Los lunes suelo repasar los conciertos que va a haber el siguiente fin de semana, salvo que tenga claro a cuál acudir, y para esa semana, post minivacaciones de semana santa, había unos cuantos interesantes, pero me llamó la atención que, en el Rock Beer The New, iban a actuar dos grupos de los que me sonaban algo los nombres, pero que no tenía claro la música que practicaban, por lo que les pegué una escucha a ambas formaciones.

Nada más escuchar un poco de la música de ambas bandas, Toifelthal desde Navarra y Battlefield de la vecina Palencia, decidí que este iba a ser mi evento del sábado, ya que el sonido de ambos grupos me gustó mucho, practicando ambos Heavy Metal, pero con un matiz diferente y la verdad, como los conciertos de este estilo no suelen abundar en la agenda cántabra, lo tuve claro. Así que, por segundo día consecutivo, puse rumbo a la conocida sala santanderina, dispuesto a profundizar en la música de las dos bandas, ya que, pese a haber escuchado sólo un poco, me parecían más que interesantes, con la esperanza, además, de que fuese mucha gente y de disfrutar de dos grandes conciertos; lo cierto es que hubo una escasa afluencia de público, pero los que estuvimos gozamos de dos grandes actuaciones.

Las pruebas habían ido bien y rápidas, como nos dijeron desde la dirección de la sala, por lo que enseguida teníamos sobre las tablas a la primera de las bandas que iban a sonar esta noche, en este caso los palentinos Battlefield, una formación que este mismo año cumple 15 años de trayectoria, compuesta actualmente por Víctor González la voz, Iván Martínez guitara y coros, Emilio García guitarra y coros, Sergio Martínez al bajo y Abel López a la batería.

Venían presentando su cuarto disco, “We'll rock again”, que se había publicado apenas un mes y medio antes de esta cita, y que es el sucesor de sus otras obras “ Take a seat to witness your death” del 2010, “Before the storm” del 2012 y su anterior “Fucked up world” del 2018; como se puede ver, una ya extensa discografía. Comenzaron, precisamente, con el tema que daba nombre a su segundo plástico, “Before the storm”, con ese inicio relajado, para luego coger bien de fuerza, siendo la voz bien arropada por los coros de Iván, jugando con diferentes contrastes de intensidad, pero siempre con ese sonido clásico, para pasar a presentarse y siendo unido el anterior a “Monster”, el corte con el que se abre su actual disco, asomando la guitarra de manera calmada, para luego meter bien de caña, dejándonos un buen duelo de guitaras hacia la mitad del mismo y con un final más rápido.

Se mostraron encantados de estar aquí y agradecieron la acogida que habían tenido por parte de los responsables de la sala, para avanzarnos que la próxima era de su último disco, siendo el turno de “The wall between us”, la cual empezó con fuerza y con un muy buen sonido de guitarra, siendo Emilio quien se lució en el solo y con la voz sonando muy potente, para, sin dejar su reciente obra, dedicar la siguiente, “Old school”, como su nombre bien indica, a la vieja escuela, aunque antes, nos agradecieron el esfuerzo de haber ido, sonado muy potente y pegadiza y con ese estribillo que se te queda rápido, contando, además, con otro buen duelo de guitarras y con Emilio aportando sus coros para reforzar la voz en la parte final.

El siguiente tema era uno muy especial para la banda, como desde el escenario nos recordaron, ya que da título a su actual disco, “We'll rock again”, el cual empezó lento, pero con mucha fuerza posteriormente y un estribillo animado, muy pegadizo y poderoso, dando paso a un bueno solo de Emilio, acelerándose levemente, antes de dar paso a un breve, pero efectivo solo de Iván, siendo un corte con mucho gancho, para después recordar Iván sus años viviendo en nuestra tierruca, continuando en su recién estrenado trabajo con “Stay close”, que arrancó con fuerza y con un buen duelo de solos, siendo una pieza cañera y pegadiza y que en directo funciona muy bien.

