Después de haber estado en el Escenario Santander el día anterior, disfrutando de las actuaciones de Eh, Mertxe y Marky Ramone´s Blitzkrieg, regresaba al mismo lugar y es que, en esa noche de sábado, íbamos a tener delante de nosotros a los navarros Koma, que venían presentando su nuevo disco, “Una ligera mejoría antes de la muerte”, el primero en 13 años con temas de nueva creación.
Pese a que, una vez más, se solapaban diferentes eventos, tenía muy claro que quería volver a ver a dicho cuarteto, a los cuales no disfrutaba en vivo desde la última edición, digamos normal, del Rebujas Rock, de San Mateo de Buelna, en el 2019, por lo que había muchas ganas de ver a una formación, que en directo nunca falla.
Al acceder al recinto se podía ver un gran ambiente, con buena parte de los habituales a los conciertos del rock y del metal de la tierruca allí presentes, pero también con buena presencia de gente de otras regiones y es que apenas llevaban unas semanas de gira y el hambre por verlos en vivo era mucho, por lo que fueron muchos los seguidores que no dudaron en acercarse por el local santanderino.
Para aquellos que no conozcan a esta banda, ésta se crea en 1995 y tiene una primera etapa que dura hasta el 2012, fecha en que sus componentes se adentran en otros proyectos, para regresar en el 2018 y hasta la actualidad, estando, en todo momento, el grupo compuesto por Brigi Duque, voz y guitarra, Natxo Zabala, guitarra y coros, Rafael Redín, bajo y coros, y Juan Karlos Aizpún, batería.
Koma
Lógicamente, la actividad discográfica de la banda ha sido extensa, ya desde su maqueta de 1995, de la que los medios de la época, recuerdo, que hablaban muy bien, siguiendo con sus discos “Koma”, de 1996, “El infarto”, de 1997, “El catador de vinagre”, de 1999, “Criminal”, del 2000, “Sinónimo de ofender”, del 2004, “Sakeo”, del 2007 y por cuya edición en esta web se les entrevistó en un par de ocasiones, y , “La maldición divina", del 2011 y con el que les volvimos a entrevistar, y su nuevo trabajo “Una ligera mejoría antes de la muerte”, de este mismo año, además del directo “Molestando a los vecinos”, del 2001, y esa revisión de sus temas clásicos en el recopilatorio “La fiera nunca duerme”, del 2018, que sirvió como carta de presentación para la vuelta de la formación y donde volvimos charlar con ellos.
Aunque no es ninguna novedad, no hay que dejar de recordar que los conciertos en el Escenario Santander siempre son puntuales, subiendo la banda con la música de “Barrio Sésamo” de fondo, la cual fue coreada por muchos de los presentes y es que, nos guste o no, esa serie infantil forma parte de la banda sonora de los que nacimos en los 70, comenzando, propiamente la velada, con el mismo tema que abre su actual trabajo, “Dinamítalos”, un corte que se inició de manera guitarrera, contando con un sonido machacón y contundente y que contó con un buen solo de guitarra.
Con la gente todavía entrando en calor, continuaron en el mismo disco, manteniendo el orden en el que en él aparecen, por lo que tocaba “El viaje”, un tema que empezó con mucha fuerza, para luego ir relajándose, siendo un corte que posee un sonido muy rockero y que resultó muy movido y pegadizo, con Natxo luciéndose, para seguir con su compañera de obra “La máquina del tiempo”, que tuvo un comienzo muy intenso y con Brigi situándose en primer plano, una canción que, primero fue muy machacona y luego más animada y quedona, pero siempre sonando contundente y muy poderosa.
Brigi se dirigió a nosotros con ese “a gusto”, tan habitual de su compadre El Drogas, para comenzar a recordar temas más conocidos, como era el caso del siempre celebrado “Tío Sam”, con el que se abría su ópera prima, un corte que empezó con un sonido machacón y con Rafa cantando las primeras estrofas, dejándonos una composición muy pegadiza y potente y en la que tuvieron que cambiarle la guitarra a Brigi sobre la marcha, para continuar con “Vaya carrera que llevas chaval”, de su tercer trabajo, una canción con mucha fuerza, muy pegadiza y con Rafa, de nuevo, cantando en buena parte de la misma, ofreciéndonos una pieza muy quedona, con un gran solo de Natxo, que, además, luego también canta un fragmento de la misma.
