Estamos viviendo un gran momento de conciertos en nuestra comunidad autónoma, y es que, pese a ser un territorio con poca población y menos aún de seguidores del rock, son muchos los eventos que se solapan en los fines de semana, unas veces con mejor respuesta y otras veces con afluencias más flojas.
Lo cierto es que este primer sábado de diciembre también había donde elegir, mucho, variado y para todos los gustos, pero tenía entre ceja y ceja desde hace varios meses el concierto que iba a dar Fito Garmendia, dentro de la breve gira que está llevando a cabo como presentación de su primer disco al margen de Rulo Y La Contrabanda, su banda principal, llamado “Ahora” y que ha sido publicado este otoño.
La actuación iba a tener lugar en ese magnífico recinto que es el Escenario Santander, a donde regresaba un mes después de mi anterior visita, estando acompañado el campurriano para estos conciertos por Iván Longo a la guitarra y voz, Juanma Pinto al bajo e Iván Luky a la batería, además del propio Fito como guitarrista y voz principal. Por cierto, recordaros que esta web también os contó como fue el estreno de esta gira.
Al llegar al lugar, en una noche totalmente desapacible con frío y lluvia, pude ver que la afluencia de gente era bastante importante, teniendo en cuenta las fechas, el clima y, porque negarlo, que tampoco Fito Garmendia es una persona que arrastre masas ni tampoco parece que lo pretenda.
Fito Garmendia
primero sus compañeros de formación, los cuales dieron comienzo a “Ahora”, apareciendo luego el principal protagonista, recibiendo una fuerte ovación, siendo ésta una pieza muy pegadiza y movida, con la gente empezando a cantar y a dar palmas, mientras Fito interactuaba con el público, dejándonos esa segunda parte del tema que es ya un clásico y que fue muy celebrada.
Sin pausa, la siguió “Carmen”, que fue unida a la anterior, comenzando más relajada, pero con un ritmo movido y siendo bastante pegadiza, tras la que nos agradeció el que hubiésemos ido a verlos y así darles calor en una noche tan fría, continuando con “Mis adentros”, con un calmado inicio, pero que luego cogió fuerza progresivamente y dejándonos con un pegadizo estribillo.
Se mostró muy orgulloso de su pasado, ese que todos tenemos, y que en su caso se llama La Fuga, deseando que nos gustará ese recuerdo a aquella etapa que iba a ir haciendo, comenzando con “Madrid”, de su tercer disco “A las doce” del 2001, con ese inicio animado y luego cogiendo velocidad y fuerza, contando con un gran solo de Iván Longo, vacilando al final con eso de que ésta os sonaba.
Regresando a las composiciones que integran su único disco en solitario, era el turno de “Escucha”, en la que reconoció su labor como profesor de guitarra, con alguno de sus alumnos entre el público, y como conoció el caso de uno de ellos al que le hacían bullying, algo a lo que hay que poner fin y sobre lo que iba ese tema, que empezó relajado, pero con un ritmo pegadizo y con otro buen solo de un Iván Longo, al que se le veía muy cómodo.
Fito Garmendia
Llegaba un nuevo momento para el recuerdo con “Amor de contenedor”, de aquel enorme “Negociando gasolina” del 2005 de La Fuga, y es que quien no lo buscó alguna vez, otro clásico, muy cantado y pegadizo y con la gente cantando a capela, para recuperar los cortes del disco que venía presentando con la canción “Contigo”, que fue dedicado a su hijo y a una amiga fallecida llamada Arantxa, la cual dijo que, desde el cielo, les estaría viendo, empezando tranquila, siendo una pieza muy bonita y relajada, pero con mucho sentimiento.
Uno de los temas que primero me han entrado por el oído de este disco ha sido “¿Dónde van?”, que fue el siguiente en sonar, tras agradecer a su equipo y presentar a los músicos que le acompañaban, así como saludar a su madre, allí presente, muy pegadizo y con la gente coreando el final, para, enlazando con una frase de ese corte, lanzarse con una versión del “Por mí”, de los Platero y Tú, muy cantada y con los asistentes disfrutándolo y acompañando con palmas.