Fueron avisándonos de que poco a poco su tiempo se iba acabando, pero continuaron repasando este nuevo trabajo con “Prisoner of time”, la cual empezó tranquila, pero que luego fue cogiendo fuerza, teniendo un estribillo machacón, para relajarse hacía la mitad y dar paso a un bello solo de Emilio, tras el que el corte volvió a coger fuerza, siendo el turno de un solo ahora de Iván, dejándonos, en definitiva, una gran composición.

Animándonos a disfrutar, ya que quedaba poco de su actuación, era el momento de otra pieza de este disco que venían presentando, “Burn your flag”, empezando a toda velocidad, con fuerza y un machacón estribillo, relajándose luego y cantando un trozo Iván, que luego hizo un buen solo y dejándonos con un machacón final, para dar paso a la que cierra esta obra y que se llama como la banda, la genial “Battlefield”, no sin antes volver a agradecer a la dirección de la sala el trato recibido y recordar que este corte está dedicado a los que luchan y cuidan a gente con alzhéimer, un temazo, muy bien tocado, con un aire pausado, pero con intensidad y una muy buena ejecución, contando con sendos solos de ambos guitarras que dieron más lucidez a esta canción.

Ahora sí que llegaba el momento de despedirse y lo hicieron con “Seven seas”, de su anterior trabajo, empezando con mucha fuerza y con las guitarras echando chispas, pidiendo palmas hacia la mitad del corte y sirviendo para que se luciesen las guitarras, aunque la sección rítmica estuvo a gran altura, no solo en este tema, sino durante toda la noche, concluyendo así su actuación después de una hora sobre las tablas.

Battlefield dieron un muy buen concierto, ganándose a la gente en todo momento, que, pese a ser poca en número, fuimos con ganas de disfrutar y escuchar la música de una banda que algunos apenas habíamos escuchado, pero que gustó mucho, con una propuesta original dentro del estilo que practican y que en directo sale muy reforzado, con un sonido más contundente.

Esta banda cuenta con muy buenos temas que se asientan en una buena pareja de guitarristas, una sección rítmica con fuerza y contundencia y una voz potente, pero con muchos registros y personalidad, lo que queda reflejado en sus trabajos, el último de los cuales es un gran paso adelante en la trayectoria de la formación y que debería ponerlos en boca de los seguidores del género.

Sin duda, Battlefield son una banda que deberías descubrir, si no lo habéis hecho ya, y disfrutarlos en directo, porque merecen la pena.

www.facebook.com/Battlefieldpalencia
battlefield.bandcamp.com/music
www.youtube.com/channel/UCfK6_FtoM6IOEZGqVsFVp2Q

Afortunadamente el cambio entre banda y banda fue bastante rápido y enseguida teníamos sobre las tablas a la gente de Toifelthal, un quinteto navarro, que se origina en el año 2017, que ha publicado dos discos, “Viperine”, del año 2019 y “Queen of darkness”, del pasado año, estando la formación compuesta por Mikel Janices a la voz, Serhii Isaiev a la guitarra y coros, Carlos Zugasti a los teclados y coros, Jonathan Solana al bajo y Somo a la batería.

Comenzaron su velada como lo hace su más reciente trabajo, con la intro “Dearg due”, que dio pasado a la que la sucede en el disco, “Pussy rider”, empezando con fuerza, siendo un pieza muy animada y pegadiza, con un gran solo de guitarra y demostrando la contundencia de su propuesta, para seguir, sin pausa alguna, con “Bloody Mary”, también del mismo álbum, con ese machacón comienzo que nos hizo mover con ganas la cabeza y teniendo, durante todo el tema, un ritmo muy pegadizo y quedón.

No querían perder tiempo y la anterior fue enlazada con “Viperine”, la que daba nombre a su anterior referencia, deseándonos que nos gustase, sonando con mucha fuerza y con los teclados cobrando protagonismo, contando, además, con un buen solo de guitarra, un sonido muy contagios y un final muy rápido, pasando a presentarse y a agradecer a Battlefield el que hubiesen actuado junto a ellos, para regresar a su actual trabajo con “Fire”, que se inició con ese sonido quedón y pegadizo, pasando luego a una parte en que se relaja, pero manteniendo esa intensidad que tiene y que dio pie a un buen solo de guitarra, recuperando más tarde ese sonido machacón.

