Otro de esos fines de semana con muchos eventos en donde escoger, pero, después de darle muchas vueltas, aposté por la oferta que nos ofrecían desde la Asociación Cultural Los Bancos de Atrás de Unquera, en donde iba a ver, por vez primera en directo, a tres bandas de las que tampoco tenía muchas referencias: los burgaleses Endless War, los salamantinos Sacrosanto Decadencia Occidental y los donostiarras Urgull.

Después de enterarme bien de si los horarios iban a ser como otras veces y de escuchar, muy por encima, lo poco que las tres bandas tienen por redes, puse rumbo a Unquera, más de un mes después de mi anterior visita y tras hacer virguerías para llegar a la hora, ya que ese día le tuve bastante liado desde por la mañana.

Lo cierto es que llegué con suficiente antelación para poder saludar a parte de la gente, que ya en buen número estaba por allí deambulando, mientras se ajustaban los últimos detalles, para que todos sonará como los protagonistas de la velada necesitaban y es que da gusto como miman los detalles en esta asociación.

La primera banda en salir fueron Endless War, que lo hicieron de manera puntual, siendo un quinteto, compuesto por María Banshee, voz, Saúl, guitara y coros, Dílmar, guitarra, Dann, bajo y coros, y Azofra, batería, y de los que no había escuchado nada, porque no hay información de ellos por las redes y, hasta donde yo sé, tampoco música subida por lado alguno.

Iniciaron su andadura con “Dark season”, un tema que empezó lento y pesado, pero que luego fue cogiendo más fuerza y dando mucha caña, siendo un corte con muchos cambios de ritmo, tras el cual se presentaron y pasaron a tocar la canción que se llama como la banda, “Endless war”, una pieza que comenzaron con un sonido potente y machacón, para luego coger más velocidad, aunque jugando con algunas partes más lentas.

Siguieron adelante con la que es su visión del abuso de la tecnología, reflejada en “Long live the new flesh”, un tema muy rápido y cañero, que sonó con mucha fuerza e intensidad y que demostró la gran calidad que tiene la banda, para continuar con “XPCS”, que fue presentada como una balada, siendo una canción, que empezó de manera relajada, pero que luego fue cogiendo más fuerza, para, después, acelerarse, sonando con mucha velocidad y muy contundente.

Nos animaron a movernos un poco más, que era lo que ellos querían, para continuar con “Running of the rails”, un tema que se inició con mucha fuerza y rapidez, dejándonos un corte muy veloz y contundente y que fue acabado en seco, antes de seguir con “Redemption thru murder”, una pieza que comenzó con potencia y velocidad, aunque luego tuvo partes más relajada, pero sin perder esa intensidad y fuerza, alternando momentos algo más calmados con otros más veloces.

Tras pedir algo de bebida para hidratarse, continuaron con “No reason for peace”, un tema que empezó lento, pero, al mismo tiempo, con fuerza y potencia, para luego acelerarse, combinando muy bien diferentes ritmos y dejándonos un muy buen corte, para pasar a aviarnos de que era el momento de animarnos, ya que quedaba poco de su actuación, continuando con “Friendly fire”, una canción con fuerza, la cual tuvo un ritmo quedón, con contundencia e intensidad y donde también recogieron diversos cambios, mostrándonos una pieza muy machacona y que contó con un muy buen solo guitarra.

Justo en este momento, Saúl rompió una de las cuerdas de su guitarra, teniendo que buscar una alternativa, que llegó gracias a la colaboración del guitarrista de Urgull, que le prestó la suya, aprovechando, mientras hacían algunos ajustes, para recordar que a los grupos se les pagaba con entrada inversa, siendo el turno de “Ecclessiastic punishment”, un corte que empezó muy rápido y de manera violeta y poderosa, pero combinando con partes más calmadas.

Solamente restaba un tema y aprovecharon para mostrarse encantados de haber estado allí, dejándonos con sus compañeros de cartel, aunque todavía hubo tiempo para escuchar “The struggle within´”, un corte que empezó lento y al mismo tiempo potente, cogiendo más velocidad cuando María empezó a cantar, teniendo algunas partes más calmadas, pero que, en general, fue una muy buena pieza y muy contundente.

De esta manera y tras estar 50 minutos sobre las tablas, concluía la actuación de unos Endless War, que, para mí, fueron una gran sorpresa y es que me gustó mucho su propuesta y más teniendo en cuenta que iba a ciegas con ellos, ofreciéndonos un concierto, que se me pasó en un suspiro y donde demostraron que tienen muy buenos temas para poder tener más reconocimiento.

La verdad es que es una pena que su música no esté en redes sociales, o al menos yo no tengo identificada ninguna de la banda, para que fuera más gente la que conociera de lo que es capaz este quinteto, con una sección rítmica muy contundente, una cantante que es un verdadero torbellino en directo y una pareja de guitarras que nos deleitan con unos sonidos realmente buenos y poderosos.

