Normalmente, durante la segunda quincena del mes de agosto suelo desconectar de la música, ya que es la única época del año en que cojo vacaciones y aprovechamos para hacer todas esas cosas que durante el resto del año no podemos por cuestiones laborales, como viajar, conocer nuevos lugares, estar con gente con la que no puedes estar tan frecuentemente o simplemente cambiar de hábitos.
Sin embargo, este año, aunque yo sí que tenía vacaciones, Montse no, por lo que nuestras escapadas se iban a centrar en algún fin de semana, como ese del puente de la Asunción, en el que hicimos el camino inverso al que hacen nuestros vecinos palentinos: ellos vienen a las playas cántabras, pues nosotros a disfrutar de unos días por su capital y conocer la muy buena gente de esas tierras y a donde esperemos volver pronto.
Por todo ello, podíamos compaginar esto con alguna actividad musical, como era este concierto, al que tenía muchas ganas de acudir, y que servía de presentación del Torrelavega Soundcity 2023, que iba a tener lugar los días 17,18 y 19 de agosto, pero que, dos días antes, concretamente el día de la fiesta grande de Torrelavega, iba a contar con el debut de Altos Cargos y la actuación de Tuya, en la calle Argumosa, en pleno centro de la ciudad y como anticipo del grueso del festival.
Por unas u otras circunstancias, hacía tiempo que no bajaba a Torrelavega el día de su fiesta grande, y me sorprendió la gran cantidad de gente que había y eso que tuvimos suerte de aparcar relativamente cerca de donde iba a tener lugar el evento, lo típico de estar en el sitio adecuado y en el momento justo, pero por las calles no se podía casi caminar y en la calle Argumosa la cosa era todavía peor, pero conseguimos tener una muy buena ubicación para ver a ambas bandas.
La primera banda en salir y, realmente, la razón de nuestra asistencia era ver el primer concierto de Altos Cargos, una formación de la que supimos de su existencia hace un año y que está compuesto por experimentados y reconocidos músicos de la zona de Torrelavega como son Fer Palencia, voz, Mikel Marina, guitarra y coros, Víctor Zorrilla, bajo y coros, y Simón San Emeterio, batería, estando a la espera de publicar su primer disco en este mismo 2023.
Subieron al escenario con el “Money” de Pink Floyd a modo de intro, comenzando propiamente su velada con “Iceberg”, con un contundente sonido inicial, pero constante, siendo una pieza muy pegadiza y quedona, siendo seguida por el juguetón inicio de guitarra de “Terrible situación”, una canción muy potente e intensa, dentro del estilo propio del grupo.
Tras saludarnos y vacilar un poco, habida cuenta que casi todos éramos conocidos de ellos, hicieron algún ajuste de sonido, agradeciendo al técnico su labor, para continuar con “Canal 69”, recordando que igual nos estaban filmando desde el aire, muy animado y pegadizo, confesando que tenían ganas de salir de la cueva y más con gente que se ha criado “Al otro lado”, empezando tranquilo, pero luego siendo un tema muy potente.
Altos Cargos
Unida con la anterior llegaba “Aviones…”, una canción con un sonido constante y muy pegadizo, que sirvió para que la gente siguiese disfrutando con la música de la banda, para, casi sin parar, continuar con “Nadie besa al perdedor”, una versión de Jose Ignacio Lapido, de los 091, con un inicio más relajado, pero luego metiendo más fuerza y siendo un corte muy potente.
Tras pegar unos tragos, era el momento de “Plomo, criptonita y miel”, que fue presentada como una lenta, para que aprovechásemos a pedir bebida, la cual comenzó relajada y con el bajo presente, una canción con mucha fuerza, pero siendo un medio tiempo, que contó con un gran solo de Mikel, revindicando que en Torrelavega siempre habrá buenas bandas, pasando a ser el turno de “Su fantasma”, que empezó guitarrera, dejándonos una pieza machacona y pegadiza, con un sonido constante y recordando la siempre presente figura de Pablo Neruda.
