Empezábamos el mes de julio y con él el mes por excelencia en la capital de Cantabria, en el que la ciudad se llena de turistas y si a eso sumamos un partido de la selección española, que había ganado a Alemania en la Eurocopa, y una noche bastante calurosa, parecía que, donde menos apetecía estar, era dentro de una sala para ver un concierto, pero algunos tenemos la música en directo como hobby o droga ya sea invierno o verano.
Y es que, este viernes, iban a visitar Santander los chicos de Midnite Motel, un cuarteto de Terrassa, que se funda en el año 2021 por Carlos Ferrer, voz, Ladri H, guitarra y coros, Jaume Roig, bajo y coros, y Sergi Gaitán, batería, todos ellos músicos con amplia experiencia y que ya han publicado su primer y gran disco, “Gimme Some…”, el pasado año, el cual es una buena muestra de su música.
Después de escuchar algo de la banda, me decidí a poner rumbo a la Sala Niagara de Santander, a donde ya hacia 4 meses que no acudía, dispuesto, como en aquella ocasión, a vivir una gran noche de Hard Rock con esta formación, pero, a diferencia del anterior evento en este local, aquí la afluencia de público fue muy escasa.
Siempre que me acercó a esta sala lo suelo hacer con antelación y, generalmente, la afluencia de gente no es mucha hasta pasado el horario de comienzo del evento, pero es que esta vez el número de presentes se podía casi contar con los dedos de la mano, lo que, desde luego, es algo desalentador, tanto para la banda, como para los asistentes, pero el grupo subió, pasados veinte minutos de la hora fijada, con toda la intención del mundo de darlo todo y hacérnoslo pasar muy bien.
Comenzaron su andadura con una intro, que fue tocada por su guitarrista con fuerza y demostrando ya sus cualidades, para iniciar, propiamente su velada, con “I don't mind”, ya con su cantante sobre el escenario, el mismo tema que también abre su disco, un corte muy movido y pegadizo, el cual contó con un sonido juguetón y que fue unido con “Wasted time”, también recogida en su única obra, una pieza que empezó con un sonido de guitarra muy quedón, dejándonos una canción muy pegadiza y animada, en la que disfrutamos de un gran solo de guitarra.
Midnite Motel
Nos saludaron y desearon que, aunque fuésemos pocos, aquello fuera una fiesta, dando paso a “Let your love light”, un corte que no aparecía en el mencionado disco, el cual empezó de manera relajada, pero que luego cogió más fuerza, siendo un tema intenso, pegadizo y con unos buenos coros, para volver a su lanzamiento con “Easy money”, una pieza que comenzó con un sonido muy quedón y eléctrico, de esos que se te quedan rápidamente, dejándonos con una canción muy pegadiza y coreable.
Pasaron a recordarnos que tenían un puesto de merchán, con diferente material de la banda, para quien quisiera adquirirlo, siendo el momento de tocar otro tema no editado, llamado “You made a fool out of me”, que fue comenzado con el sonido del bajo, volviéndose un corte potente, con un sonido quedón y constante, para agradecernos nuestra presencia, afirmándonos que, pese a estar en familia, lo íbamos a pasar bien, continuando con otra pieza no recogida en ese disco, “Motel Angel”, la cual se inició de manera relajada y calmada, pero que fue cogiendo algo más de fuerza en el estribillo y que contó con otro buen solo de guitarra.
Precisamente, un buen solo de guitarra, fue lo que nos dio paso a la primera versión de la noche, la del “Tush”, de los ZZ Top, un tema mítico y muy movido que, lógicamente, fue muy celebrado y disfrutado, antes de volver a las composiciones propias con “Black haired lady (With a big white dog)”, la que cierra su trabajo, que arrancó con el sonido del bajo de manera tranquila, aunque luego fue cogiendo mucha fuerza, contando con un machacón estribillo, antes del cual la pieza se relajaba, para luego volver a coger velocidad.
Se presentación y nos volvieron a recordar que tenían puesto de merchán, para continuar el repaso por su único disco con “Corner of my eye”, avisándonos de que, como el concierto estaba yendo muy rápido, era un buen momento para bajar revoluciones, siendo un tema, que empezó relajado, pero que se intensificó, alternando ese sonido pausado, con la intensidad del estribillo y con un gran solo de guitarra, siguiendo, en ese trabajo, con “Far away”, una pieza con mucha fuerza y potencia, que resultó muy movida y quedona y que contó con un ritmo contagioso.
Midnite Motel
Llegaba el momento del primer tema que hicieron, tal y como ellos mismos nos indicaron, “Someday, Somewhere”, también incluido en su único trabajo, un corte con un sonido machacón y contagioso, además de contar con un pegadizo estribillo, relajándose, antes de un gran solo de guitarra y recuperando luego dicho estribillo, pasando a avisarnos de que estaban llegando ya casi al final, agradeciéndonos que viniésemos a apostar por una banda nueva y recordándonos la enorme distancia que habían tenido que recorrer, siendo el momento de “Drive me up the wall”, una pieza que comenzó con mucha fuerza, muy quedona y con ese punto en que se relaja y juguetean cantante y guitarra, bajando Ladri a tocar entre el público, tocando unos solos clásicos y luego buscando y logrando nuestra interacción desde el escenario.
Nos anunciaron que, oficialmente, llegaba el último tema, siendo precedido por un solo de batería, bueno y rápido, el cual fue unido con su versión del “Come together”, de The Beatles, la cual comenzaron de manera lenta, pero que fue cogiendo fuerza e intensidad, dejándonos con este corte clásico, que sonó de manera machacona.
Pero todavía iba a haber tiempo para un par de temas más, siendo el primero en sonar el que restaba de su único disco, “Love you to death”, que comenzó con ese sonido tan quedón, mostrándonos un tema muy pegadizo y movido, que sirvió como presentación de los músicos que integran la banda, animándonos a corear con ellos, tras el cual agradecieron a la sala su atención y a los presentes nuestra asistencia, alentándonos a contárselo a nuestros amigos, para concluir con su versión del “Rock and roll damnation”, de los AC/DC, una mitica pieza, que fue muy coreada y muy bien tocada, con el baile a los Angus incluido.
Midnite Motel
De esta manera y después de casi hora y cuarto sobre las tablas, concluía este muy buen concierto de Midnite Motel, una banda que, pese al escaso público, lo dio todo sobre el escenario, demostrando, no solo la grandeza de sus canciones, sino su profesionalidad, no dejándose amilanar por los pocos asistentes y tocando con muchas ganas, trasmitiendo ese entusiasmo por su música a los allí congregados.
Musicalmente, son una banda con un sonido realmente espectacular, algo que ya había podido constatar escuchando su único disco, pero que, en directo, todavía se magnifica más, ya que es allí en donde sus músicos demuestran sus enormes cualidades, además de lograr conectar con los que están disfrutando con su actuación, haciendo que, todos los allí congregados, saliésemos con la sensación de haber vivido una velada especial.
Sin duda, una banda a seguir, estos Midnite Motel, algo a lo que os aconsejo y, sobre todo, a verlos en directo, que es en donde está la esencia de esta formación.
De esta manera y con el disco de la banda debajo del brazo, me fui de la Sala Niagara de Santander, con la alegría de haber disfrutado de un gran concierto, este de Midnite Motel, pero con el sabor amargo de que hubiéramos sido tan pocos los que allí lo vivimos, aunque, como se suele decir, será cuestión de sembrar para recoger y que en la próxima visita seamos muchos más los que gocemos con esta propuesta de buen Hard Rock que los catalanes nos ofrecen.