaría con ese “A quemarropa”, de su actual trabajo, muy pegadiza y muy guitarrera, con la gente cantándola y el saxo muy presente, siendo seguida por “Lo que sobra de mí”, de su anterior plástico, muy movida y muy bien acogida según comenzó, siendo despedida con una gran ovación y es que es un gran corte.
Fito & Fitipaldis
Tras éste, Fito nos saludó y nos agradeció el haberlos esperado tras haber tenido que posponer las fechas de la primavera, aprovechando para desear felices fiestas a los santanderinos y continuando con la mítica “Por la boca vive el pez”, del disco del mismo nombre, con la gente enloqueciendo y cantando a gritos este clásico, mientras todos los asistentes disfrutaban con este tema y Carlos y Javier se situaban cada uno en una de las tarimas que había ambos lados del escenario, con el público coreando ese final y aplaudiendo con ganas.
Se tomaron un breve respiro que les llevó a interpretar otro clásico como es “Me equivocaría otra vez”, también presente en su trabajo del 2006, con ese sonido relajado pero elegante tan característico del músico, regresando a su actual disco con “Cielo hermético”, mientras se iban proyectando diferentes imágenes sobre las pantallas, como ocurriría durante toda la velada, que se iban alternando con momentos del concierto, con un muy potente comienzo, en un tema de los que se te queda rápido y con Fito acercándose a las primeras filas para que la gente enloqueciese todavía más.
Nos fuimos 19 años atrás para brindar con ese “Whisky barato” que nos ofrecían en su tercer disco, uno de los temas que más me gustaron según le escuché y que este día fue muy cantado, con un duelo entre Fito y Javier muy aplaudida y que fue despedido con una estruendosa ovación, para continuar con el comienzo relajado de “Las palabras arden”, de su actual obra, una pieza muy bonita y elegante y que contó con un brillante solo de guitarra final de Fito.
Casi sin pausa llegaba el momento de su versión del “Todo a cien” de La Cabra Mecánica, presente en su trabajo de hace 13 años, muy buena y muy bailable, con el saxo teniendo mucho protagonismo, tras la que nos dijeron que no se cansaban de decir que éramos una bendición, a lo que la gente respondió con gritos de “Fito, Fito”, siendo el momento de la que abría su anterior obra de estudio, es decir, “Entre la espada y la pared”, que comenzó tranquila y con imágenes de carreteras, intensificándose hacia la mitad y logrando una muy buena respuesta.
Fito & Fitipaldis
Seguía proyectando diferentes imágenes en las pantallas antes de dar paso a “En el barro”, un corte de su actual trabajo, metiendo mucha caña, muy bueno y con mucha intensidad, con la gente cantándolo con ganas, acabando con los músicos, a excepción del batería lógicamente, tocando en la parte central del escenario, reconociendo que como esta era la fecha final de gira, cada canción es especial así que no iban a parar de darnos las gracias, pasando a interpretar “A morir cantando”, el tema que sigue al anterior en su presente disco, que empezó de manera lenta pero con un sonido de rhythm blues que les quedó muy bien.
Nos confesó que una de las mayores alegrías de esta gira, además de volver a vernos, era tocar con Morgan cada noche y esta era la última, saliendo a tocar los miembros del citado grupo “Quiero gritar”, de su actual referencia, ganando mucho con esta colaboración, con Nina de nuevo demostrando la gran voz que tiene, en un momento irrepetible, con la gente acompañando con sus palmas esta genial unión entre ambas bandas y con Fito pidiendo un gran aplauso para los cuatro integrantes de Morgan.
Ya sin los invitados, continuaron recorriendo esta obra con “Si me ves así”, con un comienzo relajado para luego coger más fuerza y que fue muy cantada por todos los presentes ya que es un corte muy pegadizo y que se unió, con el sonido de la batería, con ese mítico tema que es “Viene y va”, de aquel disco del 2006, arropado por los aplausos de todo el pabellón, muy esperado y con Carlos teniendo su momento de protagonismo especial
Regresaron a su actual plástico con la que lo da nombre y además lo abre, “Cada vez cadáver”, que personalmente me gusta mucho, más relajada, con muy buena acogida y con la gente coreando el final, para que fuese la batería la que diese comienzo a “Tarde o temprano”, de su quinto disco de estudio, muy movida y bailable, con los presentes disfrutando y Fito corriendo de lado a lado buscando conexión y participación de un público que coreó el final, concluyendo el corte con un gran solo final de Fito.