Se mostraron agradecidos por este tipo de festivales, más familiares, para continuar con un regalo para la organización del mismo, su versión del “Cama de rosas”, de los King Coronados, muy buena y que es un clásico del rock de Torrelavega, avisándonos de que iban a ir acabando, que si no nos viciábamos, siendo el momento de presentar a los componentes de la banda, para seguir con “Ídolos”; que fue iniciada por una sección rítmica machacona, estando ante una pieza con fuerza y potencia y que resultó bastante quedona.
Altos Cargos
Antes de continuar definieron a Mikel como el rock en estado puro, siguiendo con “Que le vamos a hacer”, con un inicio muy guitarrero, una pieza muy pegadiza y animada y que tiene mucha fuerza, para avisarnos de que hasta ahí llegaba lo que les iban a pagar, pero, como eran bueno chavales, iban a tocar un par de ellas más, siendo la primera la única que, hasta ese momento, conocíamos, es decir, “Tiempo después”, muy celebrada y muy pegadiza.
No querían perder tiempo y la anterior fue conectada con “Majestad”, muy potente y pegadiza, con Fer y el resto de los músicos disfrutando como hacía mucho que no se les veía, siendo una canción muy pegadiza y quedona y con la que pusieron el punto y final a su velada, tras algo menos de una hora sobre las tablas.
Altos Cargos dieron un muy buen concierto y demostrando que son una banda que pueden dar que hablar mucho, algo que ya sospechábamos, habida cuenta los mimbres con los que cuenta la formación y a lo poco que habíamos escuchado como adelanto, pero que quedó refrendado en esa tarde noche en Torrelavega, donde gustaron mucho, a tenor de la respuesta de la gente.
Su propuesta es la de un rock muy elegante y con clase, con unas canciones en donde la parte lírica tienen tanto peso como la musical, todo ello hecho con mucho gusto y calidad y con una puesta en escena en la que muestran esa chulería tan propia del rock and roll, buscando y logrando, en todo momento, la atención del espectador, al menos por lo que vimos en esta jornada.
Ahora toca esperar a ver editado, ya sea algún nuevo adelanto o el disco en su conjunto, además de esperar verlos más veces en directo, algo que os animo hagáis, si tenéis la oportunidad.
Reconozco que de Tuya apenas había escuchado algo para saber un poco de que iba su propuesta, pero no había profundizado mucho, por lo que iba un poco desprovisto de ideas previas, con la única certeza de que lo que iba a presenciar, durante su actuación, era algo bastante alejado de lo que podemos denominar música convencional, ya que lo que nos proponen es una mezcla experimental entre pop, rock y tecno.
La banda es el proyecto de David T. Ginzo, que se hace cargos de la voz, guitarra y efectos varios, un músico conocido por haber formado parte de bandas como Templeton o Lüger y de haber colaborado con muchos otros artistas de reconocido prestigio, habiendo editado, hasta la fecha, los discos “Own”, del 2011, “Waterspot”, del 2012, “Mountains moving”, del 2014, y “A war is coming”, del 2017, aunque está a punto de publicar un disco-libro llamado “Proxy”.
Comenzó su velada, sin mucha demora con respecto a la banda anterior, con una pieza con muchos efectos y buscando el interés de la gente, que todavía permanecía, en buen número, en la citada calle, siendo seguida por un tema más machacón y en donde tuvo más presencia la parte vocal, que en el corte precedente. Como podéis ver, estoy omitiendo los títulos de las canciones porque no las reconocí.
Entonces surgió un problema con uno de los aparatos que estaba utilizando y que era clave para poder desarrollar su concierto, pidiendo a la organización que pusiera música para que la gente no se apagará, mientras buscaba una solución; casualidades de la vida, Mikel, guitarra de Altos Cargos, tenía un utensilio igual que el que necesitaba, por lo que pudo seguir adelante el evento, agradeciendo David a Mikel el haber salvado la actuación, continuando con un tema algo más tranquilo.
Volvió a meter algo más de intensidad a su velada con una pieza más animadas y bailable y que contó con un machacón final, dentro de esta quedona canción, para continuar con otro tema que se inició con fuerza y ritmo, siendo un corte movido y en donde dotó a su sonido de más distorsión.
