Segundo fin de semana del mes de abril y le iba a comenzar con una cita que tenía apuntada en mi calendario desde que me enteré de que ésta iba a tener lugar y era la vuelta, a la Asociación Cultural Octubre de Sierrapando, de la ya mítica banda vasca Zea Mays, que regresaba a dicho lugar menos de dos años después de su anterior visita y con la resaca todavía de la victoria en la final de la copa de su y mi querido Athletic Club.

Así que, sin mucho que pensar y nada más acabar mi jornada laboral, regresaba a la nave en donde tiene su sede dicha asociación, a donde retornaba apenas dos meses después de mi anterior visita, con la esperanza de que la entrada fuera bastante mejor que en la anterior visita del cuarteto, pero con la certeza de que iba a disfrutar con esta banda, que ya hace este año 27 de trayectoria.

Recordemos que el  grupo está integrado, como desde sus inicios, por Aiora Rentaría, voz y sintetizadores, Iñaki Imaz “Piti”, guitarra, Rubén González, bajo, y Asier Basabe, batería, habiendo editado, hasta el momento, los discos “Zea Mays”, de 1998, “Elektrizitatea”, del 2000, “Harrobian”, del 2002, “Sortuz, grabitatearen aurka”, del 2005, “Morphina", del 2007, “Era” , del 2010, “Da”, del 2013", “Harro”, del 2016, “20 urte”, del 2017, “Atera”, del 2019, y su última obra, “Adore kemena kuraia”, del 2022.

La verdad es que tampoco esta vez fue mucha gente y, según me comentaron desde la asociación, fuimos medio centenar los que nos dejamos caer por allí, algo realmente sorprendente para una banda del nivel de la que íbamos a tener delante, que en su tierra llena allá por donde toca, pero que, quizás los prejuicios de ciertas personas, que rechazan idiomas como el euskera, les hayan impedido profundizar en la música de esta formación; ellos se lo perdieron.

Estuve charlando con algunos de los allí presentes y lo curioso es que había más presencia de gente de fuera de Cantabria que de la tierruca, incluida gente que había venido desde Aguilar de Campoo, demorándose el inicio de la velada en apenas 10 minutos, antes de que subiese la banda, tras una intro, y comenzase el concierto con el mismo tema con el que arranca su última obra, es decir, con “Adore”, no sin antes saludarnos y presentarse, un muy buen corte, muy intenso y pegadizo, que tiene ese momento en que se relaja, para luego coger más fuerza. 

No dejaron ese mismo disco y continuaron con el tema que le da nombre, “Adore, kemena, kuraia”, un corte muy intenso y que fue cantado con mucha energía por su vocalista, con el que acabaron de enganchar a la gente y es que, aunque éramos pocos, estábamos muy entregados, para pasar a recordar su anterior obra con “Haizearen jainko beltza”, una pieza que se inició de manera calmada, pero que luego cogió mucha fuerza y potencia, sonando contundente y es que es un verdadero cañonazo.

Sin dejar su anterior disco, era el momento de “Ilara hilobi”, un tema que empezó con ese sonido machacón, dejándonos con un corte muy potente y pegadizo, que contó con un sonido constante, pero con mucha calidad y con Piti acercándose a la parte delantera del escenario, mientras los sintetizadores también tenían su protagonismo, para regresar a su último trabajo con “Zuk borroka hasi”, una canción que empezó calmada, pero que enseguida fue cogiendo fuerza y potencia, mostrándonos una pieza con mucha intensidad y contundencia y que acabó parándose en seco.

Continuaban el repaso a su último lanzamiento con “Kuraia”, un tema que empezó con ese sonido de sintetizadores y de manera calmada, pero que luego tuvo partes más intensas, cogiendo mucha más potencia en la segunda mitad y que fue cantado con mucho sentimiento por parte de Aiora, para viajar a los orígenes de la banda con la canción que daba nombre a su segundo disco, “Elektrizitatea”, una grandísima pieza, que empezó tranquila y relajada, cogiendo progresivamente más velocidad y fuerza, dejándonos un verdadero himno y con el bajo muy presente.

Vuelta a su actual obra con ese temazo que es “Kemena”, el cual Aiora comenzó a cantar a capela y que fue muy bien recibido, cogiendo, después, mucha fuerza y contundencia, siendo un corte intenso, potente y con el bajo teniendo bastante protagonismo, para pasar a un clásico como es “Corazón de tango”, de Doctor Deseo, pero que ellos han recogido en su presente trabajo, una pieza muy cantada y muy ligada a lo que se había vivido esta semana con el Athletic, la cual a mí me emocionó e hizo que se me cayera alguna lagrimilla.

