Cuando a mediados del mes de agosto fui a ver el Rockablanca Fest a Suances, me quedé con la espina clavada de no haber podido llegar a tiempo, por cuestiones laborales, a la puesta de largo de la banda Amia, pero en ese mismo evento los integrantes de dicha formación me confirmaron la fecha del 10 de septiembre como su próximo concierto, por lo que apunté ese día en mi agenda.

La actuación iba a tener lugar en el Espacio Creativo José Manuel Illera de Torrelavega, una de las pocas zonas en donde se pueden hacer conciertos en dicha ciudad y en la que solamente había estado una vez previamente y fue en la misma semana del confinamiento, cuando todos sabíamos que las cosas pintaban muy mal.

En dicho centro han estado programando concierto desde hace un tiempo, pero no me había sido posible acudir por coincidencias con otros eventos que tenía apuntados previamente y en algún caso por cuestiones personales, pero este segundo sábado del mes de septiembre iba solventar esa deuda, así como la que tenía con Faltos de Riego, la otra banda del cartel y a la que hacía casi 4 años que no veía en directo.

Como es habitual en estas últimas semanas, este evento coincida con otros bastante interesantes lo que hizo que no hubiera mucha gente cuando llegué, algo que se solucionó parcialmente a la hora de empezar las actuaciones, aunque siempre estaría bien que, cuando se pueden hacer conciertos en Torrelavega, el público respondiese em mayor número.

Mientras charlaba con algunos de los presentes, pude contemplar que no estaba el escenario que se había solicitado al ayuntamiento, por lo que las bandas tuvieron que tocar a ras de suelo en una sala muy bien preparada, con unos buenos medios y una capacidad más que interesante para poder hacer conciertos y recibir una buena afluencia de espectadores.

Con mucha puntualidad se subieron al escenario Faltos de Riego, con ya 16 años de actividad, como nos recordaron sus componentes y cuya formación está integrada por Chaves a la voz, Pablo y Rafa a las guitarras, Tito al bajo y Mata a la batería, habiendo editado hasta la fecha 4 discos y una maqueta.

Y para comenzar su andadura nada mejor que esa declaración de principios que es “250 Pavos" a que también abre su último disco “Mejor esto que morirse” de finales del 2020, muy pegadiza y quedona, siendo seguida por “Bada bing”,  de su segundo trabajo “La bida es asín” del 2015, otra muy divertida y que suele ser muy bailada en sus conciertos, aunque esta noche la gente estaba fría y situada en la parte trasera del recinto.

Siguieron desgranado el que es su último disco con “Youtubers”, recordándonos quienes eran, una pieza muy rápida y corta, pero con un mensaje bastante claro, pasando a destriparnos series de décadas pasadas con “Contiene spoilers”, otra de su plástico de hace 7 años, muy lograda y en donde se pudo apreciar lo bien trabajados que tienen sus coros.

Tras cosechar algunos aplausos, que fueron agradecidos por la banda, continuaron con “Redes sociofecales”, otra de su segundo disco y que confesaron que les tenía que salir bien ya que es con la que probaron, un clásico de su repertorio y que fue tocada a toda velocidad, siendo unida, como en dicho trabajo, con la cachonda “Tiburón”, muy divertida y que en otra situación más festiva hubiera provocado el desparrame de los presentes.

Regresaron a su actual disco con “Viejales”, con Pablo cantando la parte inicial, un tema divertido, aunque, como reconocieron al final, mostrando todo el respeto del mundo hacía la tercera edad, para reconocer que a veces hay que meter alguna versión para animar a la gente como fue en este caso el “Kualkier día” de los Piperrak que sonó muy bien.

De vuelta a su reciente trabajo era el turno de “Larry”, su homenaje a todos los turistas que se desmadran en vacaciones, del que comentaron que habían hecho un video, un tema muy corto y rápido, para recordar la conversación que habían tenido con la gente de Amia en el camerino sobre el reggaetón, siendo el momento de la genial y divertida “Globeros mix”, de su anterior obra “Perversiones” del 2017, en donde introducen adaptaciones de cortes conocidos pero con la temática ciclista adaptada, y con un amago de volver a recuperar la de Piperrak de por medio.

Turno ahora para que Chaves se fuese a comer unas patatas fritas y fuese Pablo quien cantase la versión del “21st Century Digital Boy” de los Bad Religión, que les quedó muy bien y que me recordó épocas pasadas, lo mismo que haría, ya con Chaves de vuelta, el “Carne pa´ la picadora” de La Polla Records, muy clásica y que todos conocemos, consiguiendo algo más de reacción de la gente.

Después de ajustar el micro del bombo, que se había movido, continuaron con “Elaifonseis”, adaptación del tema de los Motörhead y que fue publicado en su disco de hace 5 años, variando la letra por iPhone 13, muy animada y cañera, para continuar, tras advertirnos de lo bonita que estaban la luna, con una de su maqueta,” La maketa de los huevos” del 2008, concretamente “Centro comercial”, un clásico que les quedó muy animado.

