A priori el último festival de año, “The Rockstudios Christmas”, se presentaba bastante complicado de llevarse a cabo a la perfección, por la gran multitud de bandas que albergaba y el hecho de tener una hora de finalización por parte de la sala. Pero el resultado fue el más óptimo, todo salió a la maravilla, un ambiente excepcional, buen rollo entre los asistentes y lo más importante buenas bandas euskaldunas sobre el escenario, respetándose unas a otras el tiempo estipulado y conjuntamente elogiando la gran labor de Carlos Kreator, de haber montando un festival de tales características. ¡Hay que tener muchas agallas de organizar una cosa así!

Desde aquí y antes de relataros lo acontecido en él, queremos también darle la enhorabuena por concedernos el placer de cubrirlo. También a Pinky, Marilu y muchos otro más, por su eficacia y profesionalidad. ¡Gracias a todos por hacernos pasar una tarde- noche inolvidable!

Va siendo hora de comenzar, eso si comentar que es muy difícil valorar una actuación de un grupo cuando la misma es muy breve en duración, apenas 25 minutos, por lo que vamos a ser más cautelosos de lo normal. A mi entender tocar solamente tres o cuatros temas no es tiempo suficiente para que los músicos demuestren todo su potencial y que el público pille del todo la onda de su propuesta.

Días antes de la celebración del evento se cayeron del cartel Waldheim e Idi Bihotz siendo rápidamente sustituidos por otras dos bandas Egon y Deadly, quienes aprovecharon con creces la oportunidad brindada. No pudimos asistir a la primera actuación de la tarde, a Deadly, los ganadores del premio Sonor del segundo concurso de bandas noveles de Bilbao Gaua. Les pedimos perdón y esperamos veros muy pronto en acción.

El Paso Killers no tuvieron su gran día, sufrieron muchos problemas de sonido, más concretamente con una de sus guitarras, lo que desvirtúo mucho su actuación, una que prometía ser de las más salvajes de la tarde. Su bajista Pepe, ataviado con un sombrero mexicano y un pañuelo que ocultaba su rostro, intentó no dejar decaer la fiesta pero al final los numerosos parones enfriaron en demasía el ambiente, menos mal que luego otras bandas se encargarían de calentarlo.

“Power Child” y la destreza mostrada en “Love Is All Around” fueron quizás lo mejor de su accidentada actuación. Una pena porque se trató del último concierto de su batería Dani, al que le deseamos mucha suerte y esperemos verle pronto sobre un escenario.

Los alaveses Disturbio hicieron olvidarnos ese mal sabor de boca inicial con un set list basado casi en su último disco “Muy Tóxico”. Salieron a comerse el escenario, como se pudo comprobar en “Welcome”, el primer tema en sonar, eso si, sin contar con la colaboración estelar de Evaristo (Gatillazo), quien ha aportado su granito en el disco.

“300 Segundos”, “Ahora Todo Parece Un Juego” y “Controlado” en esta última reprochando con rabia la censura, sonaron contundentes. Ritmos cargados de buena dosis de punk y hard rock, ejecutados con intensidad y en el que los músicos pusieron todo lo que hay que poner para conseguir una respuesta aún mayor de la que recibieron.

La habitual “Escupe Rock & Roll” puso la guinda a una estupenda actuación, dejando con ganas de más. ¡Lástima que tuvieran que tocar a esas horas!

Los cambios de backline iban desarrollándose a una velocidad sorprendente, ya me gustaría que en muchos festivales se llevará a cabo de la misma manera.

Era la primera vez que tenía el gustazo de ver en directo a Midnight Road, quienes me impresionaron por su frescura y fantástica manera de desenvolverse sobre un escenario. Su guitarrista Sergio dejó muestras de su gran talento a la guitarra, con riffs de guitarra espectaculares.

Con una propuesta roquera muy internacional consiguieron animar al público, más cuando interpretaron “God Save Rock & Roll”, un tema frenético en el que es imposible permanecer estático. Ya tengo muchas ganas de escuchar su próximo trabajo puesto que tienen por delante un futuro muy prometedor.

Cambio de estilo musical de la mano de los bilbaínos Motorsex. Esta vez estuvieron menos comunicativos pero cumpliendo con mucha elegancia su paso por el festival.

Tras una presentación bastante curiosa “Somos Kepa Junkera, tenemos subvención”, composiciones tales como “Be Wrong”, “Que Asco Me Doy” y “Perdido En Bilbao”, estribillos pegadizos y ritmos muy a lo Motorhead. Una actuación bastante corta pero con bastantes destellos de clase.

Airless aprovecharon para presentarnos algunos temas de su nuevo disco “Fight”, que hace apenas un mes salió al mercado y recordándonos que lo harán más exhaustivamente el 14 de febrero en la sala Bilborock. ¡Cita a no perderse!

