Si algo tiene el verano es que cambiamos nuestros hábitos y nuestras rutinas y acudimos a sitios a los que no solemos ir el resto del año; aquí en Cantabria se notan mucho estos 3 meses en donde las actividades suelen dirigirse a esas zonas de costa que, durante la otra parte del año, tienen poco movimiento o éste se sitúa en otros lugares más alejados de las playas.
Un ejemplo lo tenemos en la localidad de Suances, una villa en la que durante el resto del año la actividad mayor está en la parte alta del lugar, mientras que en el verano es su costa la que recibe numerosas visitas de turistas, algunos de localidades próximas que tienen allí su segunda vivienda y muchas de gente que viene de otras provincias o países.
Con todo este bullicio, algunos valientes sacan adelante jornadas para dar a conocer a grupos y a artistas cántabros y que se pueda ver el talento que en esta comunidad tenemos, como así han hecho la gente de la Hacienda Ginger, un bello local en el que no recuerdo haber estado antes, ubicado en pleno paseo marítimo y que durante estos meses de verano iba a tener una programación muy interesante de conciertos, coordinada por Cristian López de La Esencia del Garaje y Melopea.
Lo cierto es que, por coincidencias con otros eventos, no había podido acudir hasta este momento, pero tenía apuntada desde hacia tiempo la fecha del ultimo viernes del mes para acudir a ver a nuestros amigos de Leona, a los cuales ya hacia casi un año que no veía en directo.
Este ha sido una de las formaciones que más ha actuado durante la pandemia y varias las veces que los he visto, siendo un grupo fundado en el año 2019 en Santander y que esta compuesto por Esther a la voz, Toño guitarra y voces, Gerar bajo y coros, Fer a la batería, y su última incorporación, David Costa a los teclados, habiendo subido muchos temas a redes sociales desde el año 2020, algunos de los cuales se han recogido en un Ep titulado “Lo mejor de nuestra vida (Primera parte)” publicado en el pasado mes de junio. Si queréis conocer algo más de la banda, esto fue lo que nos contaron en una entrevista que les hicimos al poco de debutar en directo.
La verdad es que me sorprendió ver la gran cantidad de gente que había en dicha localidad y es que francamente no suelo dejame caer mucho por allí en verano, haciéndolo solamente en momentos puntuales, principalmente conciertos. Lo cierto es que costó un poco aparcar pero llegué a la hora fijada para el inicio del evento.
Leona
Al llegar allí, la banda estaba ultimando los detalles para el concierto, que se demoraría media hora en su inicio para dar tiempo a la gente a llegar de la playa o de sus ocupaciones y al grupo a charlar con parte de los presentes. Mientras, pude observar el bello local y el buen ambiente que allí se respiraba.
El ahora quinteto comenzó su andadura con el sonido de los teclados a modo de intro, mientras Esther iba bailando delante del escenario y alrededor de sus compañeros, antes de arrancar ya plenamente con “Escalofrío”, uno de los primeros temas que conocimos de la banda, empezando a dar fuerza a la noche, saludando y pidiéndonos cantar con ellos, para continuar, sin pausa, con “Presa”, otra de sus inicios y que es muy pegadiza, consiguiendo enganchar a la gente.
Nos pidieron palmas para acompañar a “Mi viaje”,el primer corte que conocimos de la formación y que de alguna manera es como el origen de la misma, muy animado y movido, tras el cual nos dieron las buenas noches y se mostraron encantados de estar aquí, para pasar a “El debate electoral”, una de las que primero me enganchó a la banda, una canción para bailar y en la que pidieron que diésemos palmas y les ayudásemos con nuestras voces, algo que consiguieron.
Ese sonido distorsionado del pedal de la guitarra dio comienzo a “Tres”, la primera que caería de ese Ep recién publicado, con Toño cantando el inicio de esta pieza tan pegadiza y animada, para pasar ahora a “Nuevo año”, mostrándose a gusto y animados porque este sea un verano normal después de estos dos tan raros, otro tema con mucho gancho.
Recordaron aquella canción que dedicaron a su ciudad y en especial a los locales de la misma, pero que hicieron extensivo al resto de bares de otras localidades, en este caso a Suances y en especial al Ginger, siendo dicha pieza “Sdr”, de las más coreadas siempre y pidiendo colaboración a la gente en el estribillo, pasando a dedicar el siguiente corte, “Mi refugio”, de su reciente Ep, a dos personas que hacían años en fechas próximas y a un grupo de senderismo compañeros de Fer y que estaban allí presentes, un bonito tema con un logrados contraste de intensidades.
