A falta de pocos días para que terminase 2022, pudimos vivir una noche de contrastes en la madrileña sala Wurlitzer Ballroom de la mano de Matanzzo y Álvaro Escribano, quienes habían elegido el 17 de diciembre para presentar sus respectivos proyectos en vivo. Al tratarse de un fin de semana con gran cantidad de eventos musicales en Madrid, la entrada apenas sobrepasó la mitad del aforo de la sala, pero resultaba muy llamativa la importante presencia de prensa especializada, entre la que el concierto había suscitado mucho interés.
Los encargados de abrir fueron Fer (voz y guitarra; Minor Empires, Qverno) Jorge (batería, Hardboiled, Trono de Sangre) y David (bajo y coros; Max Meraki) power trío que recibe el nombre de Matanzzo y que en 2022 habían publicado su primer EP “Primavera esquizofrénica”. Cuatro canciones a caballo entre el post hardcore y el rock clásico caracterizados por una batería certera, un bajo firme y potente y una guitarra en perfecta sintonía con una voz suave y clara que parece sentir cada palabra que pronuncia.
Matanzzo
En definitiva, los cuatro cortes que conforman la ópea prima de la banda invitan a ser escuchadas poniendo atención a los más pequeños detalles pues, al igual que pasa con algunas películas, cada vez que se reproduce se redescubre. Y a quien tenga curiosidad por conocer las influencias de esta formación podríamos darle una pista indicando que, además de su EP, incluyeron en el setlist una versión de “Waiting Room” de Fugazzi, “4 A.M.” de Antemasque y “Pinball Wizard” de The Who.
Si os los perdisteis o si queréis volver a disfrutar de ellos, podréis verlos el 26 de enero de nuevo en la Wurli y el 3 de marzo en El Perro de la Parte de Atrás del Coche.
Matanzzo
Minutos después llegó el momento del combate de fondo a cargo de Escribano, quien traía bajo el brazo, en sentido figurado, su LP “En el camino está la perla” (título en clara alusión a la novela “En el camino”, de Jack Kerouac) y decimos lo del sentido figurado porque, a día de hoy no existe en un formato tangible y sólo puede ser escuchado en plataformas digitales o en directo, opciones de entre las cuales recomendamos encarecidamente la segunda, pues en vivo se magnifican exponencialmente las sensaciones que transmiten las ocho canciones que componen este trabajo.
Resulta complejo etiquetar el estilo de alguien que se ha criado literalmente entre discos, y que, entre unos proyectos y otros, lleva quince años en la música; pero podríamos atrevernos a afirmar que se perciben reminiscencias del rock y el power pop con ciertos matices de soul. Canciones que suenan a clásico pero que están completamente frescas, que invitan a moverse y a disfrutar de la experiencia; que transmiten una positivad que prácticamente obliga a sonreír aunque no quieras y que te hacen alegrarte de haber escogido precisamente ese concierto para pasar una noche de viernes.
Escribano
Además de los ocho temas del disco, artista interpretó también una versión de “De música ligera” de Soda Stéreo y “Te lo prometo” de Hendrik Röver; así mismo recuperó “I need you” de su etapa con The Hardtops -canción para que requirió la colaboración de Fernando Moreira- y “Uno más”, que fuera grabada con Odeón.
Y como todo lo que empieza ha de terminar, poco antes de las 23:30, aquellos privilegiados que habían (habíamos) podido disfrutar de una noche de rock de culto fueron abandonando la mítica Wurli visiblemente satisfechos con el espectáculo que acababan de presenciar pero con el pesar de la incertidumbre a cerca de cuándo podrían revivirlo, pues no hay fechas programadas para nuevos conciertos de Escribano. Para estar informados, no perdáis detalle de las actualizaciones en la web.