Las fiestas de San Antonio en Renedo de Piélagos hace ya algunos años que dejaron de lado cualquier propuesta musical en que se incluyesen a grupos locales, centrándolo todo en la actuación de un artista consagrado, además de las habituales orquestas; nada que reprochar a estas iniciativas, pero se echa en falta más apoyo para las bandas locales y de los alrededores, que rara vez tienen donde tocar en esta localidad y en las colindantes.
Curiosamente, este año, en el sorteo que se realizó para adjudicar las casetas que iban a situarse en la carpa donde tienen lugar dichas fiestas, la Taberna Madigan´s no fue una de las agraciadas, por lo que su dirección buscó llevar a cabo la realización de un concierto para animar su local durante el día grande de las mismas; sin embargo, por una serie de circunstancias, al final sí que les concedieron dicha caseta, aunque mantuvieron esa actuación en su establecimiento.
Lo cierto es que, según me enteré de la actuación de A Duras Penas, que era la banda que iba a actuar en dicho local, no lo dudé mucho y me animé a acercarme a ver al cuarteto, ya que tocaban a poco más de un kilómetro de mi casa y la hora de inicio del concierto se ajustaba bien a mi horario laboral, así que para allá que fuimos.
A Duras Penas
La anterior vez que había visto a este cuarteto, compuesto por Toño, guitarra y voz, Valentín, guitarra y coros, Jesús, al cajón flamenco y percusiones, y Oumar, al yembé y percusión, fue en una lluviosa noche en Sierrapando del verano pasado, por lo que hacía ya demasiado tiempo, así que había ganas de volver a verlos.
Recordemos que la banda se funda en el Barrio Covadonga, popularmente conocido como Katanga, de la localidad de Torrelavega, hace más o menos 6 años y que, hasta la fecha, han publicado los discos “Reproches”, del 2017, “Narcovadonga”, del 2019, y "Reyes de las dudas", de finales del año 2021, aunque en las redes tienen subidos el sencillo “Live in Katanga” y el Ep “Live en la Vorágine”, ambos en directo y publicados también hace dos años.
Se notaba ya un buen ambiente cuando llegamos, más o menos a la hora fijada, con todo preparado para que, apenas quince minutos después de dicha hora, se subiesen los músicos y nos saludasen, comenzando con el tema con el que abrían su segundo trabajo, es decir, con “Rock del barrio”, una verdadera declaración de intenciones, muy celebrada que gusta mucho, para, después de darnos las gracias, continuar con la que le sucedía en dicho plástico, ósea, con “Cromosoma delincuente”, muy movido y que es otro de los clásicos de la banda que no pueden faltar en su repertorio.
A Duras Penas
Volvieron a agradecernos nuestros aplausos y nos recordaron que tenían discos a la venta por si alguno quería, continuando con la que, precisamente, abría su último trabajo, ese decir, con “Reyes de las dudas”, otra gran pieza, con mucho ritmo y muy animada y que hizo las delicias de un público que era abundante y con ganas de pasárselo muy bien, para continuar con la que la sigue en dicha obra, “Billy Cicatriz”, que fue dedicada a todos los americanos que había por allí, muy movida, pegadiza y con bastante mensaje, explicando por qué el título de la canción, a la finalización de la misma: Billy por ser un nombre muy típico americano y Cicatriz por lo aprieta el gatillo, como cantaba la desaparecida banda gasteiztarra.
Regresaron a su segundo trabajo con “Lobo de mar”, la cual empezó relajada, pero que luego fue cogiendo más velocidad, haciendo amago de que acababa, para luego ser cantada por todo el local y es que sus seguidores nos conocemos las canciones casi enteras, pasando luego a vacilarnos, anunciando que la siguiente era la primera vez que la iban a tocar, siendo el turno de “Mari Fe”, de su ópera prima, una de las que primero me gustaron de la banda y que es un clásico ya en su trayectoria.
Seguían repasando los temas de este gran trabajo que publicaron hace dos años, siendo el turno de “Corazón entero”, con Oumar haciendo sonar su yembé, comenzando de manera relajada, pero luego animándose y siendo una de esas piezas que en directo crecen más, para dedicar la siguiente, del mismo disco, a todos los caballistas de la sala y es que llegaba “Elixir equino”, empezando tranquila y luego acelerándose por partes, con ese genial final, con la percusión dándolo todo, aunque luego acabase relajándose.