Continuaron el recorrido por su actual Ep con “Drama universal”, para la que nos pidieron que les acompañásemos con las palmas en ese inicio con mucha presencia del bajo y de la batería, un corte que me gustó mucho, para, sin parar, enlazar con ese ya clásico “Cállate”, uno de los que más han calado entre sus seguidores y con ese estribillo tan pegadizo.
Agradecieron al Ginger el que hubiera contado con ellos y dedicaron a Cristian “Nada puede salir mal”, pidiendo palmas para acompañar a Esther bailando y taconeando, siendo otra de las que gustan mucho, para desear que nos estuviera gustando lo que nos estaban ofreciendo y confesando que a veces meten más caña, siendo el turno de esa versión del “King George” de los Dover, que, como ellos mismos dijeron desde el escenario, está hecha a su manera y que sirvió para presentar a David, empezando suave y luego con más fuerza, pidiéndonos que nos levantásemos a saltar, como así hizo parte de la concurrencia.
Leona
La banda sigue creando temas nuevos y esta noche tocaron alguno que yo no había escuchado como “Extremoduro en Madrid“, que habla sobre una de las cosas que se perdió por culpa de la pandemia como era la gira del grupo que da nombre a la canción, cantada con mucha rabia y con Esther, una vez más, demostrando su clase, dejándonos una gran pieza.
Nos animaron a pasar por su puesto de merchán y a seguirlos en redes, continuando con algo más tranquilo, siendo el turno de “Un ave que no vuela”, muy bonita y tocada con mucha delicadeza, con la terraza cantando el estribillo, para, casi sin pausa, pasar a interpretar “Tierras”, más cañera, con partes muy intensas y una letra con mucho mensaje.
De regreso a su Ep, era el momento de “Programa espacial”, otra que era la primera vez que oía en directo, muy lograda y que es de las que más me emocionan, anunciándonos que se iban a ir yendo, siendo la ocasión de escuchar la que faltaba de sonar del mencionado Ep, “Otro mundo”, que sirvió, además, para presentar a la miembros de la banda, avisando que esta canción era para bailar y cantar, muy pegadiza y con Toño dando un paseo fuera del escenario para involucrar más a la gente, dejándonos con esa palmas y coros finales.
Pero todavía quedaba una canción que, esta sí, teníamos que cantar y bailar a la fuerza y es que llegaba su versión del “Bad romance” de Lady Gaga y de hecho así fue, con todo el mundo cantando y buena parte de los presentes bailando al son de la conocida pieza.
Y, aunque hicieron ademan de irse, los que les hemos seguido sabíamos que alguna más tenía que caer, por lo que, tras la petición de más canciones por parte del público, continuaron con “Resistiremos”, que dedicaron a la gente que había estado bailando, pidiendo más palmas para una bella pieza, con esa parte distorsionada por el pedal de Toño y una interesante parte instrumental, siendo unida con su himno, “Leona”, muy coreado, con Toño dándolo todo y Esther cantando y corriendo entre las mesas.
Leona
Y de esta manera y tras casi una hora y media de concierto, concluía la actuacion de unos Leona que ofrecieron un recital muy bueno, como siempre hacen, pero notándose que han mejorado mucho desde la última vez que les vi y mostrando también ese punto adicional que aporta la presencia de los teclados.
Los temas ya conocidos siempre funcionan y las nuevas composiciones se notan mucho más elaboradas, todas ellas con un toque muy personal pero con muchos matices entre las mismas, pudiéndose decir que no hay dos canciones de Leona ni parecidas, pero todas ellas funcionan muy bien en vivo.
Supongo que no tardaremos mucho en volver a ver a una banda que no para de crecer y cuyo reconocimiento ya supera la frontera cántabra y eso es por algo.
Tras despedirme de la banda y de algunos presentes, puse rumbo a casas, contento por el concierto que acababa de vivir de los Leona y de haber descubierto un local que apuesta por el rock and roll y la música en general en directo y a donde regresaría solo 7 días después y es que, cuando estás a gusto en un sitio, como esta noche en el Ginger, y escuchando buena música, como la que nos ofrecieron Leona, gusta repetir.
29/07/2022 
Txutxy Cano 
Txutxy Cano
Hacienda Ginger, Suances, Cantabria
