Nuestros hermanos de Noche de Rock cumplen este 2024 sus 28 año activos, contra viento y marea, y haciendo una gran labor por la música, tanto local como estatal e internacional, y, para no perder la costumbre, lo iban a celebrar con una fiesta aniversario, que iba a ser la guinda a un año lleno de actividades y es que no se les puede negar la gran capacidad que tienen en crear y apoyar infinidad de eventos.
Este viernes, víspera de festivo en todo el estado, nos iban a traer las actuaciones de 4 grupos de gran nivel, como eran los cántabros Soulbane, los alicantinos Mind Driller, los británicos Los Pepes y los canadienses Danko Jones, casi nada, y la cita iba a ser en el Escenario Santander, a donde iba a regresar 3 semanas después de mi anterior visita.
Y es que, si habitualmente acudo a las fiestas aniversario de Noche de Rock, algo que también hice el pasado 2023, este año con más motivo, ya que el cartel no tenía desperdicio por ningún lado, con la posibilidad de ver a bandas que difícilmente pasan por nuestra tierruca.
Ambiente
Por tanto, se esperaba una buena entrada, pero lo cierto es que, cuando pude llegar a este local santanderino, no había la gente que tan interesante cartel debería haber reunido, aunque, con todo, había una afluencia más que decente, arribando nada más terminar el concierto de unos Soulbane, que habían sido los encargados de abrir la velada, pero es que un viernes a las horas que ellos empezaron, yo todavía estaba trabajando.
A este cuarteto, compuesto por Iván Valle, voz, Juanma Pinto, guitarra y coros, Carlos Gutiérrez, bajo, y Julio Salces, batería, y que tienen editados los discos “The amazing acrobat blindman”, del 2011, “Psycho radio”, del 2018, y “Freedom (FFR), Pt 1”, de este mismo año, los había visto por última vez hacía dos meses en Torrelavega y son de lo mejorcito que tenemos en la tierruca.
Por lo que me comentaron, esta formación, con 14 años de actividad, dio un gran concierto, tras solventar unos problemas técnicos iniciales y es que estamos ante una banda que siguen creciendo día a día, demostrando que son unos grandes músicos y que saben componer grandes canciones y como buena muestra sus últimos lanzamientos, que no hacen nada más que sorprendernos gratamente.
Seguro que dentro de poco puedo resarcirme de no poder haberlos visto.
Llegaba el turno de Mind Driller, ese grupo que se crea en el año 2011 y que está compuesto por V Stone, voz, Daniel N.Q, voz, Estefanía Aledo, voz, Javix, guitarra y programación, Pharaoh, bajo, y Reimon, batería, y que, hasta el momento, tienen editados los discos “Red industrial” del 2012 y con el que los entrevistamos, “Zirkus", del 2015, “Involution", del 2019, y su último y gran trabajo “The void”, de este 2024, sin olvidar su Ep “InBolution”, del 2021.
Curiosamente, la última vez que vi a la banda en directo fue en otro concierto organizado por Noche de Rock, concretamente en la edición 2019 del Asubiadero Fest y es que la conexión entre la formación y el mencionado programa radiofónico es total, subiéndose al escenario con una intro de fondo e iluminándonos con unos focos, para dar inicio, propiamente a su actuación con “Game over”, el tema que da cierra a su presente disco, un corte con mucha fuerza y contundencia, que sonó muy potente y que tuvo un ritmo machacón, mientras el grupo nos iba incitando a movernos.
Tras saludarnos y presentarse, nos recordaron que era una noche muy especial por el aniversario de Noche de Rock y porque estaban presentando nuevo disco, siendo el turno del corte que da inicio al mismo, “Armour”, con nuevas máscaras, como harían durante toda la velada, un tema que empezaron de manera contundente, para luego tener fuerza y un sonido potente, contando con partes en las que susurran, para contrastar con la intensidad posterior, tras el que nos comentaron que lo podíamos hacer mejor, antes de continuar con “Psycho”, de su segundo trabajo, una canción muy poderosa e intensa, a la vez que pegadiza y con los músicos interactuando entre ellos, algo que harían con frecuencia.