Tras ésta, anunciaron que su concierto iba a terminar, siendo el turno de “Furgolistas”, otra de las que caerían de su disco del 2015, muy divertida y con las que pusieron el punto y final a sus cincuenta minutos sobre las tablas entre los aplausos de buena parte de la concurrencia.

He visto muchas veces a la gente de Faltos de Riego y creo que está ha sido probablemente en la que mejor han sonado, no solo por los medios que disponían, que facilitaban tal labor, sino también porque se vio a una banda muy compacta y sabiendo bien lo que querían hacer y disfrutando con ello.

Es cierto que el humor es la columna vertebral de su estilo, pero no por ello hay que restar merito a lo que hacen, sino todo lo contrario, ya que demuestran tener mucha imaginación para ir hilando cosas y que suenen cohesionadas, sin obviar la calidad musical de sus temas tanto los que son composiciones propias como las que son adaptaciones de otros.

Espero volver a ver pronto a estos chicos de El Astillero, con los que siempre disfruto y mientras tenemos todos sus discos en las redes sociales para seguir escuchándolos.

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Siguiendo con la buena labor de la organización del concierto y la buena disposición de los grupos, en un suspiro se hizo el cambio de trastos y enseguida iba a comenzar la actuación de unos Amia a los que, como dije un poco más arriba, no había visto todavía en directo pero que venían acompañados de muy buenas críticas de quienes ya lo habían hecho.

Este trío, del que tuvimos noticias a finales del pasado 2021, está compuesto por Nacho Galván a la voz y el bajo, Raúl Losada a las guitarras y Cesar Granado a la batería, todos ellos con una ya dilatada en bandas como Marlenne, Comité Rock o Coverdust por citar solo a algunos.

Y comenzaron su andadura con “Invencible”, la cual sonó fuerte y con un personal registró vocal dentro esta pieza muy potente, tras la que pidieron que nos acercásemos, antes de continuar con “Artificio”, con fuerza y energía, contando con una batería poderosa y demostrando, no solo la gran calidad de sus músicos, algo fuera de toda duda, sino también la singularidad y variedad de sus composiciones.

Enlazada con la anterior llegaba el turno de “Sobrevivir”, con mucha intensidad y mostrándose con mucha clase, con partes rápidas pero combinadas con otras más relajadas, para, tras una breve pausa, continuar con “Redención”, otra gran canción, muy compacta y con mucha fuerza, mientras la banda seguía sonando muy bien.

Fue el batería el que dio inicio a “Lengua de serpiente”, muy intensa y pegadiza, además de contar con un sonido muy conjuntado, siendo despedido entre muchos aplausos que la banda supo agradecer, para avisarnos que iban a continuar con algo más de caña, siendo el momento de “Miseria”, con un ritmo constante y luego endureciéndose más, incluso metiendo partes guturales, dejándonos una pieza, en su conjunto, muy dura y contundente.

Más rápido fue el comienzo de “Sangra conmigo”, que luego todavía se volvió más potente, pero con un ritmo constante y jugando con esos breves parones que tan bien les quedaron, antes de atreverse a hacer una muy personal versión del “Aerials” de los System Of A Down, la cual les quedó muy bien porque la supieron llevar a su terreno, sonando muy potente.

Con bastante fuerza comenzó “Danzando con el diablo”, acelerándose por momentos, con mucha intensidad y un estribillo pegadizo, para luego pasar a avisarnos de que iban a ir acabando, siendo el turno de “Estigmas”, empezando a toda velocidad y haciéndonos mover la cabeza, teniendo fuerza, pero siendo a la vez pegadiza y demostrando, una vez más, la buena voz de Nacho para este estilo de música que practican.

Ahora sí que llegaba el momento de despedirse y lo hicieron con “Llegaré”, comenzando Raúl con un sonido muy potente y con partes aceleradas, un pegadizo estribillo y con un sonido más fuerte, con agradecimientos para los presentes y para la organización antes del final del corte.

De esta manera y después de 50 minutos sobre las tablas, concluía la actuación de Amia, una banda que demostró muchísima calidad sobre el escenario y una variedad musical que hacía que no supieses por donde iban a continuar en el transcurso de un mismo tema, siempre manteniendo una cohesión dentro del mismo.

Sabía que la gente de Amia eran muy buenos músicos, pero lo cierto es que me sorprendieron gratamente con su estilo muy personal y con temas muy trabajados y muy variados, haciendo que nos metamos en su propuesta con facilidad y que casi sin darnos cuenta estemos moviendo la cabeza al son de sus piezas.

La banda sigue rodando y tiene algún concierto próximamente en vistas y ahora solo queda que esos temas que han grabado salgan a la luz y más gente conozca esta propuesta más que recomendable.

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Y a las 23.00 en punto acababa la noche en el Espacio Creativo José Manuel Illera, un lugar más que recomendable y apropiado para hacer conciertos y que esta noche nos ofreció dos grandes actuaciones de Faltos de Riego y Amia, dos propuestas tan interesantes como diametralmente diferentes, pero que nos hicieron disfrutar por igual. Agradecer la gran labor que se hace desde este espacio y la enorme profesionalidad con la que llevan a cabo las cosas; así da gusto y espero volver pronto.