Una vez más encarábamos un viernes con diversas propuestas musicales entre las que escoger, aunque, para esta ocasión, tenía la decisión tomada desde hacía semanas y es que iban a actuar, en el Rock Beer The New, dos bandas que habían lanzado disco ese 2023 y a los que no había podido ver todavía con esos nuevos temas, como eran los madrileños Amigo Buster y los campurrianos Stock, por lo que iba a tener un dos por uno e iba a poder disfrutar de ambas formaciones.

Cuando llegué a la sala, a la que regresaba menos de una semana después de mi anterior visita, tras sortear la salida del trabajo y el tener que aparcar en una ciudad como Santander en esas fechas, pude comprobar como Amigo Buster estaban acabando de probar, pero todavía el inicio del concierto se iba a demorar un poco más.

La verdad es que para ser la fecha que era, había una buena presencia de gente cuando los chicos de Amigo Buster arrancaron su actuación, un cuarteto al que había visto dos años atrás en esa misma sala  y que ya entonces me gustaron, estando integrado el mismo por Nico, voz y guitarra, Coque, guitarra y coros, Juanma, bajo y coros, y Carlos, batería.

Desde su creación, en el año 2015, la banda ha publicado tres discos, siendo los títulos y años de los mismos “Lo que escuchan las señoras”, del 2016, ‘Lo apuesto todo a mañana”, del 2018, y ese “Necesito algo más fuerte”, de ese mismo año y que era el que venían a presentar esta noche a la capital cántabra.

Comenzaron su actuación con “Apunta y dispara”, de su ópera prima, con ese inicio tan guitarrero y un buen sonido, siendo una pieza muy pegadiza y en la que aprovecharon para saludarnos, antes de ser unida con la quedona “Ay ay ay”, de ese mismo trabajo, con ese coreable arranque, una canción muy movida y guitarrera y en la que nos hicieron cantar el estribillo, logrando, poco a poco, la atención de los allí presentes.

Volvieron a saludarnos y se presentaron, para, sin casi parar, comenzar el desglose de los cortes que están recogido en su reciente disco con “Tentando a la suerte”, un tema muy movido, con un estribillo quedón y ese sonido que te engancha, para continuar con la que cierra ese mismo trabajo, es decir, “Mamoneo”, que fue unida a la anterior y que se inició con mucha fuerza inicial, siendo una canción muy eléctrica y animada, aunque con partes más relajada hacia la mitad de la misma.

Una de las canciones que más me han gustado de este último plástico de la banda es “Juanito Rokanrola”, que fue la siguiente en sonar, después de volver a saludarnos mientras afinaban, una pieza muy pegadiza y quedona, con una letra, como suele ser habitual en ellos, con mucha miga, tras la que nos pidieron que nos acercásemos un poco más, continuando con “Me abandonó”, de su anterior disco, un tema que empezó con un aire animado y bailable, dejándonos un corte muy pegadizo y quedón.

Regresaban a su actual obra con “Usar y tirar”, que fue enlazada con la anterior, una pieza que comenzó con una batería machacona, contando con una sección rítmica presente en su inicio, dejándonos una canción muy movida y pegadiza, al mismo tiempo que coreable y festiva, de las de cantar con ganas en sus directos, volviendo, tras agradecernos nuestros aplausos, a su primer disco con la genial “Me gusta esta ciudad”, un tema que fue iniciado de manera relajada con el sonido del bajo, aunque luego fue cogiendo mucha fuerza y que se convirtió en un gran himno; una verdadera pasada.

Nos agradecieron nuestra presencia, así como a los Stock por compartir cartel con ellos, siendo el turno de “Necesito algo más fuerte”, la que da título a su último lanzamiento, con un ritmo movido y bailable, siendo una pieza muy animada y que nos hizo mover la cabeza y todo el cuerpo, antes de anticiparnos que el siguiente tema seguro que lo conocíamos y que teníamos que ayudarlos a cantar, amenazando con destrozar un poco ese mítico “Groenlandia”, de Los Zombis, que ellos recogieron en su segundo disco, un clásico, muy bien tocado, quedándoles algo más cañero y con un acelerado final.