Mind Driller
De vuelta a su último disco, era el turno de “Insanity”, antes del cual nos preguntaron que si teníamos energía, con afirmativa respuesta de la concurrencia comenzando dicho corte con mucha fuerza y un ritmo quedón, dejándonos un tema muy movido y pegadizo, de esos que no puedes dejar de moverte con su sonido, pero contando también con partes machaconas, para continuar en dicha obra con “Happy hunting”, que fue dedicada a todos los que se ven con poder para someternos, una pieza que empezó lenta y constante, pero que luego tuvo esa parte más intensa, un estribillo pegadizo y ese instante en que, desde el escenario, simulan el sometimiento que sufrimos todos los días.
Turno para recordar su anterior trabajo, en el que se recogía “M4n1k1”, y es que quieren que seamos como unos maniquís, para el que sacaron un púlpito y el bajo de Pharaoh apareció iluminando, como lo haría en más ocasiones durante la velada, un tema que empezó con fuerza y potencia y que tuvo una parte en castellano, simulando que echaban al predicador del púlpito y teniendo un intenso final, tras el que nos preguntaron cuántos les conocíamos, con unos cuantos brazos levantados, para continuar con “End of the world”, de su actual disco, y el último video que habían sacado hasta ese momento, una pieza que tuvo un comienzo bailable y que fue muy coreada y movida, logrando que la gente reaccionase más.
Mind Driller
Se tomaron un brevísimo respiro antes de adentrarse en “The last drop”, de su disco de hace 5 años, un tema que empezó con mucha fuerza y potencia, utilizando diferente máscaras y que luego fue relajándose muy brevemente con la voz de Estefanía, dejándonos un corte muy contundente y quedón, continuando en el mismo trabajo con “Calling at the Stars”, que nos dijeron que era una pieza para que toda la sala saltase, como ha hecho el resto de sitios donde la han tocado, la cual tuvo un inicio muy machacón y movido, dejándonos con una canción constante y muy poderosa.
Nos agradecieron el apoyarlos y que haya gente que apueste por la música en vivo, siendo el turno de un asunto de actualidad como es el de la inteligencia artificial, que ellos tratan en “A. I.”, un tema de su más reciente trabajo, el cual empezó relajado, pero que luego se volvió más intenso, interactuando, una vez más, entre ellos, tras el que nos preguntaron si teníamos ganas de más, con la positiva respuesta de la concurrencia, antes de regresar a su anterior disco para tocar “Rotten”, que fue anunciada como el momento del pogo, una pieza muy potente y cañera, en cuyo estribillo Pharaoh y V Stone bajaron a tocar delante de las primeras filas.
Se despidieron, agradeciendo a Oskar, de Noche de Rock, por el aniversario, así como a las bandas con las que compartían el cartel y a los técnicos su labor, animándonos a apoyar a la música en vivo, dejándonos con “The fallout”, de su último álbum, un tema que empezó calmado, pero que luego tuvo un sonido duro y contundente, relajándose y agachándose, para luego volverse un corte más machacón.
Mind Driller
Hicieron amago de irse, pero todavía había tiempo para una más y esta iba a ser “Ich bin anders!”, de su segundo disco, avisándonos de que ésta si era la última, agradeciéndonos nuestra acogida, invitándonos a vernos en su puesto de merchán y animándonos a movernos, con Daniel N.Q bajando a cantar delante de las primeras filas, dejándonos con una canción muy machacona y potente, a la vez que bailable.
De esta manera y después de estar sobre las tablas una hora, concluía un gran concierto de unos Mind Driller que demostraron que son una gran banda, la cual sonó genial y demostrando su calidad, con unas grandes canciones, que sonaron aplastantes, y una gran puesta en escena, que hace que no puedas dejar de mirar al escenario, sino quieres perderte algo, ya que no paran ni un segundo.