Koma
Turno ahora para regresar a este disco que venían a presentarnos, con un tema breve y directo como es “Falso”, un corte que sonó poderoso y con mucha energía, el cual fue muy celebrado por la concurrencia, que estaba acogiendo muy bien estas nuevas composiciones, siendo seguida por “El duelo”, su compañera de trabajo, que se inició de manera más lenta y machacona, antes de volverse una pieza muy poderosa y pegadiza, que luego se relajó brevemente, aunque después se volvió a acelerar y recuperó esa energía previa.
Nos agradecieron nuestra presencia, mostrándose a gusto de estar allí y nos recordaron que venían presentando nuevas composiciones, pero que no iban a olvidar lo vetusto, para viajar hasta su tercer álbum con el corte que lo abría, “Sé dónde vives”, con ese inicio lento y pesado, siendo un tema muy pegadizo, coreado y machacón, que cogió más velocidad en la parte final, para retroceder hasta su ópera prima con “Caer”, una pieza que empezó con fuerza y potencia, que tuvo un marcado bajo, para dejarnos una canción muy quedona y machacona, la cual fue muy cantada.
Brigi recordó a su compadre El Drogas cuando se mostró, una vez más, a gusto con lo que se estaba allí viviendo, para volver a su anterior disco, aquel del 2011, con ese “Me vacío”, que se inició con ese ritmo reggae, para luego meter bien de caña, con Natxo dándolo todo, recuperando ese ritmo reggae por momentos y que contó con un potente estribillo, siendo un tema muy pegadizo y coreado, para el que el vocalista nos pidió nuestra ayuda, antes de continuar con “El Muro de Berlín”, de ese trabajo que sacaron hace 20 años, una canción que fue iniciada con Natxo a la voz y que posee ese ritmo de tango, para volverse luego una pieza potente y cañera, además de movida y bailable, mostrándonos una composición machacona y que concluyeron con ese vacilón “salud, dinero y amor” final.
Era el momento de retornar a su último disco con ese verdadero himno que es “Los desheredaos”, un tema que comenzó de manera muy cañera y poderosa, siendo un corte muy animado y festivo y que contó con una buena alternancia de solos de guitarra, relajándose levemente, antes de ese explosivo final, para continuar, en ese álbum que venían a presentar, con “El exterminador”, una canción que empezó con fuerza, contando con una batería potente y un sonido quedón, dejándonos con una muy buena y pegadiza pieza, además de muy animada y coreable.
Koma
Pero, como ya nos habían dicho, no se iban a olvidar de esos temas más clásicos, como “El pobre”, de su ópera prima, que fue iniciado por Brigi, un corte muy rápido y potente, dando mucha caña y mostrándonos la intensidad de esta composición, que fue muy coreada, y en donde Brigi se lució a la guitarra, contando con ese festivo final y ese grito de “vamos a quemar el opus dei”, para continuar con “Imagínatelos cagando”, de su quinto disco, para el que sus dos guitarras se acercaron a las primeras filas, una gran canción, muy coreada, machacona y potente y que hizo las delicias de todos los presentes.
Natxo tuvo que improvisar un poco con la guitarra, para hacer más ameno un cambio que tuvieron que hacer en la batería de Juan Karlos, para, una vez solucionado, continuar con “La almohada cervical”, ese temazo recogido en su anterior disco de estudio, un corte que empezó a toda velocidad, muy machacón e intenso, con ese estribillo tan quedón y pegadizo, dejándonos un tema muy cañero y potente y que contó con esa parte más musical, para preguntarnos quien llama a la puerta y es que llegaba “El marqués de Txorrapelada”, la canción que abría su segundo trabajo, muy conocida y que, por ello, fue muy coreada por todos los presentes, con ese ritmo pegadizo y animado que posee.
