Si la primera jornada del festival alicantino se presentaba interesante, la segunda jornada, analizando bien el cartel, era la más atractiva de todas al menos para nosotros, pues en la jornada del jueves 10 de agosto se esperaba la actuación del cabeza absoluto de cartel, Megadeth, junto con otras bandas potentes como Arch Enemy, Beast in Black o Feuerschwanz.

Además, la hora de inicio de los conciertos fue más tardía y la mayoría lo agradecimos, ya no solo por poder descansar y abarcar la jornada festivalera con más entereza, sino porque lamentablemente se esperaban 43 grados y a todos nos preocupaba como pasaríamos la jornada. Los primeros preocupados eran los responsables del festival y, por ello, decidieron, muy acertadamente, hacerse con una pistola de agua a presión para poder pulverizar agua y así refrescar al público más entregado en cada uno de los conciertos. La sensación temporal de alivio de la temperatura desde luego que fue un acierto y, seguramente, evitó males mayores. El resto, lo hizo el público, hidratándose constantemente cada uno a su manera.

El jueves la jornada se iniciaba pasadas las 16:30 de la tarde en el escenario Jesús de la Rosa. Las protagonistas fueron las Burning Witches quienes aprovecharon la elevada temperatura para sugerirle al público que ardiera con ellas en el infierno. La descarga de Heavy Metal de las suizas estuvo a la altura de este gran festival, en el que ya habían participado en su edición de 2019. La banda liderada por su vocalista Laura Gudelmond brindó una actuación enérgica de algo menos de 50 minutos a los allí presentes con temas como “Wings of Steel”, “World on Fire” o “The Dark Tower”.

El crecimiento de la banda no parece haber llegado a su fin, por lo que apostamos que seguramente volveremos a verlas ya sea en festivales como en salas por nuestro país. Cabe destacar la cercanía y amabilidad que todas las componentes de la banda mostraron en la firma organizada por TNT radio tras su actuación; Se han convertido en una banda muy querida en el festival, y con actuaciones como esta aún más, a pesar de que no contaron con el mejor sonido, y sufrieron algún que otro problema técnico, poco se pudo reprochar a la entrega de las “brujas”.

Sobre las 17:40 de la tarde y con el calor apretando llegaba el turno de Beast in Black, una banda que ya tuvimos la suerte de ver en la edición de 2019 del Leyendas. Los finlandeses ofrecieron un show muy completo de Power Metal Melódico y el público le devolvió su buen hacer sobre el escenario con entrega absoluta a pesar del calor.

Temas como “Blade Runner”, “Blood as a Lion”,  “No Surrender” o “End of the World” sirvieron de muestra de las tablas que la banda ha cogido en los últimos años. Destaca la figura de su vocalista griego, Yannis Papadopoulos, quien, a pesar del calor, no se desprendió se su gabardina negra y dio muestras de ser un auténtico showman sobre el escenario incansable y con un registro vocal alucinante, resaltar también las guitarras de Anton Kabanen y a Kasperi Heikkinen, que no sólo sonaron estupendamente si no que además dieron mucha vida sobre el escenario con sus poses y muestras de cariño al público

Por poner una pega, al igual que la última vez que los vimos, abusan de pregrabados de teclados y otros sonidos, que no llevan en directo, y personalmente sigo sin entender como una banda ya con la fama de ellos, e imagino que no de pequeño caché, no lleva un músico para hacerse cargo de los teclados en directo. A pesar de ello, gran sabor de boca el que nos dejaron y seguro que volveremos a verlos pronto en salas o festivales por nuestra tierra.

Llegaba el turno del grupo sueco Amaranthe con su descarga de Heavy Metal y con una puesta en escena clásica, Elize Ryd, Mikael Sehlin (voces guturales) y Nils Molin, sus tres vocalistas, lideraron una actuación que comenzaría con “Fearless” y “Viral”. Al tercero de los mencionados, Nils Molin, lo volveríamos a ver sobre el escenario del Leyendas con su banda de Power Metal Dynazty en la jornada del viernes.

A estas alturas de la tarde, la afluencia de público era bastante numerosa y la banda de Suecia estuvo muy bien acompañada como viene siendo costumbre cada vez que se sube a un escenario en un festival. El show lo vimos empezar desde cerca, pero lo terminaríamos viendo algo más alejados, pues aprovechamos para ir al otro escenario. Veríamos el cierre en las pantallas con su tema “Drop Deal Cynical”.