Os recomiendo que escuchéis a estos Endless War y, sobre todo, que los vayáis a ver en directo, ya que son una banda que os va a gustar y mucho.

La siguiente banda en subirse a las tablas tenía los mismos integrantes que el grupo precedentes, salvo en el puesto de guitarra, y es que Sacrosanta Decadencia Occidental, que eran a los que íbamos a escuchar ahora, están formados por María Banshee, voz, Edu, guitarra y coros, Dann, bajo, y Azofra, batería, una formación que lleva en activo menos de dos años, pero que ya tienen editado un disco, llamado “Cacer​í​a Salvaxe”, editado la primavera pasada.

Sin mucha demora se subieron al escenario con esa intro, llamada “Bágoas”, la misma con la que inician su disco, con la que fueron poniéndonos en situación, antes de comenzar propiamente el concierto con el tema “Autofaxia”, precisamente el que sucede a la anterior en este trabajo, un corte que empezó lento y pesado, pero que luego se volvió más rápido e intenso, para, después de presentarse y comentarnos que cantaban en gallego, continuar el recorrido por su ópera prima con “Ouvidos de rabia”, una pieza muy intensa y veloz, que hizo que aquello se animará todavía más.

Turno del corte que da nombre a ese álbum que venían presentando, “Cacería salvaxe”, que fue unido a la anterior, siendo un tema tocado a toda velocidad y que contó con una sección rítmica muy potente, para pasar a interpretar una canción nueva, llamada “Matar calando”, dejándonos una pieza muy rápida y poderosa, en la que se muestra la contundencia de su propuesta, así como que este es un proyecto en crecimiento.

Momento de regresas a los temas que se incluyen en su único disco con “Lume”, un corte muy rápido y veloz, mostrándonos la fiereza que posee su música, para, sin dejar ese mismo trabajo, ser el turno “Discípulos de Pilato”, que quisieron dedicar a todos aquellos que se callan ante las injusticias, una canción que empezó calmada, pero que luego cogió mucha velocidad, siendo una pieza muy directa y potente.

Llegaba el momento de una versión, en este caso del “Power pigs”, de Wolfpack, un tema que contó con un sonido muy fuerte y potente, con mucha energía, aunque también tuvo partes algo más calmadas, para presentarnos otra canción no recogida en su disco, “As cadeas polo chan”, una pieza que fue tocada a toda velocidad y en la que María nos ofreció unas voces verdaderamente agresivas.

De vuelta a su ópera prima, era el turno de “Galeras”, sin casi pausa con la anterior, un tema que fue tocado a toda pastilla y con fuerza, aunque luego se relajó, pero sin perder la intensidad y recuperando, después, esa velocidad previa, para pasar a otra pieza nueva, “As fillas da neboa”, la cual empezó lenta, pero que luego fue cogiendo mucha velocidad y potencia, comentándonos, al finalizar la misma, que esta canción habla de los hijos de puta que queman bosques, algo habitual también por esta zona.

Aun restaba un tema de tocar de este disco que tienen editado y este era “Servir e protexer”, un corte que se inició con mucha fuerza, con la sección rítmica sonando muy machacona y contundente, para presentarnos una pieza que todavía no está editada, llamada “A morte dun deus”, una canción que comenzó lenta, pero que luego fue cogiendo intensidad y que acabó por acelerarse en la parte final.

Nos avisaron de que solamente les quedaban dos canciones, siendo dos cortes que no han sido editados todavía, comenzando con “Esquecidos”, un tema muy rápido, corto y directo, para, sin pausa alguna, continuar con “Warmachine”, una pieza muy rápida y veloz y con la que dieron por concluido su actuación, después de, más o menos, 35 minutos sobre las tablas.

La verdad es que Sacrosanta Decadencia Occidental nos ofrecieron una actuación muy rápida y directa, demostrando tener temas con mucha calidad y tocando con mucha intensidad, logrando que, en todo momento, estuviéramos pendientes de lo que pasaba sobre el escenario, con esas canciones en las que esa velocidad, que su música posee, a veces, se relajaba levemente, pero sin perder dicha contundencia.

Musicalmente se ve que están bien engrasados y es que el hecho de ser gente curtidos en muchas batallas y de haber compartido más proyectos juntos, hace que todo funcione como un reloj, sin olvidar a María que, como acababa de hacer hacía pocos minutos con Endless War, tiene mucho carisma y una gran voz, la cual en absoluto se mostró perjudicada, pese al escaso descanso que había habido entre sus dos actuaciones.

Aunque lleven poco tiempo como tal, Sacrosanta Decadencia Occidental se ve que se han tomado muy en serio esta aventura, incluso se curraron unos folios con las letras de las canciones muy bien ilustradas, y la verdad es que me gustó mucho su propuesta; dadles una escucha e id a verlos en directo, que no os vais a arrepentir.

