Por segundo viernes consecutivo me acercaba a la Hacienda Ginger de Suances para ver y escuchar música en directo, en este caluroso verano cántabro y lo hacia para descubrir a una banda a la que todavía no había visto en directo pero que gente como Oskar de Noche de Rock, que ya los había visto, hablaba maravillas de ellos: siempre es bueno hacer caso a los que saben.
Lo cierto es que ese día lo tenía apuntado porque iban a tocar La Sombra de Andrómeda, pero un contratiempo de su guitarrista hizo que tuvieron que cancelar y la gente que organiza estos conciertos, con Cristián de La Esencia del Garaje a la cabeza, consiguieron, en tiempo récord, solventar la situación y disfrutar de esta experiencia con clásicos de la música brasileña.
Porque eso es lo que nos iban a ofrecer Brasilsound, que es la banda de la que estaba hablando, una formación integrada por Reginaldo Nunes Da Paixao a la voz y la guitarra, Pablo Mazzoni Zis a la guitarra y coros, Manuel Cadavieco López al bajo y Federico Romero Baffa a la batería y que, como dije un poco más arriba, es un grupo que, creado hace años, se centra en llevar a su terreno, una mezcla de diferentes estilos propios de la cultura brasileña y sudamericana en general, temas bastante conocidos dentro del territorio brasileño.
Como en la jornada del viernes anterior, tuve que dar un par de vueltas para aparcar y eso que el día, aunque caluroso, amenazaba lluvia, pero a la gente nada la impide salir en verano y a mi tampoco, llegando cuando la prueba de sonido estaba concluyendo y observando como, en esta ocasión, el escenario se situaba debajo de la tejavana del local para así evitar posibles cancelaciones debido a la aparición de la lluvia.
Hubo que esperar la media hora de rigor para que comenzase la actuación, aprovechando para charlar con algunos amigos y cambiar impresiones de como estaban siendo nuestros veranos, en un local que estaba lleno hasta los topes y en donde se pudo observar lo variado de la gente que veranea en estos lugares de costa.
Brasil Sound
El grupo inicio su descarga con “Reggae power” de Natiruts, muy animada y con ritmo, tras la que se mostraron encantados de tocar aquí y esperando que lo pasásemos muy bien, continuando con su adaptación de “Naticongo”, del mismo artista, con un sonido lento, pero dejando un corte muy pegadizo que también gustó a los presentes que empezamos a bailar.
Avanzaron en su repertorio con “Malandragem” de Casia Eller, muy quedona, con ritmo y con las guitarras sonando de manera destacada, tras la que se animaron a tomar algo y proseguir con “Sorri sou Rei” de Natiruts, con un ritmo bailable y movido, muy pegadiza y de las más celebradas hasta ese momento y es que se veía que muchos de los presentes ya habían visto a la formación en anteriores ocasiones.
Más relajado fue ese comienzo reggae de “Na positiva” de Natiruts, muy pegadizo y haciendo un parón en una parte del mismo, tras el cual nos agradecieron nuestros aplausos, para pasar al animado y bailable “Tive razão” de Seu Jorge, en donde me acabaron por enganchar al concierto y con un momento de especial protagonismo de Pablo.
Siguieron buscando que nos animásemos y nos moviésemos con su música y ahora llegaba el turno de “Leve com você” de Natiruts, con un positivo mensaje, antes de pasar a otro tema que fue dedicado a Victor Teira, amigo de la banda, muy pegadizo y con un sonido relajado pero bailable y en el que nos pidieron que diésemos palmas para acompañarles.
Brasil Sound
Una de las canciones más animadas y que más me gustó de la noche fue “Surfista do lago paranoia” de Natiruts, que lógicamente fue dedicada a los surfistas allí presentes, una pieza muy movida y bailable y en la que de nuevo nos pidieron colaboración con las palmas, además de servir como presentación de los músicos y tras este pegadizo corte y un breve respiro, continuaron con el comienzo suave de “Eu quero demais”, también de Natiruts, pero que luego se volvió animado y con ritmo.
Tras bromear sobre que nos iba a regalar un diccionario de portugués para que supiésemos de que iban las letras, llegaba el momento de “Na moral” de Jota Quest, con un inicio más guitarrero y siendo una pieza muy pegadiza y quedona que nos hizo a todos cantar, para pasar a pedirnos palmas para el comienzo de “Me deixa” de O Rappa, también con buena presencia de la guitarra, y un ritmo machacón y muy quedón.
Su cantante reconoció que desde que llegó a esta localidad tenía ganas de tocar allí y por fin podía hacerlo, recordando algunas anécdotas vividas en esta villa, para pasar a otro corte muy movido y con las guitarras sonando con mucha clase, antes de avisarnos de que ya iban terminando, agradeciendo nuestra acogida y la respuesta recibida, pasando a tocar un tema más fuerte y potente.
Nos anunciaron de que ahora sí su repertorio llegaba a su fin y lo hacía con un tema que fue de los que más me gustó de toda la noche, “Que país é este” de Legiao Urbana, muy machacón y potente y en el que nos anunciaron sus próximos conciertos, tras el cual se despidieron, mientras la gente pedía más, siendo el momento de “Do seu lado” de Jota Quest, para la que nos pidieron palmas, muy guitarrera, pero con contrastes de sonido, siendo una pieza muy marchosa y bailable.
Y todavía hubo tiempo para volver a escuchar “Surfista do lago paranoia” de Natiruts, en lo que fue un genial fin de fiesta, con la gente cantándola y bailando, dando por finalizado su actuación tras más o menos hora y media de velada.
Brasil Sound
Lo cierto es que la gente de Brasilsound dieron un concierto muy animado y entretenido, en un ambiente muy acogedor y en donde se notó el gran nivel musical que tienen sus cuatro componentes y ese gancho que tienen en la ejecución de esas composiciones que nos ofrecieron, que hace que, aunque no conozcas dichas canciones, como era mi caso, te animes a bailar y a cantar con ellas.
Realmente fui a este concierto con ciertas reservas sobre lo que allí me iba a encontrar ya que, aunque había oído hablar de la banda, apenas les había prestado atención, pero descubrí a una formación muy interesante y que ofrece una propuesta no muy habitual entre mis preferencias ni entre lo que se suele escuchar por estos lares, pero que ha sabido calar entre un buen número de gente y eso es por algo.
Abre tu mente y dejate llevar por la propuesta de unos Brasilsound que, no solo te van a hacer pasar un buen rato con esos temas animados y bailables, sino que vas a disfrutar con la ejecución de los mismos por parte de sus músicos.
Tras despedirme de algunos presentes, me marché de la Hacienda Ginger muy contento por haber podido acudir a un par de los conciertos que este local ha ido ofreciendo en estos meses de verano, lo que me ha permitido descubrir una propuesta tan interesante como la de estos Brasilsound que, aunque lo hicieron en sustitución de La Sombra de Andrómeda, a mi me sirvió como excusa perfecta para conocer un más que interesante grupo.
Por cierto, mucho ánimo a La Sombra de Andrómeda y esperamos muy pronto poder volver a verlos en vivo.