Quisieron animar el ambiente, diciéndonos que éramos el mejor público, para, sin casi parar, continuar con “Heavy duty”, también de su más reciente obra, con el bajo dándole inicio, empezando con gancho y fuerza, con ese solo de guitarra tan animada, para luego relajarse un poco, dejándonos una muy buena canción, para pasar a anunciarnos que ahora iban a tocar una balada, aunque en realidad lo que llegaba era “Motor kult”, de su último disco y que es un tema muy cañero, con la guitarra muy intensa y con momento de lucimientos del batería, en una muy poderosa pieza.

Sin dejar este reciente trabajo, llegaba uno de mis preferidos como es “Lord spectral”, un temazo, duro y pesado, con vacile inicial por parte de su vocalista y que resultó un corte pegadizo, en donde empezaron a surgir problemas con algún altavoz, que ya sería la tónica en el resto del concierto, pasando a bromear sobre que ahora llegaba la siguiente y esta era “Sinner”, del mismo plástico, con un muy potente inicio, siendo una canción con mucha fuerza y con un estribillo pegadizo, que nos hizo mover la cabeza a su son.

Afirmaron que se lo estaban pasando bien, llegando el momento de “Like a fool”, uno de los temas incluidos en su ópera prima, que se inició con fuerza, pero con un sonido bailable, siendo un corte potente y pegadizo, con partes más atmosféricas en la segunda parte del mismo, aunque luego siguió es ritmo contagioso, pasando a agradecernos nuestra acogida y avisarnos de que aquello iba encarando la recta final, ya que sus actuaciones eran como las visitas al dentista, rápidas y sin dolor, regresando a su actual trabajo con “Rise from the ashes”, que comenzó fuerte, pero con esos teclados que te metían más en ambiente, con un muy pegadizo estribillo y colaborando a las voces el guitarra, dejándonos otra gran canción.

Nos amenazaron, de manera irónica, con tocar hasta que nos gustase, siendo el turno de ese corte que cierra su actual obra, “Queen of darkness”, empezando relajado, con aire oriental y su cantante simulando la danza del vientre, pasando a un muy machacón, pero efectivo sonido, relajándose más adelante, para dar pie a un gran solo de guitarra, acelerándose el tema en la parte final, con el bajo muy presente, despidiéndose, definitivamente, con “Rock is a drug”, de su primer trabajo, que sirvió para presentar a los músicos y mostrar su deseo de volver, siendo un verdadero himno, muy rápido y muy pegadizo.

De esta manera y tras más o menos una hora sobra las tablas, concluía este concierto de unos Toifelthal que dieron una muy buena actuación, un poco deslucida por esos problemas de sonido que tuvieron en la última parte, pero, así con todo, a mí me gustaron mucho, con un estilo que me cautivó y demostrando que se puede hacer heavy clásico y que, al mismo tiempo, suene actualizado y con mucha calidad.

Demostraron ser muy buenos músicos y su cantante tener mucho carisma encima del escenario, disfrutando sobre el mismo y confirmando que los temas de sus dos discos ganan mucho en directo, los cuales son muy pegadizos y que te hacen mover la cabeza, al mismo tiempo que te cautivan, con esos pasajes que sus canciones evocan, logrando que todos los allí presentes lo pasásemos muy bien con ellos.

Sin duda alguna, Toifelthal es una banda que debería dar que hablar dentro de la escena estatal y es que calidad y canciones tienen para ello; pegarlos una escucha y acudid a sus conciertos, que, seguro, os van a gustar.

www.facebook.com/toifelthal
www.youtube.com/channel/UCNDU9WdKYaDN4Zdx_m6pkNA
www.instagram.com/toifelthal

Tras despedirme de alguno de los presentes y con algo de merchán de los dos grupos, me fui del Rock Beer The New, contento por haber descubierto a dos grandes formaciones de Heavy Metal, cada una con su estilo y personalidad, aunque un poco triste por la pobre afluencia de gente, y es que el público parece haber perdido esa ilusión por conocer nuevos grupos y se centran en volver a ver una y otra vez a las mismas bandas; agradecer a la dirección de la sala el seguir al pie del cañón y a los grupos el haber dado estos dos buenos conciertos, pese a estar casi en familia.