¡Por fin es viernes y el cuerpo lo sabe! …pero no del todo, eran las 18:15, momento que estaba marcado para que los granadinos Apartamentos Acapulco dieran el pistoletazo de salida a la segunda jornada de esta edición del Gigante y, a pesar de que eso de hacer cálculos al azar no se me da bien, no superábamos el centenar de personas los que estábamos en la Huerta del Obispo a la hora indicada. Puede que ese fuera, o no, el motivo por el cual Apartamentos Acapulco no llegaron a entrar en el concierto y tampoco meter a la gente en él, y es que eso la gente lo nota rápidamente.
El despiste general llego incluso a Ismael, “Es la primera vez que tocamos en Alcala, bueno, esto se considera Madrid ¿no? En Madrid si hemos tocado”. Lo cierto es que al grupo le resulto imposible conectar con una audiencia que estaba aterrizando en el festival y no tenía especial interés en su atención, y otros llegaron temprano para ver sobre todo a Loquillo, por sus camisetas, desde una posición privilegiada. No me atrevo a juzgar mas los casi sesenta minutos de actuación de AA porque, sinceramente, mentalmente me dispersaron una barbaridad, me resulto imposible mantenerles la atención.
Apartamentos Acapulco
Tulsa tomaba el relevo de los granadinos y con su Indie Pop meloso, y ya con un publico algo mas numeroso, con seguidores propios incluido, si conecto algo mas con el respetable. El caso es que al igual que me sucedió, de otro modo, con sus predecesores, el estilo de la banda me pareció que no es para este tipo de espectáculos, la distancia mata ese mínimo de interacción que este estilo exige.
Tal es asi que intuíamos incluso el sonido del escenario Vibra Mahou situado a unos 150 metros de allí, un escenario con una potencia de sonido sensiblemente inferior al de los dos principales, y llego el punto en que, en una pequeña pausa entre temas, Miren comenzó a cantar un poco el tema que estaban haciendo en ese escenario sus compañeros de Las Petunias.
Con estos antecedentes podemos comprender que aun estábamos entrando todos en calor en lo que iba a ser la jornada diaria del Gigante. saliéndonos un poco del tema a tratar, seria bueno considerar que es mejor, meter el mayor numero de bandas posibles o ajustar todo a las necesidades reales. Que no se malinterprete, Tulsa hizo su concierto, perfectamente interpretado, pero, no tenían en frente el numero de “atentos” oyentes para apreciarlo.
Tulsa
NTVG, o lo que es lo mismo, No Te Va Gustar, han sido para mi la gran sorpresa del festival. Reconozco que no conocía a estos uruguayos y la sorpresa fue mayúscula. Una banda de rock que llenaban el escenario Gigante del festival con su sección de metal incluida que le daban al grupo un sonido elegante y divertido. Podríamos decir que a las 20:15 comenzó de verdad la jornada del día, y es que la banda capitaneada por un brillante Emiliano puso a cantar y sudar al público que ahora sí, empezaba a poblar la explanada del Huerto del Obispo.
Posiblemente no somos conscientes de que estábamos viendo dar los primeros pasos en nuestro país de una banda que es realmente grande en su país, y a buen seguro yo no fui el único que se llevo una buena sorpresa con ellos por desconocimiento. Si en la jornada de ayer el dúo del día, que no el momento, más adelante sabréis el por qué lo digo, lo protagonizo Dani Fernandez con Antonio (Arde Bogotá) en esta ocasión el que compartió escenario con NTVG fue Gabriel (Shinova) que quiso hacer con la banda uruguaya uno de sus temas mas conocidos, “Ese maldito momento”. Esta claro que no se disfruta igual un concierto sin conocer con anterioridad los temas interpretados, pero yo disfruté muchísimo con esta gente por lo que me traje deberes a casa, nota mental, investigar NTVG, apuntároslo vosotros también.