Sin casi parar, llegaba “Kea”, de su trabajo de hace 5 años, con un inicio muy intenso y que fue un tema muy coreado y pegadizo, dejándonos con un corte muy animado, contundente y quedón, y en el que nos hicieron cantar un trozo del estribillo, para viajar al 2013, año en el que publicaron ese disco en el que estaba recogido “Bi bihotz, bi ero”, la cual empezó con esos coros iniciales, siendo una pieza muy movida, animada y con un ritmo y un estribillo quedón, en donde recogieron un trozo del “Don't you want me”, de The Human League, que hizo que la fiesta fuese todavía mayor.

Sin dejar ese trabajo de hace 11 años, era el turno de “Oihu”, un tema que empezó calmado y con un sonido relajado, pero que fue cogiendo más fuerza poco a poco, sobre todo con la voz, volviéndose un gran corte, alternando diferentes intensidades, pero con energía y ese aire machacón que posee, para continuar con “Enbata”, la canción que abría su disco del 2016, que fue iniciada por Aiora, ofreciéndonos una pieza relajada en su comienzo, pero que luego fue tomando más fuerza, contando con un ritmo movido y dejándonos una composición muy animada.

Un poco más atrás en el tiempo nos llevaron, concretamente hasta el año 2010, fecha en la que publicaron su sexto trabajo, en donde estaba recogido “Negua joan da ta”, un tema que empezó calmado y con toda la gente cantando a capela, volviéndose luego un corte muy movido y bailable, ofreciéndonos una composición con un aire muy festivo y que me gustó mucho, para pasar a despedirse y reafirmarse en sus ganas de volver a este espacio, siendo el turno para “Besterik ez naik”, de su disco del 2005, una canción que se inició con mucha fuerza, un verdadero clásico del cuarteto, que sonó muy intenso y pegadizo y que fue muy cantado.  

Y aunque la banda dejó el escenario, nadie se quería ir y la gente empezó a pedir su vuelta, regresando la misma para tocar “Gaur”, el tema que abría su plástico de hace 11 años, el cual empezó con un ritmo machacón, dejándonos con un corte bailable y movido, al mismo tiempo que quedón y pegadizo, siendo unido con “Hondarretik ondarroara”, de su quinto disco, una canción que tuvo ese comienzo intenso y movido, para luego coger mucha fuerza y tener un sonido bailable, además de un bajo muy presente.

Y llegaba el momento de la despedida definitiva, como la propia banda anunció desde las tablas, y esta iba a ser con “Kukutza III”, de su obra de hace 14 años, no sin antes agradecernos nuestra presencia y mostrarse encantados por nuestra acogida, siendo un tema que cuenta con un sonido pegadizo y movido, además de con un muy intenso estribillo, dejándonos un corte muy bailable y con esa parte en la que canta Asier, acabando Aiora ayudándole a tocar la batería.

De esta manera y después de algo más de una hora y media de actuación, se marchaban, entre muchos aplausos, la gente de Zea Mays, después de brindarnos una verdadera maravilla de concierto, con una banda que sonó espectacular y que demostraron porque son tan grandes, no achicándose ante la escasa presencia de público, gracias a su gran profesionalidad, y entregándose como si estuviesen tocando ante mucha más audiencia.
 
Nos presentaron un repertorio en el que han sabido equilibrar temas de sus dos últimos discos, que son muy buenos, por cierto, con algunos de sus clásicos, haciendo que la velada fuese muy dinámica y mostrando, en todo momento, la gran calidad musical de estos cortes y de los músicos que los ejecutan, con un Aiora que, no solo nos deleitó, de nuevo, con su gran voz, sino que, además, nos demostró el gran carisma que tiene sobre el escenario.

Un verdadero lujo ver a una banda de esta envergadura en un espacio como este y es que Zea Mays es un grupazo como la copa de un pino, que os aconsejo veáis en directo, si no lo habéis hecho ya; yo, si vuelven por la tierruca, desde luego que repito.

zea-mays.com/es
www.facebook.com/ZeaMays97
zeamays.bandcamp.com
www.youtube.com/@ZeaMaysOfficial
www.instagram.com/zeamaysrock

Tras comentar con algún de los presentes el bolazo que acabábamos de ver y con el último vinilo de los bizcaínos debajo del brazo, me fui de ese reducto de la cultura alternativa en Torrelavega que es la Asociación Cultural Octubre, con la satisfacción de haber disfrutado con la actuación de los Zea Mays, aunque contrariado porque no hubiera acudido mucha gente; si no estuviste allí, te perdiste un gran concierto, porque los que fuimos nos lo pasamos en grande. Animar y agradecer a dicha asociación su labor y a Zea Mays su profesionalidad y entrega sobra las tablas. Así da gusto.