Sin duda el crecimiento de esta banda es muy grande y, partiendo de ese sonido que practican, han sabido ampliar su campo de visión, con muchos matices y mucha variedad, pero, sobre todo, con una extensa colección de temas de gran calidad y ejecutados por unos músicos que demuestran su gran nivel y esa buena conexión que parecen tener entre ellos, logrando, además, que los espectadores formemos parte de su espectáculo.
Mind Driller es una banda para disfrutar en estudio, pero, sobre todo, en directo; yo repito, sin dudar, en cuanto vuelvan.
Tras el consiguiente cambio de bártulos y con Oskar, de Noche de Rock, lanzando algunas palabras desde el escenario, llegaba el turno de Los Pepes, ese cuarteto británica, compuesta por Ben Perrier, voz y guitarra, Guilherme Rujao, guitarra y coros, Seisuke Nakagawa, bajo y coros, y Kris "Killer" Kowalski, batería y a los que había visto al principio de este mismo verano abriendo el Newcity Rock de Torrelavega.
En estos doce años que llevan de trayectoria han editado los discos “Los Pepes for everyone”, del 2014, aunque reeditado estés mismo año, “All over now”, del 2016, “Let's go!”, del 2017, “Positive negative”, del 2019, y “The happiness program”, del 2022, los Ep´s “No SOS”, del 2013, “Tonight”, del 2014, “And I know/Say goodbye”, del 2015, “Automatic/Here comes the darkness”, del 2019, y “Want you back/Never get it right”, del 2021, además de los splits “Los Pepes/Ladykillers”, del 2014, y “Together/Ain't Life Easy”, con Jibaros, del 2021, y su inicial “Demo”, del 2012.
Comenzaron su actuación con “Guilty pleasure”, de su primer disco, no sin antes saludarnos, un tema muy guitarrero y con unos muy buenos coros, que puso las bases sobre lo que nos iban a ofrecer, para continuar con “New christians”, una pieza que no tengo identificada, pero que sonó muy intensa, siendo unida al corte anterior, dejándonos con una canción muy rápida y animada.
Los Pepes
Otro tema que tampoco han editado, o al menos a mí no me consta, es el que aparecía titulado en su setlist como “Future history”, el cual tuvo un comienzo quedón y movido, ofreciéndonos un corte con momentos de mucha lucidez guitarrera, para ser unido con “Paradise”, una pieza que sonó con mucha fuerza y rapidez, demostrando lo veloces que pueden sonar sus canciones.
Llegaba el turno de “I want you back”, ese tema que aparece en su último disco, pero que también está en el Ep de igual nombre, un corte que tuvo un ritmo quedón y que sonó muy animado, para continuar con una nueva canción llamada “Sweet appeasement”, no sin antes hacer algunos ajustes en la guitarra de su vocalista, una pieza con un ritmo muy constante, a la vez que resultó ser muy pegadiza y movida.
A toda velocidad sonó el siguiente tema, “Molly coddle”, un corte muy intenso y que logró que la gente siguiese disfrutando con la actuación de los británicos, el cual fue unido con “Thoughtless boys”, que resultó ser una canción muy potente, a la vez que muy pegadiza y que nos hizo saltar.
Los Pepes
Era el momento de “Automatic”, el tema que daba nombre a su Ep de hace 5 años, el cual fue iniciado por el sonido del bajo, para luego coger mucha fuerza y volverse pegadizo, prologando el corte con el sonido de la guitarra y arengando a los presentes, para continuar con “The trap”, la pieza que abría su tercer larga duración, que sonó muy guitarrera y cañera, dejándonos con una canción muy rápida y potente.
Sin parar y unido a la anterior llegaba “Positive negative”, el tema que daba título a su anterior disco, el cual sonó contundente y muy rápido, siendo un corte con mucha intensidad y que fue prolongado para recibir el empuje del público, ganando, de nuevo, fuerza y rapidez, tras el que nos recordaron el concierto de Torrelavega, antes de continuar con “Foreign bodies”, una pieza muy guitarrera, pero que también resultó muy pegadiza.
