Me encanta el formato acústico, aquí no hay artificios, no hay “ruido” donde se puedan esconder defectos y errores, es por eso por lo que cuando un artista decide lanzarse a girar de esta forma, lo primero, merece todo mi respeto y lo segundo, me genera una gran curiosidad. Bien es cierto que el estilo también influye y marca mucho la dificultad de adaptación de los temas, pero, la valentía de desnudar tus canciones y exponerte al máximo está ahí con lo que, chapeau.
Que mejor para arrancar que con “Bienvenido” para decir hola musicalmente a los presentes sobre un escenario austero en el que podíamos ver unos taburetes, acompañados por las guitarras de Diego y del inmenso Tato Latorre que además de las guitarras, acústicas y eléctricas, se enfundo en algunos momentos el bajo. Por otro lado, el maestro Alejandro a las teclas y un Marino Saiz que edulcora y engrandece todo lo que toca con su violín y su presencia. Los horarios del Circo Price despistaron un segundo a Diego, “Que tal buenas………tardes, como estáis” y que en nuestro país es extraño que un artista principal comience su concierto a las 20:00 horas, que para nada es malo, al contrario, es un horario que permite a los mas peques poder acompañar a sus progenitores a escuchar música de verdad, educándoles desde pequeños para que aun quede alguna esperanza.
Funambulista
“Venimos con la sana intención de hacer de esta noche una noche especial”, lo que os digo, estos horarios despistan a cualquiera. “Este tipo de conciertos intenta que no ocurra algo que a veces sucede cuando voy a un concierto y es que suenen temas que no conozco, y esto aquí no va a ocurrir” de esta forma lanzaba el mensaje a la audiencia de que cuando quisieran una canción la gritaran y la harían, algo que a la vez es un reto para ellos también, y recogieron en guante en alguna fase del concierto.
Como dice el meme, sabes que te has hecho mayor cuando escuchas “Quédate” y sientes nota a nota un piano suave, una voz acariciándote el corazón y un violín meciéndote el alma hasta conseguir que te acomodes en un cielo de lleno de nubes que te llena de paz, pues eso ¿necesitáis alguna descripción más de lo que estaba sucediendo por momentos? Pero no todo era sensatez, ni mucho menos, no estábamos en el auditorio nacional escuchando a la banda y coro de RTVE, así que había que mover aquello, aunque “Si después de darte amor” no sea lo mas apropiado para eso, pero si para que diego lleve al limite su voz.
Pero todos nos hacemos mayores eh, que Diego nos cuenta la historia de los bares se su pueblo, unos bares que a día de hoy han desaparecido y ahora solo queda uno y con otro nombre, los de ahora son “de esos con luces de neón lilas y nombre exóticos tipo “Caipiriña” con un señor en la puerta con traje que te deja o no entrar. No he entrado a ninguno de ellos, pero me imagino que la música que suena dentro es bastante irrelevante”, igual que antes cuando te metías en garitos y sonaba Extremoduro “Hasta que amaneciera”
Funambulista
En esto, los títulos de canciones seguían saliendo del publico y la respuesta desde el escenario era “si, si, si, si a todo”. Y fue si, cayeron unos cuantos temas fuera de set, “Como un idiota” en su versión gamberra, por ejemplo. La traca final, la mascletá, llego en los bises, primero con la sorpresa de la tarde/noche, todo seguía según el guion hasta que la terminar la primera estrofa de “Ya verás” la voz que comenzó a sonar era la de Andrés Suarez, fue la locura, de interpretación, de cariño entre los que estaban en el escenario y de emoción abajo.
Pero claro, había que cerrar aquello por todo lo alto y fue con la preciosa “Solo Luz” con la que Diego abandono el escenario para desde el publico y con el micro a la distancia que le daba su brazo caído a los lados de su cuerpo dejo boquiabiertos y con la piel de gallina al respetable, se llevó la ovación de la noche en la que ni tan siquiera recogieron su porción de pastel el resto de la banda que dejo a Diego solo al borde del escenario. Pero de allí no se sale “llorando” así que el tiempo que quedaba era para saltar y disfrutar, “Me gusta la vida”, “Quiero que vuelvas” y para casa todo el mundo.