No Te Va Gustar
Comenzaba los nombres mas esperados de la jornada, empezaba lo gordo, y empezaba a llover, únicamente para refrescar, pero lo justo para que nos empezáramos a preocupar por los comentarios que llevamos escuchando en estos días del cambio de temperatura y la maldita Dana que no puede esperarse un par de días para dar por culo.
La curiosa, efectiva, disposición sobre el escenario de Rufus T. Firefly con esos teclados enfrentados de Victor y Manola metieron en situación al publico que tenia un ojo en el escenario y otro en el cielo, bueno ojo y medio sobre las tablas porque era preciosa la estampa visual con la que acompañaron “Torre de marfil” para abrir el concierto. Esto ya era otra cosa, el público agolpado sobre el escenario Sideral estaba allí a propósito, para disfrutar de principio a fin de una de las bandas alternativas mas reconocidas de nuestro país.
Se empezaban a escuchar los primeros “chasquidos” en el sonido, no se si debidos al agua o que, pero afortunadamente no fue a más, momentos puntuales que no impidieron que todos disfrutáramos del show y es que no en vano, hablamos de una banda con una actividad ya cercana a las dos décadas con lo que tenían todo bajo control, todo lo que estábamos escuchando era, resumiéndolo, en una palabra, perfecto. Un concierto perfecto para festival que finalizaba con la gratitud de Victor por haber aguantado la lluvia sin que se moviera un alma de allí, y es que Rufus T. Firefly prendieron el primer petardo de la noche para que comenzara la mascletá.
Rufus T. Firefly
Era el momento del pez gordo de la noche, el nombre mas grande del festival diría yo, y es que a pesar de su larga trayectoria y su no parar de estar en la carretera, Jose Maria Sanz, Loquillo, es una apuesta siempre ganadora, y en festival ya no te cuento. Y es que quien es el guapo que es capaz de estar parado y en silencio cuando escucha un buen puñado de temas que son historia viva de nuestro rock.
La chulería del Loco es indiscutible, asi como porte y su presencia pero es que ha conseguido que el núcleo fuerte de su banda actual con la que lleva ya un buen numero de años se haya convertido por méritos propios en parte activa e importante de su directo, no hay que ver como jalea su ejercito de seguidores a Igor, Laurent, Alfonso o Josu, vamos que nos hemos acostumbrado todos a ver la guerra de mástiles sobre el escenario incluso con Pablo, el ultimo héroe de las seis cuerdas en llegar al grupo. Si pensáis un tema del Loco os digo, si, ese sonó, “Carne para Linda” en el que Loquillo se bajo al foso para estar mas cerca de los suyos, “El hombre de negro”, “Rey del Glam” con Igor y sus plumas al cuello, la coreadísima “La matare” …madre mía si este tema saliera ahora la que se montaría, y todo con apenas un par de breves descansos en los que el protagonismo lo cogían sus tres hachas y Alfonso al bajo.
Loquillo
¿Recordáis cuando os comenté anteriormente que el dúo de Gabri con NTVG no era el momento de la noche? Pues bien, eso es por que ese privilegio estaba reservado para el mas grande, para el Loco y el momento en que nos dijo “la vida tiene sentido cuando se cierra el círculo, es para mí un honor, más que un honor, presentar al compositor y amigo Sabino Mendez”, si, tuvimos el privilegio, quien sabe si será por última vez, de poder ver la dupla Loquillo/Sabino que tantos himnos nos ha dejado.
Fue la parte final del show, “El ritmo del garaje”, “Rock and Roll star” y “Cadillac solitario” fueron las elegidas y ya completamente fuera de tiempo, pero a ver quien es el guapo de decirle al Loco que corte que se había ido, y mucho, de tiempo. Se nos fue el retraso a la media hora, pero de eso solo nos dimos cuenta cuando Loquillo estaba bajando las escaleras del escenario y nosotros teníamos que desplazarnos al Sideral a disfrutar de Shinova. El Loco, siempre el Loco, larga vida a Loquillo.
