Tanos es una localidad ubicada en el municipio de Torrelavega, que siempre ha estado muy vinculada a la música y por ello también al rock and roll, pero la comisión de fiestas, este año, iba a tirar la casa por el tejado, llevando a cabo diferentes jornadas con grupos locales, como debe de ser, y, aunque todas me resultaban interesantes, la que mejor me cuadraba era la del último sábado del mes de julio, en donde iban a actuar A La Deriva, Emboque y 4 de Copas.

La última vez que acudí a dichas fiestas fue en el 2019 y, precisamente, también para ver a A La Deriva, aunque, tras la reciente inauguración de unas piscinas en la zona en donde se ubicaban los festejos en los últimos años, éstos fueron trasladadas al Auditorio Los Picayos, en donde se colocó una carpa para evitar problemas, lo cual fue un acierto, ya que ese día estuvo lloviendo durante buena parte de la velada.

Llegué con cierto tiempo para poder aparcar y así poder charlar con alguno de los presentes, mientras iban terminando los actos previos y se ultimaban los detalles para que, apenas diez minutos después de la hora prevista, estuviesen sobre el escenario A La Deriva, una banda a la que no veía en directo desde octubre del año anterior.

Ya en varias ocasiones os he hablado de este quintero, creado hace ya una década y que mantiene inalterable su formación, estando ésta compuesta por Eli, voz, Óscar y Nacho, guitarras, Pedja, bajo, voz y coros, y Manu, batería, contando, hasta el momento, con solo un disco, llamado como la banda, “A la deriva”, del 2017, aunque ya tienen temas nuevos, que han ido subiendo a sus diferentes redes sociales y que, suponemos, den paso a un nuevo trabajo del grupo.

Con una intro sonando de fondo, fueron subiendo los cinco músicos, que empezaron propiamente su actuación con “Vuela”, precisamente el último tema que fue subido a las redes el pasado año, muy pegadizo y animando un poco aquello, ya que, aunque había bastante gente, ésta estaba algo fría, durante el cual nos saludaron y se presentaron, contando con uno buenos coros.

Turno ahora para recordar su ópera prima con “Hijos de la ciudad”, muy movida y en la que nos pidieron nuestras palmas, buscando, en todo momento, la conexión con los presentes, para tocar una de sus más recientes creaciones, que de hecho no está ni en sus redes subida, como es “La ventana”, que fue dedicada a un amigo, muy machacona y con el bajo muy presente en algunas partes.

Pero no querían dejar de lado su único trabajo, que cuenta con temas que ya son conocidos por sus seguidores, como “Es el rock”, un clásico en su repertorio, con un inicio cañero y un gran solo de Óscar, para pasar a uno de los primeros cortes que sacaron después de ese primer disco, como es “Me sobra todo”, una bella balada, pero con partes muy poderosas, sobre todo en el estribillo, y donde dejaron claro la calidad de sus músicos.

Siguiendo con las dedicatorias, la siguiente en sonar, “Quince primaveras”, también fue dedicada, siendo una canción nueva, al menos para mí, muy intensa, con mucha fuerza y potencia, de las más cañeras de su repertorio y con una gran labor de Eli a la voz, para darnos una sorpresa y es que, ya que Emboque tocaban después, invitaron a Mario, guitarrista de la citada formación, y a Raúl, cantante de la misma, a cantar con ellos “Dueña de tu destino”, como ya hicieron en la grabación de dicho tema, el cual conocimos hace dos años, dejándonos un momento muy especial en esta gran pieza.

Ya sin los invitados, continuaron con otra que había salido, como la anterior, en el 2021, siendo el turno de “Nadie”, animándonos a cantar con ellos, una muy buena y pegadiza canción, muy movida y coreable, avisándonos de que, poco a poco, iban a ir encarando la recta final de su actuación, recordando que el siguiente corte, “Cobra”, le había traído Nacho después de hacer un viaje por Estados Unidos, con un inicio rockero, muy movido y un ritmo muy quedón, sirviendo para presentar a los músicos y contando con una parte final más ralentizada.

Turno ahora para hacer alguna versión y es que, aunque tienen temas propios para dar y tomar, siempre las canciones conocidas ayudan  a que la gente se meta más en el concierto, siendo el turno de “Llamando a la tierra”, en la revisión que hizo M Clan del clásico de la Steve Miller Band, iniciada por la guitarra de Nacho y disfrutando de este corte que, como nos dijeron desde el escenario, todos conocíamos, lo mismo que ocurría con el “Decidí”, de los Extremoduro, que fue dedicado a la organización, con Pedja haciéndose cargo de la voz principal, un clásico, que fue concluido con un “viva las fiestas de Tanos”.