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Y la noche se iba a cerrar con los donostiarras Urgull, un proyecto que se crea hacía el 2018 y que tiene gabado un split con la banda Auxilio, que salió a la venta en abril del 2020 y que, al menos allí, solamente se podía adquirir en formato cassette, siendo la única referencia, hasta el momento, de este trío, del que no tengo datos de los nombres de sus integrantes por más que he buscado.

Tampoco hubo que esperar mucho para verlos encima del escenario para desgranar sus temas, los cuales no voy a nombrar ya que desconozco sus títulos, al no haber un setlist, comenzado la velada con una pieza corta y que sonó rápida y directa, siendo unida por otra canción que tocaron a toda velocidad y que mostró todo el poderío de su sonido, haciendo que la gente se acercará a las primeras filas.

Continuaron su actuación con otro tema muy potente y cañero, con los tres músicos demostrando la intensidad y la potencia de su propuesta, antes de unir el anterior corte con una pieza que resultó muy rápida y cañera, la cual fue seguida por una nueva canción, que fue tocada a toda velocidad, y que sonó muy contundente y con mucha fuerza, haciendo las delicias de los presentes.

Turno ahora para presentarse y darnos gracias por haber acudido y quedarnos hasta el final, para seguir con otro tema que resultó muy rápido y guitarrero, además de breve y tocado a toda pastilla, para continuar con otra canción, que fue interpretada a toda velocidad desde su inicio y que nos hizo movernos con ganas, uniéndola con una nueva pieza, que empezaron de manera explosiva, una composición muy rápida y cañera y en donde se pudo comprobar, como durante toda su velada, la brutal pegada de su batería.

No había tiempo que perder y a la anterior la siguió un tema tocado a toda velocidad y muy rápido, mientras podíamos ver la cara de satisfacción de los presentes, para continuar con una nueva pieza, que resultó muy veloz y explosiva, tras la que se tomaron un brevísimo respiro, para avanzar con otra canción, la cual sonó rápida y brutal, además de muy intensa.

Una breve pausa nos introdujo en un nuevo tema, que se inició con un sonido guitarrero, para luego volverse un corte muy veloz y potente, siendo unido por la batería, para dar paso a una pieza explosiva, muy cañera y poderosa, con un sonido de batería realmente bestial, antes de que, tras un pequeño respiro, continuasen con otra canción, que empezó de manera potente y dura, cogiendo todavía más velocidad a medida que ésta avanzaba.

Continuaron con un corte, que se inició con un sonido muy especial de guitarra, para luego meter bien de caña e intensificándose todavía más por momentos, para hacer un breve parón y anunciarnos que iban a enfilar las ultimas canciones, no sin antes agradecernos el haber venido, siendo el turno de una pieza, que comenzó con un sonido relajado del bajo, pero que luego fue cogiendo más velocidad, dejándonos una composición muy rápida y potente.

Ahora era el momento de un tema que comenzó con un sonido muy contundente de batería y que fue un corte muy rápido, para concluir con una canción tocada a toda velocidad, muy rápida y cañera y con la que darían el punto y final a su actuación, después de estar sobre las tablas algo más de media hora, mientras nos volvían a recordar que a los grupos se les pagaba mediante nuestra aportación voluntaria, es decir, mediante entrada inversa, además de adquiriendo su merchán.  

Urgull nos ofrecieron un explosivo concierto, muy potente y demostrando ser una banda realmente cañera, con una propuesta en la que no dejan, prácticamente, ni un segundo de descanso entre tema y tema, pero ejecutándolos con mucha calidad y, además, logrando que los presentes no puedan dejar de mirar al escenario, ya que no quieres perderte ni un detalle de lo que allí ocurría.

Aunque haya hecho hincapié en las cualidades de su batería, que tocó de manera espectacular, no hemos de olvidar que estamos ante un trío compuesto por muy buenos músicos, a tenor de lo visto en esta velada, y tanto la guitarra, como la voz y el bajo sonaron con mucha fuerza e intensidad y, sobre todo, dando personalidad a cada una de las canciones que fueron repasando esta noche.

Sin duda, Urgull son una banda para disfrutar con ella, si os gusta la música especialmente intensa y rápida, y yo os recomiendo que los escuchéis y que vayáis a verlos en directo, porque os van a gustar.

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Tras comprar algo de merchán de las bandas y después de despedirme de buena parte de los asistentes, me fui de la Asociación Cultural Los Bancos de Atrás, que no paran de traer grupos de todos los lados y, con ello, descubrir a formaciones, a las que, de otro modo, tendríamos más difícil acceder, como fueron esta noche Endless War, Sacrosanta Decadencia Occidental y Urgull, cada una con una propuesta diferente, pero todas ellas validas y que nos alegraron esta noche de sábado a todos los presentes; por más noches como ésta.