En el Mark Reale la cita la teníamos, como no podía ser de otra manera, con Chino Banzai (o mejor dicho con Chino), es decir, con el heavy y rock más clásico en español. El calor en el escenario pequeño (escenario cubierto) era insoportable, pero, a pesar de ello, el placer de volver a ver a la banda madrileña lo compensaba, pues la formación actual, con Chino, Valentín Del Moral, a la cabeza sobre el escenario nos brinda la oportunidad de escuchar de nuevo temas como “Funciona Legal”, “Héroes” o “Voy a Tu Ciudad”.

El sonido en el escenario pequeño no era el mejor, algo que suele pasar en cada edición, por la acústica del lugar, sobretodo comparado con los escenarios principales, al menos, en los dos ratos que estuvimos por allí. Pero fue un gusto el rato que estuvimos allí escuchando al “Chino” y su banda tan bien armada. El éxtasis del concierto llegaría con “Coche rápido en la noche” y “Banzai” para cerrar el show. Grandes fue Banzai y grande es Chino, ¡ Qué por muchos años más los veamos por los escenarios!

De vuelta corriendo por los escenarios principales, llegaba el turno del grupo estadounidense de Death Metal I am Morbid. La banda aterrizaba en el escenario del festival en su gira europea del 30 aniversario de la publicación de Covenant, exitoso álbum de los míticos Morbid Angel, la banda que también lideraba David Vincent, siendo esta su única fecha en España. Pete “Commando” Sandoval (batería) y David Vincent (voz y bajo) han sabido mantener junto con Bill Hudson y Richie Brown (guitarras) la autenticidad de un género con miles de adeptos.

Sonaron por tierras alicantinas “Inmortal Rites”, “Dominate” o “Rapture”, a pesar de no ser nuestro género predilecto, pudimos disfrutar de temas clásicos y muy bien interpretados, entendemos la variedad del cartel y que debe cubrir todos los gustos sin duda.

Y con estos acordes incansables y agresivos, nos marchábamos de nuevo al Mark Reale, para ver parte del show de Grand Slam, banda mítica donde las haya y de nuevo, no fácil de ver por nuestro país. El calor en este escenario seguía siendo bastante considerable y la sombra de algunos fallos de sonido volvía a aparecer. Los irlandeses de Grand Slam hicieron alarde de su veteranía a cada instante, mostrando su carisma al público que se mostró inmediatamente participativo con ellos.

Con temas como “Nineteen” o “Gone Are The Days”, el grupo brindó una dosis muy gratificante de Hard Rock gracias al buen hacer de Laurence Archer (líder y guitarrista), un sorprendente Mike Dyer(vocalista) en muy buena forma física y vocal, Rocky Newton (bajista) y Benjy Reid (baterista). Cabe agradecer, una vez más, a la organización leyendera la oportunidad de ver bandas de este calado que difícilmente pisan nuestras tierras.

De nuevo sin perder el tiempo, fuimos a el escenario Jesús de la Rosa, pues los suecos Arch Enemy, el otro gran cabeza de cartel del día ( y del festival, posiblemente) aparecían por Villena bajo el liderazgo de su brutal vocalista Alissa White Gluz y del esplendido guitarrista Michael Amott. Con temas como “My apocalypse”, “Deceiver Deceiver”, “War Eternal” o “Nemesis” vertieron su dosis de Death Metal Melódico en la que era su tercera visita al Leyendas. La actuación del segundo cabeza de cartel de la jornada no defraudó a los allí presentes, aunque muchos optaron por seguir el show, como es el caso de unos servidores, intentando coger un buen sitio para Megadeth.

Sin duda, la presencia de los suecos sobre el escenario es excelente y no deja indiferente a nadie. El concierto sonó muy bien a nivel técnico, y en lo visual, poco que reprochar a la banda con una gran puesta en escena, Alissa sigue comiéndose el escenario, y en cada ocasión que la vemos, con unos años mediante, da la sensación que esta chica no tiene techo y va creciendo por momentos aún más. Apuesta segura sin duda.

Con un público expectante y ansioso antes de empezar el concierto, la banda de Dave Mustaine, Megadeth, salió al escenario para coronarse de nuevo y dejar bien claro porque eran los cabeza de cartel de la edición de 2023 del Leyendas y porque lo serán vayan donde vayan. Desde el inicio del concierto, la entrega de todos los miembros fue extraordinaria y extremadamente gratificante para todos los presentes, a los que nos emocionaron con un setlist muy acertado y variado, metiendo temas nuevos y clásicos de su extensa carrera musical.