Turno ahora para presentar la siguiente canción, “Radio ciudad”, de su reciente obra, la cual empezó con fuerza y un sonido machacón, siendo una pieza con alternancia de intensidades y un estribillo pegadizo, avisándonos de que empezaban a encarar la recta final de su velada, llegando el momento de “Paranoia”, de su ópera prima, no sin antes agradecer tanto a la sala como a Stock por esta noche, mostrándose encantados de estar allí, un tema que empezó guitarrero, con un ritmo constante y pegadizo, dejándonos con un corte animado, que sirvió para presentar a los componentes de la banda y que contó con un intenso final.

Continuaron avisándonos de que la siguiente también nos la sabíamos y es que llegaba ese “Popurrí”, en donde sonaron fragmentos de clásicos del rock estatal como son el “Agradecido”, de Rosendo, “En blanco y negro”, de Barricada, y el “Bailaré sobre tu tumba”, de Siniestro Total, que todos hemos cantado muchas veces y a los que dieron un toque personal, pasando a reiterar los agradecimientos, especialmente a Stock, animándonos a acercarnos y es que aquello se acababa, siendo el turno de ese “Rock de los tarados”, que cerraba su primer trabajo, un tema con un ritmo machacón y el quien nos pidieron nuestras palmas, pasando luego a relajar levemente el sonido, para luego recuperar esa fuerza que tenía.

De esta manera y después de casi una hora sobre las tablas, concluía un muy buen concierto de unos Amigo Buster a la que se les notó muy motivados y a gusto, con mucha entrega sobre el escenario y unos temas que se te quedan, por lo menos a mí, ofreciéndonos una propuesta muy quedona y que hace que disfrutes con su música, al margen de la que puedas conocer más o menos, pero es que es inevitable moverte con ellos.

Si la anterior vez que les vi Amigo Buster me gustaron mucho, en esta ocasión todavía me llenaron más, ya que, además de que tuviera más seguida a la banda, a ellos mismos se les vio mucho más cómodos y demostraron que son una máquina de hacer temas pegadizos, pero, al mismo tiempo, con mucha calidad dentro de los mismos, por lo que espero y confío que la formación siga creciendo tanto como se merecen.

Sin duda, Amigo Buster son una banda con la que puedes disfrutar en sus discos de estudio, pero que en directo nos ofrecen todo el jugo de su propuesta; yo, si puedo, no me los vuelvo a perder cuando vuelvan por aquí, ¿y tú?

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Tras un cambio muy rápido, teníamos sobre las tablas a Stock, desde Reinosa, una banda a la que hacía demasiados años que no veía en directo, concretamente 6, aunque mis compañeros de web ya os han ido relatando algunos de sus conciertos en estas páginas en fechas más cercanas.

Actualmente este grupo, con ya más de una década de trayectoria, está compuesto por Kike Lázaro Gutiérrez, voz y guitarra, Diego López Rodríguez, guitarra y coros, Pablo Ibáñez López, batería, y el último en subirse al barco, Nacho Varona, bajo y coros, habiendo publicado, hasta el momento, los discos “Cuando todo va bien”, del 2014, “Decidido”, del 2016, y “La distancia”, de ese mismo año, además de ese “Stock (Edición Deluxe)”, del 2019, en el que hacían una revisión de algunos temas de sus dos primeros trabajos.

Igual que hacen en su actual disco, comenzaron su velada con “Libres”, un tema con mucha fuerza inicial y que fue ganando intensidad, dejándonos un corte muy pegadizo y que se queda rápidamente, para echar la vista a su segunda obra con “Huracán”, que fue seguida al anterior y que sirvió para saludarnos, siendo una canción con ese sonido elegante que tienen, ganando mucha fuerza y dejándonos una pieza muy quedona.

Nos agradecieron nuestra presencia y pagar por ir a verlos, además de pedir aplausos para sus compañeros de cartel, continuando con “Naturaleza”, de su nuevo disco, que fue comenzado por el sonido de la batería, un tema muy movido y animado, pero, al mismo tiempo, con un ritmo relajado y pegadizo, antes de continuar y hacer su única incursión, esta noche, en su ópera prima con “La luna en el camino”, una canción que empezó con fuerza, muy movida y pegadiza y con una sección rítmica muy marcada, dejándonos una pieza intensa y para la que pidieron palmas en una parte de la misma.