Más relajado fue el inicio de “Above and beyond”, un tema que, de todas maneras, tuvo fuerza y que resultó ser un corte con un sonido quedón, para despedirse de todos nosotros con “Never get it right”, una canción de su último disco, pero que ya aparecía en el Ep del 2021, la cual sonó muy movida y animada, dejándonos con una pieza con ritmo y energía.
Los Pepes
De esta manera y después de estar sobre las tablas 40 minutos, concluía este concierto, muy intenso y enérgico, de Los Pepes, que sonaron muy bien y que lograron sorprender a quienes no los conocían, con una propuesta muy directa, pero a la vez variada, repleta de tema que hacen que muevas tu cabeza sin parar, y que, a los que ya los habíamos visto, nos refrendaron que son una banda para disfrutar en vivo.
Los Pepes eran la banda tapada para muchos que, hasta días atrás, apenas habían oído hablar de ellos, pero es que estamos ante una formación de punk rock británico en donde puedes notar muchas de sus influencias, sin que ello les haga perder su propia personalidad, logrando que sus actuaciones sean muy intensas y que, casi sin darte cuenta, acabes siendo arrastrado por su música.
Sin duda una banda que has de ver en directo en cuanto tengas la ocasión, porque quedarás encantado con su propuesta.
Y después de los cambios oportunos, llegaba el momento de la banda canadiense Danko Jones, un trío compuesto por Danko Jones, voz y guitarra, John Calabrese, bajista, y Rich Knox, batería, los cuales llevan en activo desde 1996, habiendo publicado los discos “Born a Lion”, del 2002, “We sweat blood, del 2003, “Sleep is the enemy”, del 2006, “Never too loud”, del 2008, “Below the belt”, del 2010, “Rock and roll is black and blue”, de 2012, “Fire music”, del 2015, “Wild cat”, del 2017, “A rock supreme”, del 2019, “Power trío”, del 2021, y el más reciente “Electric sounds”, del pasado 2023, eso sin contar Eps, singles, recopilaciones y demás.
Con una intro sonando de fondo, subió el grupo al escenario, comenzando su andadura con “Guess who's back”, el tema que también da inicio a su último disco, un corte muy movido y pegadizo, que fue muy coreado por una concurrencia entregada a la banda desde el primer segundo, para continuar con “Get high?”, del mismo trabajo, una canción que sonó muy animada y que engancha, dejándonos con una pieza muy quedona.
Danko Jones
Tras saludarnos, buscaron y lograron la complicidad de la gente, interactuando con los presentes, para continuar con “I'm in a band”, el tema que abría su disco de hace 5 años, el cual tuvo un ritmo muy movido, contando con un sonido constante y unas muy buenas guitarras, siendo unido con “I gotta rock”, la pieza que abría su octavo trabajo, editado en el 2017, una canción muy pegadiza y animada y que fue muy celebrada por la concurrencia.
Iban encadenando un tema con otro y la anterior fue seguida por “Lipstick city”, de su obra del 2019, que tuvo un sonido muy guitarrero, ofreciéndonos un corte muy pegadizo y coreable, para seguir, sin pausa alguna, con “First date”, una pieza recogida en su tercer disco, de hace 18 años, que tuvo un juguetón inicio, y que resultó ser una canción muy movida y cantada, la cual fue muy celebrada por los asistentes.
Mientras la gente coreaba el nombre en castellano de la banda y ésta se recreaba con ello, continuaron con “Code of the road”, el tema que abría su disco de hace 16 años, con un sonido constante y quedón, que no hizo movernos a su ritmo, con ese momento en que se relajaba, para recuperar la intensidad previa, siendo unido con “The twisting knife”, de su obra del 2016, una canción que fue tocada a toda velocidad, muy cantada y que tuvo un sonido intenso y potente, dejándonos con una pieza muy animada y con un muy buen sonido de guitarra.