A Duras Penas
Toño recordó su etapa deportiva en un equipo del pueblo y los buenos tiempo allí vividos, pasando a una que, como dijeron, gusta mucho, según dice Spotify, llegando el turno de “Oro entre basura”, de su anterior disco, muy animada desde un principio y con ese mensaje tan positivo y es que a veces no disfrutamos de las pequeñas cosas, para, sin dejar dicho trabajo, ser el momento de un tema muy especial para la banda como es “Dos cuchillos en el pecho”, recordando que la grabaron con Raimundo Amador, con un inicio muy bonito a cargo de Valentín, muy bien arropado por Jesús, siendo una muy bella canción, con una exhibición de las percusiones, muy aplaudida y que fue muy bien tocada por los músicos.
Una nueva vuelta a su actual disco llegaba con “Dame ese sentido”, que empezó relajada, pero con intensidad y que luego fue acelerándose más adelante, con un estribillo muy pegadizo, para, mientras se vacilaban entre ellos, continuar con “Estrellita chiquetita”, del mismo trabajo, la cual empezó despacio y muy calmada, con ese sentimiento que ellos ponen, pero que luego se volvió más intensa y que fue muy cantada por todos los allí presentes.
Como nos dijeron desde el escenario, no querían que aquello se enfriase, por lo que fueron a los orígenes de las banda para recordar aquel “Contra las cuerdas”, de su ópera prima, el cual fue dedicado, como siempre, a Sergio García, el inspirador de dicha letra, una gran canción, muy pegadiza y muy rápida, sobre todo al final, tras la cual recordaron que ese tema había sonado en muchos lugares, antes de regresar a su más reciente disco con “Todas mis flores”, muy movida y con mucho ritmo, contando con un muy acelerado final, que hizo las delicias de los asistentes.
Tras hacer un leve amago de irse, la concurrencia canto aquello de “no se saben una de Los Suaves”, empezando a tocar un trozo del “Malas noticias” y otro del “Dolores se llamaba Lola”, ambos de la desaparecida banda orensana, surgiendo unos problemas con las in ear, por lo que improvisaron una parte del “Entre dos aguas, de Paco de Lucia, muy bien tocada, demostrando calidad y que saben salir de cualquier problema con solvencia.
A Duras Penas
Regresaron a los temas propios con aquel “Filosofía del mozín”, uno de los temas más emblemáticos de su primer disco, muy celebrado, con una velocidad muy progresiva y que fue una pieza muy animada y cantada, tras la que nos anunciaron algunos de sus próximos conciertos, y es que no paran, continuando en la misma obra con el corte que le daba título, es decir, con “Reproches”, que empezó relajado y que fue cantado por todo el mundo y es que estábamos disfrutando mucho con ellos.
No voy a negar que la canción que primero me gustó de la banda fue ese “Pretérito imperfecto”, también de su álbum debut, con esa alegría y ese aire festivo que tiene, una maravilla de pieza y que fue coreada por todo el local, para, tras hacer un amago de irse, tocar, quizás el tema que más me gusta de ellos y uno de los más conocidos, como es ese “Narcovadonga”, que daba nombre a su segunda referencia, con ese aire mariachi inicial y con la gente bailando, en el que ya es otro clásico del grupo.
De esta manera y tras una hora y tres cuartos de concierto, concluía la actuación de unos A Duras Penas que nos ofrecieron una muy buena velada y demostraron que es un grupo al que gusta verlos en cualquier lado, pero que en un local así, más recogido, parece como que te atrapan algo más y te acabas metiendo mucho más rápidamente en ambiente, sobre todo porque, los que estamos allí, ya vamos a tiro hecho.
Son una banda eminentemente de directo, donde sacan toda su esencia, pese a que sus tres trabajos son grandes discos y en donde se ve esa evolución y madurez que el grupo va adquiriendo, incorporando nuevos elementos, pero sin perder ese sonido que ya tienen y que les hacen ser una de las formaciones que más actúan en Cantabria y eso es porque su propuesta llega a mucha y muy variada gente.
Habrá que seguir viendo a la banda en directo, que tiene una dilatada agenda por delante, y seguir divirtiéndonos y disfrutando con su música, algo que también os invito hacer a vosotros y a vosotras.
Después de despedirme de algunos de los allí presentes y de la banda, salí de la Taberna Madigan´s, después de haber disfrutado mucho con el concierto de los de Katanga y con los que puse el punto y final a las fiestas de San Antonio en Renedo de Piélagos, con un gran sabor de boca, ya que fue de lo mejor de dichos festejos y, curiosamente, no estaba en la programación oficial. Seguro que veré al cuarteto más veces este verano y ojalá la dirección del Madigan´s siga trayendo música en vivo, algo muy necesario en esta localidad.