Sin pausa, continuaban con “El sonajero”, de su disco del 2007, un tema muy festivo y machacón, alternando partes más calmadas con otra más cañeras, incluyendo el conocido “azúcar”, de Celia Cruz, en ese estribillo tan pegadizo, siendo un corte muy bailable en muchas partes y con el que se despidieron, momentáneamente, agradeciéndonos nuestra presencia y mostrándose encantados con nuestra acogida.
Tras marcharse del escenario, la gente enseguida empezó a pedir su vuelta, la cual tuvo lugar pocos minutos después, comenzando los bises con “Palabras mágicas”, un tema de su reciente lanzamiento, que arrancó de manera relajada y con ese aire tranquilo, siendo una bello corte, con un sonido muy logrado y que calmó un poco la velada, pero, también mostró la parte más emocional de la formación, contando con un buen solo final de Brigi, siendo unido, por la batería de Juan Karlos, como en ese mismo disco, con “Saltos mortales”, una pieza que comenzó con un sonido juguetón de guitarra, antes de que, después, la canción cogiese más fuerza y potencia, quedando muy pegadiza y animada.
Viajamos hasta el 2007, cuando editaron su disco “Sakeo”, interpretando el corte que le daba nombre, el cual fue muy celebrado, siendo un tema muy pegadizo y aclamado, en el que Brigi tuvo algún problemillas con su guitarra, que fue, rápidamente, solventado sobre la marcha, dejándonos una composición muy intensa y machacona, con un gran solo de Natxo y en la que interactuaron con nosotros en su estribillo, para ser Brigi, a capela, el que comenzará la mitica “Aquí huele como que han fumao”, de su primer trabajo y con el que muchos los conocimos, una canción muy cantada y celebrada, con todo el mundo saltando y con la banda interactuando con la gente, en uno de los momentos más esperados de la noche.
Koma
La recta final de su actuación estaba llegando y era el turno de “Bienvenidos a Degüelto”, el corte que cerraba su tercer disco, que fue tocado a toda velocidad, un tema muy festivo y celebrado, con Brigi acercándose al público y con ese sonido de dibujos animados que tiene, relajándose levemente, para luego meter más caña, despidiéndose con la conocida frase de Porky de “eso es todo amigos” por parte de su vocalista, que se mostró encantado de estar allí.
Y, aunque se fueron, la concurrencia volvió a reclamar su vuelta y el grupo iba a regresar, poco después, con una música muy ceremonial, para interpretar la esperada “Mi jefe”, de su segundo disco, una canción que fue muy aclamada y con la gente dándolo todo, y es que estamos ante una pieza clásica, que no puede faltar en su repertorio y con la que pusieron, ahora sí, el punto y final a su velada, tras casi dos horas sobre las tablas.
Koma dieron esta noche, y como nos tienen acostumbrados, un grandísimo concierto, y es que la banda sonó genial y nos deleitó, clásico tras clásico, además de tocar una buena cantidad de canciones de su último trabajo, que repasaron ampliamente, pero es que no desmerece, en nada, con sus temas más antiguos, sonando todos de manera potente y compacta y demostrando que, en vivo, son una verdadera apisonadora.
La sección rítmica de la banda es demoledora, pero es que las guitarras suenan muy bien y la voz y personalidad de Brigi están fuera de toda discusión, aunque, por encima de todo, están las canciones, haciéndonos recordar, con las más antiguas, experiencias vividas, y, con las más recientes, que este grupo está vivo y que tiene mucho y muy bueno que ofrecer, ya que su último trabajo contiene verdaderos temazos.
Sin duda, esta de Koma, es una de las giras del año y esta noche pudimos disfrutar de ella, viviendo un gran directo de los de Burlada, que nos dejaron maravillados; no te los pierdas por nada del mundo, en cuanto puedas verlos.
Con el último Cd de los protagonistas de la noche debajo del brazo y tras despedirme de alguno de los presentes, me fui del Escenario Santander, tras haber vivido un gran concierto, a cargo de Koma, en un muy buen ambiente y con mucha afluencia de gente, lo cual siempre es buena señal para que la nueva dirección de esta sala siga, como hasta ahora, apostando por el rock y el metal en todas sus variantes; por más veladas como ésta.