Cuando Sara Hebe cruza desde el otro lado del charco para cantar por España, siempre es una muy buena noticia, y siempre hay un público que la espera con los brazos abiertos, deseoso de bailar con rabia y alegría sus letras. Y así se sintió el jueves 21 de septiembre, en el Teatro Eslava de Madrid, donde se acogió a la artista para dar su concierto.

La cantante argentina ha estado de gira por España en varias ciudades como Barcelona, Valencia o Tarragona.

Para Madrid, Sara Hebe contó como artista invitada con K1za, una de las nuevas caras del rap español. Por desgracia, desde Insonoro no pudimos llegar a tiempo para cubrirlo. Así que esperamos poder verla en otra ocasión.

En este tour, la cantante venía acompañada con banda, concretamente con una guitarra y una batería. Sin duda fue todo un acierto contar con estos instrumentos, puesto que le aportaron ese toque más punki que le caracteriza a la rapera.

El concierto empezó con temas de su último álbum “Sucia estrella”, lanzado en 2022, entre los que sonaron “Puras Wachas”, “México”, o “Cheto mal”, con los que el público empezó a bailar y saltar desde el minuto uno.

Entre esas primeras canciones también tocó “Almacén de datos”, una de esas joyas -que sacó junto a Ana Tijoux- del último disco, y que se mete de lleno contra la industria musical. Y es que, si algo hay que aplaudir de la rapera, aparte de esas letras punzantes y nada amables, son sus principios. La cantante no lo ha tenido fácil, ya que desde sus inicios trabaja de forma autogestionada y sin discográfica, y sigue por ese camino, poco agradecido, lanzando nuevos temas con las que denunciar injusticias.

Hay que destacar que en algunas ocasiones la voz no se escuchaba del todo bien y estaba algo baja de volumen. No obstante, la actitud de la cantante junto con un público muy entregado al directo hizo de parche en esos pequeños fallos.

Fue a mitad del concierto cuando nos transportamos a los inicios de la artista con temas como “Lujo popular” e “Histórica”. Pero, sin duda, la canción que hizo saltar por los aires toda la sala fue “A.C.A.B.”, un himno antifascista y feminista, que canta con rabia: “Yo abortaría por si se hace policía”.

A esa sintonía rompedora le siguió “Mándame tu luz”, que se entremezcló con el ritmo de la mítica “Hit the road Jack”.

También hubo hueco para unas palabras reivindicativas. Sara Hebe animó a que la gente de su país fuera a votar este octubre, ya que se encuentran en proceso de elecciones. Además, la cantante comparó la situación con los recientes comicios de España, en los que también ha acechado la extrema derecha.

Como sorpresa de la noche, la artista Romea salió al escenario para cantar junto a Sara Hebe su conocido tema “Hola”, en el que la cumbia invitó a toda la gente a mover sus caderas.

El público siguió contoneándose con una de las nuevas canciones, “Sal fina”, en la que una chica salió espontáneamente al escenario para bailar de manera improvisada junto a Sara Hebe. Todo un espectáculo improvisado que sumó puntos al directo.

Y para ir cerrando, la fantástica “El marginal” invitó a seguir moviendo las caderas al ritmo de la cumbia. Pero para poner el broche de oro a esta celebración de vida, “Asado de fa”, con una base algo distinta a la original -como ya acostumbra a hacer en los últimos directos-, culminó la noche con pogos de muy buen rollo.

Tras terminar, las caras de felicidad invadían toda la sala y se afirmaba una vez más el empoderamiento que aporta Sara Hebe con su música. Así que esperemos que siga ahí arriba, en parte por las que queremos seguir disfrutando de sus creaciones, pero también como referente para las artistas que están por venir.