Y seguíamos con las versiones, ahora enlazando dos de esa gran banda como era la Creedence Clearwater Revival, comenzando con “Proud Mary”, iniciada de manera relajada, para luego coger más ritmo, animándonos a movernos en esta dinámica pieza, para continuar con “Travelin' band”, algo más calmada que la original, pero que también les quedó muy personal esta noche.

Llegaba el turno de la despedida, pero no podían irse sin el que es su himno, “A la deriva”, el que abría su ópera prima, agradeciendo a la organización el que hubiera contado con ellos y al equipo técnico su labor, además de a los asistentes, siendo un corte muy cantado y coreado por todos los allí presentes y dando, de esta manera, por concluida su actuación tras una hora sobre las tablas.

A La Deriva dieron un concierto muy animado y que sirvió para que la gente entrara en ambiente, demostrando el crecimiento que el grupo ha ido logrando a base de tocar y ensayar, algo que se puede apreciar en la mayor elaboración de los nuevos cortes, sin que ellos desmerezcan sus primeros temas, que siguen sonando frescos.

La verdad es que da gusto observar esa compenetración que tienen entre ellos, viéndoseles cada vez más disfrutar sobre el escenario y con más confianza sobre el mismo, combinando temas propios con versiones, aunque, supongo que, con el paso del tiempo, éstas últimas dejen paso a las composiciones de creación propia y es que tienen muchas y muy buenas.

Seguiremos la pista a este quinteto torrelaveguense, no solo de cara a futuros conciertos, sino, también a esas nuevas composiciones que siguen fraguando, animándoos a que los peguéis una escucha y, si podéis, los veáis en directo.

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No hubo que esperar mucho tiempo para tener sobre las tablas a Emboque, ese trío de Hinojedo que, unos días después, iba a cumplir 29 años en activo, siendo sus componentes, desde hace más de dos décadas, Raúl Galván, voz y bajo, Mario Galván, guitarra y coros, y Carlos Quintana, batería, y que son toda una institución en nuestra tierruca.

La discografía de la banda está compuesta por los discos, “Salvaje”, de 1999, “Déjame entrar”, del 2001, “Contra el tiempo”, del 2004, “Voy a por ti", del 2010, “A tempo de rock", del 2015, “6”, del 2017, “Directamente”, del 2020 y con el que les entrevistamos, y “La era perdida”, del pasado 2022.

Los había visto en directo apenas dos meses y medio antes, pero siempre es un placer verlos en vivo, comenzando su andadura con una intro, con la que se fueron subiendo al escenario, para arrancar propiamente con “Amia”, ese temazo que daba inicio a su ópera prima y que, por más que pasen los años, no deja de emocionarme, una maravilla, tocada con mucha clase, mientras se iba ajustando el sonido.

Unida a la anterior llegaba el turno de “Al mismo nivel”, de su segundo trabajo, en el que nos pidieron palmas para acompañar su inicio, muy cañero, con ese sonido tan electrizante y siendo un tema muy pegadizo, tras el que se mostraron encanados de volver a tocar en Tanos, localidad en la que han actuado en muchas ocasiones, pero en donde no se cansan de hacerlo, para pasar a su último trabajo con “Soy libre”, muy pegadiza y potente y que en directo funciona siempre muy bien.

Tras agradecernos nuestra presencia y a la organización el haber llevado a cabo estos eventos, además sin zonas Vip´s, nos pidieron acercarnos para lanzarnos otro clásico como es “Revolución”, que abría su segundo trabajo y que, como es habitual, fue muy coreado, para regresar a su más reciente disco con “Los perros de la guerra", con ese sonido potente e intenso que tiene y con un fenomenal solo de Mario, siendo una canción muy pegadiza y quedona.

Después de subsanar algún fallo de sonido, recordaron su anterior disco de estudio con “Aprendiz", con un muy rápido inicio y un sonido crudo, en una muy buena canción y que es de esas que han ido encandilando a sus seguidores a base de escucharla, para llegar el momento de uno de sus cortes más esperados y que es un clásico desde que apareció en su cuarto trabajo, como es “Aníbal”, una verdadera maravilla, muy intensa y poderosa, con un fenomenal solo de Mario y que sonó impresionante como siempre.