Pero no querían dejar de lado ese disco que venían presentando, animándose a tocar “Good time”, un muy buen corte, muy movido y con fuerza, que contó con un sonido quedón y juguetón, haciéndonos cantar el estribillo a capela, tras el que brindo con nosotros y pidió un aplauso para Los Pepes, sus compañeros de gira, comenzando a tocar “You are my woman”, de su obra de hace 7 años, una pieza muy machacona, que no fue tocada de manera íntegra, sino que fue unida con “Flaunt it”, de su anterior trabajo, muy animada y movida y con la que nos hicieron vibrar más todavía.
Danko Jones
Sin parar, continuaron con “Full of regret”, de su plástico del 2010, un tema con un ritmo muy animado y movido, dejándonos con un corte muy eléctrico y pegadizo, en el que los presentes arropamos con nuestras palmas, para, sin pausa alguna, continuar con “Had enough”, de ese mismo álbum, una pieza que tuvo mucha fuerza inicial y que sonó contundente, con ese sonido de guitarra heavy y que contó con un momento en el que el bajo estuvo en primer plano.
Con la gente coreando el nombre del grupo, llegaba el momento de ese “Lovercall”, que estaba incluido en su ópera prima, un tema en el que el bajo tuvo mucho protagonismo y que sonó con mucha fuerza y energía, siendo unido, sin pausa alguna y por el sonido de la batería, con “My little RnR”, presente en su trabajo de hace 7 años, una pieza con mucha contundencia y muy guitarrera, dejándonos con una canción muy pegadiza y quedona, con la que se fueron del escenario brevemente.
Cuando regresaron, buscaron esa conexión con la gente, algo que hicieron durante toda la velada, aunque el bueno de Danko a veces parecía estar enfadado con todo el mundo, comenzando los bises con “The mango kid”, un tema que aparecía en una recopilación de canciones grabadas antes de su primer disco, llamada “I'm alive and on fire”, del 2001, dejándonos un corte con mucha fuerza y potencia, además de tener un sonido juguetón y contundente.
Danko Jones
Unido con el anterior llegaba “Invisible”, recogido en su trabajo de hace 18 años, un tema que sonó a toda velocidad, y que contó con un sonido de guitarra muy contundente y poderoso, para concluir, sin pausa alguna, con “Shake your city”, la pieza que cierra también su último disco, que sonó con muchos fuerza y potencia y que tuvo un ritmo pegadizo, dejándonos con una canción muy machacona y que es un verdadero himno, pese a ser tan reciente.
De esta manera y después de estar tocando durante unos 75 minutos, concluía este muy buen concierto de unos Danko Jones que ha demostrado que son una gran banda, muy intensa, con un sonido contundente y quedón al mismo tiempo, los cuales cuentan con un repertorio lleno de grandes temas, como los que esta noche tocaron y muchos otros más, algo que no hará nada más que crecer, ya que siguen creando grandes trabajos.
Y es que, precisamente, una de las grandezas de esta banda esa que, no solamente no viven de las rentas, sino que, además, apuestan claramente por las nuevas canciones, algo que es lógico cuando publicas grandes discos, como este último, todo ello asentado en una formación ya muy consolidada y sin variación desde hace 11 años, ya que solamente ha habido cambios en la batería desde su creación y es que son unos excelentes músicos.
Sin duda, Danko Jones son una de las mejores bandas de hard rock que hay en el mundo y esta noche lo confirmaron en el Escenario Santander.
Después de despedirme de algunos de los presentes y con algo de material de las bandas que habían tocado bajo el brazo, me fui del Escenario Santander, muy contento por las grandes actuaciones que había visto de Mind Driller, Los Pepes y Danko Jones, pero un poco decepcionado por la poca afluencia de gente pare el cartel que teníamos, y es que dicho cartel y la gente de Noche de Rock merecían una mucho mejor respuesta, pero ese fue el único punto negativo a este inolvidable velad de viernes en el local santanderino.
Larga vida a Noche de Rock y que sean muchos aniversarios más.