Pasó a preguntarnos qué tal estábamos y se disculpó por los problemas anteriores, recordando esos años en que estuvo en Torrelavega, tiempo atrás, continuando con un corte con un aire más enigmático, pero con fuerza y movido, tras el que cogió la guitarra que tenía en el escenario e interpretó una pieza calmada y con tranquilidad, dándole un toque diferente a su propuesta.
Nos confesó que la siguiente composición tiene ya una década, recordando que ha tenido varias bandas previas, siendo una canción que comenzó con un sonido hipnótico y con una guitarra relajada, mientras sonaba una batería machacona grabada, siendo sucedida por un corte que empezó de manera constante, pero relajada y con ese sonido más calmado, un tema en el que fue combinando diferentes voces.
Sin parar, continuó con otra canción que fue cogiendo fuerza paulatinamente, utilizando diferentes efectos, aunque manteniendo esa calma inicial, para seguir con un corte más intenso y machacón, con una base más animada, tras el que quiso agradecer al fotógrafo Igor Cobo su amistad y una foto que le había hecho y que había gustado mucho, prosiguiendo con una pieza lenta, como él mismo anunció, separándose del micrófono por momentos, pero manteniendo ese magnetismo que su música posee.
Con un sonido como de organillo comenzó su siguiente corte, más festivo y con un ritmo más machacón y animado, para continuar con una pieza que tuvo más fuerza, sobre todo en la voz inicial, con un aire más bailable y movido, siguiendo con un tema que arrancó con intensidad y que tuvo una esencia machacona y constante, una canción algo más extensa y movida, pero que también tenía partes relajadas.
Unida a la anterior llegaba una pieza con mucha fuerza en su inicio, muy potente, con tintes más oscuros, muy machacona y más bailable en su parte final, tras la que pidió aplausos para la organización, avisándonos de que estaba acabando y presentándonos “Ball under the car”, que va a ir en su próximo disco, una canción muy animada y movida y con un ritmo muy bailable.
Tuya
Y, aunque hizo amago de irse, todavía iba a sonar uno más, pidiéndonos que nos acercásemos y siendo el turno de “Coup in my eyes”, que, como él mismo nos dijo, había salido en marzo, recordando que tenía algunos discos a la venta por si queríamos y deseando que lo pasásemos muy bien estos días en las fiestas, un tema con un tono contagioso y dejándonos con un guiño a la canción “Las casas de verano e invierno” de Templeton.
De esta manera, tras algo más de una hora de actuación, concluía la velada de Tuya, que nos hizo pasar un buen fin de noche, con una propuesta animada y movida, que, aunque no es el estilo que suelo escuchar de manera habitual, consiguió mantener mi interés y que, esa diversidad estilística que practica me resultará más que interesante, igual que a los muchos que allí continuábamos.
Espero poder volver a ver este proyecto en futuras ocasiones y, a ser posible, que yo haya hecho los deberes y haya profundizado en su música para disfrutar de una experiencia más completa, pero lo cierto es que me parece una propuesta que huye de los cánones establecidos, mezclando diferentes estilos y sonidos, sin que ello quede diluido y manteniendo la atención de los que le están viéndolo en directo.
Sin duda, Tuya es una propuesta para ver en vivo y disfrutar de ello, como nosotros hicimos esta noche, donde ni los problemas iniciales pudieron con él.
De esta manera acababa la música en directo en la calle Argumosa ese día, en donde, gracias a Industrias Portugal y a la gente del Torrelavega Soundcity, pudimos ver el primer concierto de Altos Cargos, banda de la que se hablará mucho, como ya hace tiempo se está hablando de Tuya, una aventura nueva para mí, pero que me resultó muy interesante, logrando, entre todos, algo que durante el resto del año está prohibido en Torrelavega y es que pueda haber música undergound en el centro de esta ciudad. Gracias a todos por esa noche.
15/08/2023 
Txutxy Cano 
Txutxy Cano
Plaza, Torrelavega, Cantabria