La banda de Trash Metal, además, contó con proyecciones continúas de videos que hicieron de la interpretación de temas como “Hangar 18” o “We’ll Be Back” más espectaculares aún. La formación estadounidense de Los Ángeles no dejaría en el tintero canciones como “Angry Again”, “Wake Up Dead” o la fascinante balada “A Tout Le Monde”. La grandeza del grupo parte de la figura del vocalista y guitarrista Dave Mustaine, entregado y encantador de masas sobre el escenario, de hecho más de lo que suele ser habitual, hasta marcándose un bailecito al acabar el concierto..; Por otro lado, la presencia de Kiko Loureiro a la otra guitarra, en mi parecer, le ha dado los últimos años mucha vida a la banda, y sin duda fue todo un acierto esta incorporación, James LoMenzo al bajo también estuvo muy decente, con la difícil tarea de reemplazar a David Ellefson sin duda.

El sonido fue de 10 durante casi todo el show, únicamente la voz de Mustaine al principio se antojaba algo baja, quizás mal calibrada o quizás el maestro andaba calentando o reservándose un poco. Me encantó “Dystopia”, para mi uno de los mejores temas sacado por la banda en sus últimos discos, y por supuesto los clásicos que no faltaron “Symphony of Destruction”, “Peace Sells” o “Mechanix”, como no para acabar el concierto “Holy Wars... the Punishment Due”. Me extrañó la ausencia en el setlist de “Tornado of Souls”, pero a cambio nos regalaron otro temas no tan habitual de escuchar en los conciertos. Sin duda para mi, los claros vencedores del día y del festival, aunque sin duda juegan con ventaja por su solo nombre, pero dieron un concierto a la altura de lo que se esperaba de ellos, Aguante Megadeth!.

Después del conciertazo que veníamos de disfrutar, llegaría el turno de Feuerschwanz, banda a la tuvimos el placer de disfrutar en la anterior edición a altas temperaturas abriendo una jornada del festival, y tal fue el reclamo y el buen hacer que tuvieron, que la organización ha decidido no sólo repetir, si no que darle un sitio prime en cuanto a horario, pero si con la difícil papeleta de tocar después de dos mastodontes como son Arch Enemy y Megadeth. Un setlist variado con temas propios y exitosos como “Memento Mori” o “Ultima Nocte” y algún que otro cover como “Warriors of the World” de Manowar.

Tengo que decir que me sorprendieron más la primera vez que los vi, quizás por su puesta en escena tan espectacular (todos vestidos de guerreros de épocas distintas) y sus perfomances en directos, también la oscuridad del escenario hizo que perdieran detalles de su show. Aún así, me sorprendió la cantidad de público que contaron frente al escenario, siendo una banda que ha ganado muchos adeptos en su corta carrera musical en estos años. Sin duda una banda por la que apostar en un futuro próximo para ver cada vez más arriba de los carteles.

Decidimos que con Tierra Santa se acabaría la jornada de hoy, viendo gran parte del show de los riojanos. El sonido fue muy bueno durante toda la parte que vimos, aunque en lo visual bien podríamos decir que era Tierra Santa quienes estaban, podría ser Behemoth o bien unos dobles de los músicos de la Rioja, porque parecía que se le habían olvidado dar al interruptor de las luces, algo que puedo medio entender con una banda de Death o Black Metal, pero no con una banda como Tierra Santa, en mi opinión, el show perdió muchos puntos por ello, lo visual quizás no llegue a ser tan importante como lo sonoro, sin duda, pero es gran parte del espectáculo. “Pecado de Ángel”, “Destino” o “Sangre de Reyes” fueron algunos de los temas con el que comenzaron el concierto, y en lo musical, pocas pegas se le podía poner al show, entrega de 10 de los músicos y buen hacer durante todo lo que pudimos ver.

Una pena no escuchar clásicos como “La canción del pirata”, “Alas de fuego” o “Legendario”, que según nos dijeron algunos amigos, dejaron para el final, pero el cansancio y agotamiento hizo mella en nosotros y tuvimos que abandonar el recinto para prepararnos para una jornada del viernes, algo diferente en cuanto a cartel a lo que estamos acostumbrados.