Una vez más recordó la banda con la que fue conocido, siendo el turno de “Abril”, también de esa obra de hace 17 años, evocando lo jóvenes que eran y los recuerdos que le traía aquello, empezando Fito a capela y luego cogiendo algo más de fuerza, muy cantado y con un gran solo de Iván Longo, para preguntarnos si estábamos a gusto o preferíamos que fuesen acabando, con negativa respuesta de la gente a esto último, pasando a esa época en que quieres poner la cara buena del disco para salir de una etapa difícil, que es de lo que habla “Viento a favor”, con un comienzo bastante guitarreo, muy pegadizo y movido y, de nuevo, con Iván Longo luciéndose.
Fito Garmendia
Una de esas frases lapidarias y que resumen el concepto de vida que tenemos muchos es que “No solo respirar” es vivir, como decía aquella conocida canción de su banda madre y que estaba integrada en el último trabajo del artista con la citada formación, “Asuntos pendientes” del 2008, muy bien recibida, con un sonido muy machacón, pero combinando con partes más relajadas, acelerándose en la segunda mitad con el redoble de Iván Luky y un buen solo, otro más, de Iván Longo.
La humildad de las personas se nota en los gestos y de ésta va sobrada Fito Garmendia que recordó la suerte que había tenido de tocar junto a grandes bandas como Los Suaves, en uno de cuyos temas, concretamente en “Cuando la música termina”, se inspiró para componer “Trastienda del rock and roll”, el cual comenzó tranquilo y siendo una pieza bonita, pero calmada y con partes pregrabada de violín, para avisarnos de que se iban si no lo remediábamos, agradeciéndonos por apostar por el rock en vivo y avisando que la siguiente le traía también muchos recuerdos, siendo el momento de “Los molinos”, otra de aquel disco del 2008 de La Fuga, con un comienzo muy guitarrero, muy pegadiza y cantada y con la gente disfrutando.
Fito Garmendia
Se despidieron, saludándonos y con Fito besando el suelo del Escenario Santander, mostrándose muy agradecido, para volver enseguida ante el requerimiento de los asistentes, continuando con las dos que restaban de su disco, comenzando con “Despojos”, la cual empezaron de manera animada, reconociendo que todos somos un poco despojos, metiendo más caña en la parte central, para luego relajarse, antes de avisarnos que con la siguiente se iban definitivamente, siendo el turno de su esperada versión del “Preparados para el rock and roll” de los Alarma!!!, muy celebrada y con Iván Longo cantando la parte que hace Rulo en el disco, dejándonos un momento muy especial.
Y, aunque en un principio el repertorio ya estaba finiquitado, quisieron hacer una excepción y acabar el concierto de la misma manera que lo habían comenzado, es decir con “Ahora”, muy celebrado y con la gente disfrutando incluso más que al principio y haciéndonos cantar esa ya mítica segunda parte del tema.
De esta manera y tras algo más de hora y cuarto de actuación, concluía este buenísimo concierto que Fito Garmendia y su grupo nos brindaron, con mucha clase sobre las tablas y haciéndolo muy ameno y en donde la gente disfrutó mucho, todo ello rodeado de un ambiente muy familiar y con esos buenos cortes, tanto los de esta aventura en solitario, como los de su banda de origen e incluso aquellos ajenos, haciendo una buena selección, ya que no eligió los más conocidos.
Fito Garmendia
Fito Garmendia ha concebido un muy buen trabajo, que ha sabido defender en directo con mucha holgura, acompañado de tres currantes del rock cántabro como son los que están yendo con él en esta gira, los cuales hacen una labor sobresaliente, gira que, por lo que parece, va a seguir adelante durante los próximos meses, lo cual celebró.
Habrá que desear que este sea solo el primero de muchos más trabajos en solitario, al margen de su labor en esa banda enorme que es Rulo Y La Contrabanda, y es que creo que son cosas que se pueden compaginar; estaremos pendientes y os recomendamos escuchar a la banda y verlos en directo, si tenéis la oportunidad.
Después de despedirnos de algunos amigos y conocidos y con el Cd de Fito Garmendia debajo del brazo, marchamos del Escenario Santander, comentando el buen concierto que habíamos disfrutado y la profesionalidad y humildad de un artista como éste, que ha sabido sacar provecho de unas ideas que tenía por ahí escondidas, para publicar un gran disco de rock and roll y, además, haber podido comprobar su puesta en escena en un sitio tan idóneo como es este local.