De nuevo tuvieron que hacer algunos ajustes de sonido, aprovechando para agradecer la labor de los técnicos, uno de los cuales, Dani, fue el protagonista del video clip de “Noche negra", de su último trabajo, muy buena y pegadiza, pero con mucha fuerza e intensidad, para, sin dejar este disco, continuar con “No lo harán por ti”, con ese comienzo tan eléctrico y potente, contando con un sonido muy guitarrero y con un Mario simplemente genial y al que se le veía con muchas ganas.

No abandonaban ese nuevo álbum, que tanto nos ha gustado, con la relajada “Junto a ti”, una balada muy tranquila, pero que es una canción preciosa, con un muy buen final, con la voz de Raúl luciéndose y esa guitarra pausada, pasando a avisarnos de que iban a encarar la recta final, dedicando la siguiente, “Donde está la acción”, de su obra de hace 6 años, a sus compañeros de cartel, con ese sonido machacón y pegadizo que tiene y con todo el mundo moviendo la cabeza a su ritmo.

Nos recordaron el que fue su cuarto trabajo con “El héroe”, que, como nos anticiparon desde el escenario, es conocida por todos sus seguidores, muy buena y celebrada y en la que siempre me afloran los recuerdos sobre aquellas personas que lucharon contra una enfermedad y se quedaron en el camino, para, tras un cambio de guitarra, continuar con “Estaré”, de su disco del 2017, para el que nos pidieron nuestra colaboración, empezando con ese sonido constante de guitarra, siendo un himno, que fue muy coreado.

De esta manera y tras, más o menos, 80 minutos sobre las tablas, concluía un genial concierto de unos Emboque, que nunca fallan en directo y a los que se veía con muchas ganas de tocar, haciendo un repaso por algunos temas de su ya amplia trayectoria, pero centrándose más en su último disco, que siguen presentando por buena parte de la península.

No voy a ser objetivo, ni lo pretendo, pero es que con Emboque me une algo más que la admiración de un seguidor de la banda, con cuyos integrantes, además, me une cierta amistad, y es el orgullo de ver lo grande que se ha hecho aquel grupo que descubres cuando están empezando y te quedas embobado viéndolos tocar y que, 29 años después, son una verdadera institución en el rock y el metal de Cantabria y muy reconocidos también fuera de nuestra tierruca.

Por supuesto que volveré a ver a Emboque en cuanto me sea posible y te animo encarecidamente a que hagas lo mismo, si pasan cerca de donde tu resides: no te defraudarán.

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Y, después de lo oportunos cambios, llegaba el momento de 4 de Copas, los encargados de cerrar este festival de bandas locales y a los cuales había visto en directo hacía poco más de un mes, en otras fiestas, las de Los Corrales de Buelna, y en donde también tuvieron que lidiar con la lluvia como esta noche.

Recordemos que este quinteto torrelaveguense está celebrando sus 25 años de trayectoria y está formado actualmente por Nancy García, a la voz, Javi Andrés, guitarra y coros, Mario Fernández, a la guitarra, Miguel Revuelta, al bajo, y Sergio Leñero, batería, habiendo editado los discos "Comienza la partida”, del 2005, “Todo por el Rock&Roll”, del 2006, “Sin mirar atrás”, del 2008, “Puerta de embarque”, del 2011, “El Cuento se Acabó”, del 2015, “20 en el Camino”, del 2018, y “A fuego”, del 2020 y por cuya edición les entrevistamos.

Y comenzaron su andadura con una intro que dio paso a “Acompáñame”, la canción con la que se abre su actual disco, muy pegadiza y dinámica, y apareciendo por vez primera pirotecnia en el escenario, siendo seguida por su compañera de plástico “Entre mi espada y tu pared”, después de haberse mostrado encantados de estar aquí, una pieza muy cañera y quedona.

También se mostraron encantados de haber compartido escenario con estas dos bandas, continuando su repaso a esa obra que editaron hace 3 años con “Complejo de tipejo”, otra gran composición y muy quedona, para seguir con otro temazo de ese mismo trabajo como es “Al mejor postor”, uno de los que más me han gustado y que cuenta con un gran solo de guitarra final.

Vacilaron sobre que iban a tocar un tema de unos tal Marea para darlos publicidad, siendo el turno de “La rueca”, de la banda de Berriozar, que les quedó muy bien y que fue muy celebrada, pasando a uno de los momentos más estelares, y es que llegaba el último corte que han subido a redes, “Cantabria Infinita”, que vio la luz a finales del pasado año, con Saraí a los coros y Flavio al violín, una muy buena composición, con una buena aportación de los colaboradores, que fue muy celebrada y con la presencia de pirotecnia sobre el escenario.