Y también fue el cantante el que dio inicio con su guitarra a “La casa por el tejado”, otro de sus temas más añejos, concretamente el que abría su tercer trabajo, con todo el mundo acompañando con palmas y cantando con muchas ganas la canción ya que es otra de las siempre esperadas, pasando a agradecernos nuestra acogida y presentando a los músicos de la banda, con sus imágenes en las pantallas, siendo el turno de la también siempre celebrada “Antes de que cuente diez”, la que daba nombre e inicio a su disco de hace 13 años, muy cantada, con Carlos y Javier cobrando mucho protagonismo y con un final explosivo.
De esta manera se despedían y nos saludaban pero la gente no quería que aquello se acabase tan rápido y, aunque se hicieron algo de rogar, allá teníamos sobre las tablas a parte del quinteto, confesándonos que cuando hicieron la siguiente pieza, “Abrazado a la tristeza”, la que cerraba su cuarto disco, nos esperaba que le iba a costar tanto cantarla, para la que contaron de nuevo con la colaboración de Nina a los teclados y la voz y Carlos tocando la slide guitar, en una canción que les quedó muy entrañable y bonita.
Fito & Fitipaldis
Los otros tres miembros de la banda regresaron y Nina se marchó entre grandes aplausos cuando llegó el turno de la canción más conocida de la formación, “Soldadito marinero”, de su exitoso tercer disco, con los móviles iluminando el cielo del pabellón, siendo una pieza cantada, como era de esperar, por todo el mundo y alargando ese final que puso a cantar durante un buen rato a todo el pabellón, haciendo que aquello fuera una auténtica caldera.
De nuevo se despidieron y nos saludaron, pero la gente pedía más y no paraban de gritar el nombre del protagonista de la noche que enseguida regresó con todos sus compañeros para interpretar ese clásico de los Platero y Tú llamado “Entre dos mares”, muy celebrado y cantado por todos los presentes, para confesar que ahora sí que acaban y que la siguiente “Acabo de llegar”, de su cuarto disco, era la última ese este concierto y de la gira, con los asistentes y la banda dándolo todo, saliendo en la parte final todos los miembros de su equipo y terminando con un duelo entre el saxo y la guitarra.
De esta manera y tras dos horas y media sobre las tablas, nos saludaron con efusividad y el público les devolvió los aplausos con muchas ganas, mientras la banda hacia volver a salir a los Morgan, arrodillándose los unos frente a los otros como signo de respeto mutuo y con Fito visiblemente emocionando ante el final de esta gira y los aplausos que estaban cosechando.
Fito y Fitipaldis son una banda espectacular, que han llegado a lo más alto gracias a esos temas que enganchan y que llegan a la gente de todas edades y gustos, convirtiéndose en el grupo más grande del rock estatal actualmente, sin ningún género de dudas, y conciertos como el de esta noche no hacen nada más que agrandar su leyenda.
Fito & Fitipaldis
Lo vivido allí esta noche será difícil de olvidar por todos los allí presentes y por los propios protagonistas y es que es muy difícil que se consiga una comunión tan grande entre grupo y un público tan numeroso como el que esta noche llenaba el Palacio de los Deportes de Santander y en donde no sabemos cuánto tiempo tardaremos en volver a disfrutar de la citada banda.
Sin duda alguna un conciertazo y ahora toca esperar a ver qué tal funciona esa nueva gira por teatros y auditorios en la que se van a embarcar durante los próximos meses a partir del otoño
Una vez la banda abandonó el escenario y las luces se encendieron, puse rumbo a mi vehículo, con el recuerdo de haber asistido a uno de esos conciertos que quedaran grabados para siempre en mi memoria gracias al buen hacer de los geniales Morgan y al carisma y esos clásicos que Fito y Fitipaldis nos brindaron en esta noche de sábado en plena fiestas de Santander.
Por cierto, agradecer a Live Nation España, la organizadora del evento, el buen trato que tuvieron con este equipo. Así da gusto.
23/07/2022 
Txutxy Cano 
Palacio de los Deportes, Santander, Cantabria