Continuaron, sin pausa alguna, con “Jugar contigo”, de su segundo trabajo, una pieza movida y animada, a la vez que muy intensa, con el bajo teniendo mucha presencia y preguntándonos, en su parte final, si estábamos allí, con positiva respuesta de los presentes, para continuar en el mismo disco con “Extraños”, un tema que empezó de manera tranquila, pero cogiendo poco a poco fuerza, siendo un corte muy pegadizo y es que es uno de sus clásicos.

Turno ahora para volver a su actual trabajo con una de las canciones que más me gustan del mismo, “Bolonia”, antes de la cual nos preguntaron qué tal lo estábamos pasando, con positiva respuesta de los asistentes, para la que Kike se colgó una guitarra acústica, siendo una bella pieza, con partes más constantes, pero que luego tuvo más cambios y que les quedó muy bien, para, sin dejar esa misma obra, ser el momento de “Días de gloria”, un tema que empezó con fuerza y que sirvió para presentar a los componentes de la banda, dejándonos un corte muy quedón, con mucha intensidad y un estribillo pegadizo.

Sin pausa alguna, continuaron repasando su actual lanzamiento con “Para ya”, con su cantante recordándonos que había tenido fiebre durante toda la semana y que no había estado seguro de si iba a poder estar allí, un tema con un inicio calmado, muy pausado, pero con gancho y fuerza en el estribillo, pasando a avisarnos de que habían traído discos, para aquellos que no los tuvieras y quisieran tenerlos, siendo el momento de la canción que le da título, “La distancia”, que se inició con esa intro y con un sonido animado, aunque luego fuera una pieza que mantuvo un ritmo constante, pero con intensidad en el estribillo y con esas palmas en la parte en que baja dicha intensidad, aunque luego ésta es recuperada.

Nos fueron adelantando que aquello se iba acabando, siendo el turno de volver a su segunda obra con “La realidad”, una canción que fue iniciada con esas palmas y agradeciendo a la sala y a los medios presentes su labor, siendo una pieza con mucha fuerza y con intensidad, a la vez que pegadiza y movida y que contó con un breve solo de batería, para, sin pausa alguna, continuar con “Cuando amanezca”, el tema que cierra su actual disco y que empezó de manera calmada y relajada, pero con esa fuerza que dotaba el estribillo y que contó con un final machacón.

Llegaba el momento de encarar la recta final y lo iban a hacer con uno de sus temas más míticos como es “Decidido”, el que abría su anterior disco, un corte muy trabajado y celebrado y que resultó muy coreado y pegadizo, tras el que vacilaron sobre las pantortillas de Casa Vejo de su localidad, proclamadas como las mejores, para concluir ya con “Lodo”, de su última obra y en la que su bajista se situó entre el público, una canción con fuerza y potencia, ganando intensidad paulatinamente y con un final muy intenso y contundente.

De esta manera concluía, tras algo más de una hora, un gran concierto de los Stock, pese a los problemas que llevaba arrastrando el cantante, demostrando la calidad y clase que tienen, así como sus tablas, algo que llevan demostrando desde sus inicios y es que su música te puede llamar más o menos la atención en estudio, pero en directo son m muy buenos y saben ganarse a la gente, como hicieron esta noche.

La verdad es que, después de tanto tiempo sin verlos en directo, me encontré a una banda en un gran momento de forma, con un gran nuevo disco, que repasaron ampliamente, aunque sin renunciar a los clásicos de sus dos primeros trabajos, y, pese a tener que quitar algún tema para que Kike pudiera aguantar de la mejor manera posible, nos dejaron con una buena y entrañable actuación.

Espero no tardar tanto tiempo en volver a ver a unos Stock que deberían, con este último disco, hacerse ya con un nombre dentro de la escena estatal, porque canciones tienen y en directo lo bordan, como pudimos ver esta noche; no os los perdáis.

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Tras despedirme de parte del público y de los integrantes de ambas bandas, me fui del Rock Beer The New de Santander, en donde, esta noche, disfrutamos de dos grandes grupos de rock and roll, cada uno en su estilo, comprobando, una vez más, que hay muchas y muy buenas formaciones esperando a que les demos una oportunidad, para demostrar que pueden estar en lo más alto de los carteles, como nos dejaron claro esta noche tanto Amigo Buster como Stock; de nosotros depende que lo consigan, porque ellos ganas y mimbres tienen de sobra.