Lo que más sorprende de esta banda es la magistrosa voz de su cantante Iñaki, quien posee unos registros vocales extraordinarios y óptimos para el estilo que practican, un hard rock a la vieja usanza. Además cuentan en sus filas con unos de los mejores guitarristas de la zona, Robert Rodrigo, un maestro de los punteos.

Una potente “Crying For Your Love” y un final con “Twist Of The Wrist” fueron los grandes momentazos de una actuación talentosa.

Llegó el turno para Estampida que imprimió un ritmo endiablado, dejando claro que su propuesta está dirigida principalmente para los amantes del metal contundente.

Con mucha entrega y dinamismo consiguieron que su actuación se nos pasará volando. Su cantante Lucas Valenzuela derrocho energía a raudales, recorriendo el escenario en multitud de ocasiones y haciendo remolinos con su pelo. “Malleus Malleficarum” hizo retumbar las paredes de la sala y a punto estuvo de ocurrir una desgracia.

No se bajo en intensidad con Rise To Fall, unas autenticas maquinas apisonadoras en directo. Practican un estilo difícil de encasillar, un metal con algunas influencias Death, que se puede asemejar bastante al de In Flames. Sus armas son precisas, ritmos vertiginosos que incitan al movimiento continuo.

Aprovecharon al máximo su poco tiempo disponible, interpretando entre otras, “Inner Scream” y “Rise For The Drama”, composiciones que irán incluidas en su álbum de debut, que estará a puntito de salir a la venta.

Se les podrá ver dentro de unas semanas teloneando a los mismísimos Amon Amath en la Sala Santana.

Siempre es un gustazo descubrir a grupos con chicas al frente, fue el caso de Egon. Hay que reconocer que ya era el momento de relajarse con melodías mucho más armoniosas, después de las dos brutales anteriores actuaciones.

Arrancaron con mucha fuerza y eso que venían de actuar en la final de Pop Rock de Barakaldo 2008, en el que salieron bien parados, tres premios de los siete que había a concurso. Su vocalista Eider Ortega cautivó a los allí asistentes con su maravillosa voz y forma de moverse en “Brutalmente Honestos” y “Despierta Mi Voz”. Una banda a tener en cuenta y que darán mucho que hablar.

Se iba acercando el final de evento pero aún quedaban por ver sobre el escenario la valía de tres bandas. Los primeros P.E.S.C.H con un metal bastante experimental pero lleno de personalidad. No se trataba de la primera vez que les veía sobre un escenario, meses atrás tuve la suerte de verles junto a Ktulu en la sala Idaba Music (Zornotza) pero por las condiciones de la sala no pude apreciar con claridad los sonidos tan sorprendentes que son capaces de sacar de sus instrumentos.

En “Caer”, “Mestizaje” y una sensacional versión del “Army Of Me” (Bjork) le echaron muchas ganas, consiguiendo una buena respuesta por parte del público.

Sin duda alguna Indomables fueron los triunfadores del festival supieron dar ese carácter fiestero que le faltaba a la velada. Solo les bastó un par de temas, “Yo Vivo El Rock” y “Hay Cosas Que Una Madre Nunca Debe Saber”, para revolucionar la sala y poner a todo el mundo a bailar.

He de reconocer que por otros compromisos me he perdido multitud de conciertos suyos y después de haber visto lo que son capaces de ofrecer en apenas 30 minutos, me arrepiento de no haber acudido a ellos.

Son una banda de autentico Rock & Roll que saben como transmitir sus sensaciones y conseguir que el público acabe involucrado. Tras “Mi Sombra, La Muerte Y Mi Puta Mala Suerte”, “Bourbon Sin Hielo”, su gran himno “Indomables” con el que cerraron su exitosa actuación.

Antes de que actuase la última banda, Vhäldemar y se diera ya por finalizado el “The Rockstudios Christmas”, Carlos Kreator quiso dar las gracias a las personas que le echaron un cable y que sin ellas el mismo no hubiese salido como salió, impecablemente. También a la bandas y al público por apoyar a las mismas.

Habíamos tenido la oportunidad de ver a grupos de casi todos los estilo pero faltaba algo de Heavy Metal, el cual vino de la mano de Vhäldemar, quienes llevaban mucho tiempo sin subirse a un escenario.

Tras un vacile inicial por parte de su cantante Carlos Escudero “Hay Heavies sino nos marchamos”, descargaron toda su artillería pesada,  con contundencia. No faltaron “I Made My Own Hell”, “Breaking All The Rules”, entre otros. En la batería pudimos contemplar a Alex, quien ya nos había dejado muestras de su destreza a la guitarra en Egon. Moviendo las cabezas al son de estos maestros del género, así es como concluimos la velada. Ya solo queda esperar que se repita un festival de estas características ya que es un buen escaparate para que las bandas se den a conocer.