Loquillo
Antes de comenzar, pido perdón, ahora soy completamente parcial, el amor que siento por Shinova puede que me haga deciros en algún momento que adoro a estos cabrones, letra y música se funden en un absoluto cuadro de color y brillantez pintado por el mismo Sorolla al borde de cualquier mar. El retraso comentado no impidió que Shinova se llevara quizás la ovación más grande la noche, si, y esto no es forofismo, pero al menos yo desde mi posición tuve la sensación de que el ruido era mayor con los de Berriz, quizás por la edad de sus seguidores, en mejor estado de cuerdas vocales que los del loco.
Y sabéis que…que yo que me alegro por que como digo siempre, considero una tremenda injusticia que esta gente aun no este jugando la Champions League musical de nuestro país. Una vez más Gabri, Dani, Erlantz, Joshua y Ander pusieron el recinto patas arriba, incluso tuvieron la tremenda elegancia de decir sin decir al comentar con una medio sonrisa que su show iba a ser “corto pero intenso, muy intenso, porque no sabían muy bien que había sucedido, pero había un buen retraso”, que grande Gabriel. Y a fe que lo fue, sin prácticamente charlas sonaron tema tras tema, “Niña Kamikaze”, “Solo ruido”, “Doce meses”, “Gigantes”, “Volver”, “La sonrisa intacta”, y lo que hubiera dado por que coincidieran en día con ellos Viva Suecia, quizás, solo quizás, porque nunca lo sabremos, podríamos haber disfrutado de “Si no es contigo” con Rafa sobre el escenario, en cualquier caso, las disfrutamos igual. Fue un suspiro, un abrir y cerrar de ojos y ya estábamos escuchando “Te debo una canción” y con la banda despidiéndose de nosotros. No me cansare de decirlo, de robarles su propia estrofa, de hacerla mía una y otra vez, gracias, por tanto, por la risa y el llanto, gracias por ser parte de mí.
Shinova
No se vayan todavía, aún hay más, si pensabais que lo habíamos visto todo, pues no, llegaba el momento surrealista de la noche, el instante en el que no entendíamos por que no estaba aun todo preparado para que el trio Amatria comenzara su actuación, y cuando empezó a sonar los samplers lanzados desde la batería electrónica y la pequeña electrónica junto al micro de Joni lo entendimos todo, aquello no tenia ni pies ni cabeza, sonaban dos cosas distintas desde ambos dispositivos y con la voz por otro camino no había Dios que entendiera que sucedía. Joni se vio obligado a para el despropósito y comenzaban las carreras en el escenario para intentar solucionarlo.
Pasados unos minutos llegaría el segundo intento, comenzamos de nuevo, casi cuarenta y cinco minutos ya de retraso y nuevo intento fallido, y es que “es imposible tocar asi porque hay un problema técnico con las pistas de la batería y no puede tocar”, bueno, para un tipo clásico como yo me reservo la opinión a esto. Estaba dándome angustia incluso a mí de ver la cara de circunstancia de Joni viendo como el que parecía su manager salía al escenario a decir a sus chicos que todos fuera que eso se había terminado. ¿Lo intentamos de nuevo? Tercer intento, Joni anuncia que no querían robarle mas tiempo al siguiente grupo y que iban a hacer un ultimo intentado comenzando casi por el final, por su último tema, “Llámame loco” …y esta vez sí, por fin. Tan solo fueron cuatro canciones las que hicieron en los que le dio tiempo a bajarse con el publico a cantar antes de despedirse con “Techno Manchego” y diciendo que había sido un concierto muy especial para él, que no lo olvidaría jamás, y es que no en vano, el publico que tuvo delante estuvo muy entregado a Amatria durante todo el proceso y disfruto, canto y salto sin para los cuatro temas.
Amatria
Ya era hora de irnos, habíamos tenido suficiente por hoy y como sucediera el día anterior con Serial Killerz, la discoteca de We are Not DJs, me acompañaron hasta que abandone el recinto, pensando en que aún queda un día de festival en el que hay nombres que me apetece mucho disfrutar. A dormir.