Pero tampoco querían olvidar otros trabajos de la banda y hasta el año 2015 se fueron para recordar aquel “Mírale”, que aparecía en el disco de ese año, una balada que se inició con Mario sentado sobre el escenario, muy pegadiza y que es ya un entrañable clásico del grupo, continuando en el mismo álbum con “7 Pecados”, otro de los que siempre es muy celebrado en sus directos, con Nancy clavando la parte que en estudio cantó El Drogas.

Vuelta a su más reciente disco con el corte “Con ganas de morder”, que en estudio contó con la presencia de Fito Garmendia a la segunda voz, pero que en esta ocasión iba a tener la colaboración de su amigo Mikky, que ocupó el puesto de Miguel al bajo, una canción muy buena y muy movida, con la que mantuvieron el interés de una asistencia que todavía aguantaba pese a la hora.

Ya sin el anterior invitado, de nuevo Saraí subió al escenario, en esta ocasión para cantar con ellos “Al son de la luna”, otra de su actual obra, muy buena y animada, para, sin dejar ese disco, ser el momento del siempre celebrado “Torrelavega (Himno)”, y más si se toca en dicho municipio, una maravilla, muy cantado y coreado, sonando muy bien y recordando que Sergio García, también un torrelaveguense de pro, peleaba esa noche e iba a salir a hacerlo con este tema.

Uno de esos temas que le vienen acompañando desde hace 15 años, cuando fue publicado, es “¿Y ahora qué? (Bukkake)”, el cual han regrabado en diferentes discos, incluido este último, empezando con ese sonido tan característico, contando con un gran solo de Javi y pidiendo la colaboración del público en su parte final, algo que lograrían.

Con vivas a las fiestas de Tanos, continuaron con el que autodenominaron su corte más emblemático, “Madre cerveza”, recogido en su obra de hace 8 años, muy bueno y celebrado, parando el concierto para que la gente cantase a capela y haciendo acto de presencia de nuevo la pirotecnia, mientras el público coreaba el nombre de la banda y ésta pedía aplausos para los técnicos, regresando de nuevo Saraí para cantar con ellos “Camino”, la que daba inicio a su anterior álbum, una muy buena pieza, muy pegadiza y que en directo funciona muy bien.

Agradecieron a la gente de las comisión de fiestas de Tanos que hubiesen contado con ellos, siendo el turno de “Prefiero cantar”, uno de los adelantos de su más reciente disco, muy movido y pegadizo, parando de golpe para que el público cantase a capela  y con más pirotecnia asomando, tras el cual hicieron amago de irse, pero la gente quería más y repitieron “Cantabria Infinita”, de nuevo con los dos colaboradores, sirviendo, además, para presentar a los miembros de la banda y reiterando los agradecimiento a técnicos y a todos los que lo hicieron posible.

Pero todavía hubo tiempo para una más, siendo en esta ocasión “Avísame”, de su anterior plástico, muy buena y pegadiza y en la que de nuevo nos recordaron los músicos que formaban parte de la banda, poniendo, de esta manera, fin a su concierto después de, más o menos, una hora y medio sobre las tablas.

4 de Copas nos brindaron una velada muy amena y de muy buena calidad y es que estamos ante una formación con mucha clase y una ya amplia trayectoria, que ha tocado con muchas de las bandas más importantes del estado, habiendo reforzado y endurecido su sonido en los últimos tiempos, lo que queda bien reflejado en su último disco y en conciertos como éste.

Pero no debemos olvidar que detrás hay una carrera con discos y temas que ya son clásicos del rock en Cantabria, y cuyo legado, a tenor del momento de forma en que se encuentran, no va a hacer sino crecer, ya que las composiciones son cada vez más logradas y sus directos, pirotecnia al margen, son realmente impactantes.

Sin duda, esta es una banda que en directo gana y mucho y sus temas suenan todavía más crudos, por lo que os animo a verlos en directo.

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De esta manera y tras despedirme de algunos de los presentes, como el amigo John Man, con el que no coincidía hacía mucho tiempo, puse rumbo a casa, después de haber disfrutado de una gran noche de rock and roll a cargo de A La Deriva, Emboque y 4 De Copas, y todo gracias a la comisión de fiestas de Tanos, que apostó por el rock éste y varios días más; ojalá el año que viene repitan y que las comisiones de otras fiestas cercanas les copien, que falta hace.