Nueva cita en uno de los pocos locales que programa música en directo con cierta regularidad en la ciudad de Torrelavega como es el Centro Social Ítaca, en donde había estado el primer día de ese mes de febrero, y a donde regresaba para ver a dos bandas locales como son Murdeity y To The Burial.

Pese a que la tarde noche era un poco inestable, meteorológicamente hablando, fuimos unos cuantos los que, prácticamente, llenamos el local torrelaveguense, con mucha presencia de gente joven y es que, como ya he dicho en otras ocasiones, a estos también les gusta el metal, pero no el mismo que consumíamos nosotros, como es lógico, sino el más actual.

Los primeros en salir al escenario, con bastante puntualidad sobre la hora prevista, fueron Murdeity, un sexteto formado por Álvaro Lavín, voz, Ernesto Bueno, guitarra, Iván Trueba, guitarra y coros, Arturo García, bajo y voz, y Armando Herreros, batería, todos ellos conocidos de la escena local y a los que ya habías visto en su primer concierto, hace más de año y medio.

Con una intro sonando de fondo, arrancaron su descarga, para dar paso a “The guardián, the mother, the storm”, uno de los temas que han subido a redes este mismo año y que empezó de manera calmada, para luego coger fuerza, contando con unos coros iniciales de su bajista, volviéndose un corte más intenso y con mucha contundencia, y en el que hubo partes más rápidas y unos muy buenos sonidos de guitarra.

Arturo fue el que nos introdujo en la siguiente pieza, “Murdeity”, con esa entrada muy épica, arropada por unos teclados grabados, para comenzar a cantar el propio bajista, pasando ya, más adelante, a ser Álvaro el que se pusiera al frente de la voz, ofreciéndonos una canción muy rápida, con contrastes, pero en esencia muy veloz e intensa, contando con partes machaconas y también lentas y pesadas, dejándonos una composición muy elaborada, que tuvo un potente final, aunque éste fue calmándose hasta concluir.

Turno ahora para que fuese Iván el que nos contase la narración que precedía a “Final journey”, un tema que empezó calmado, pero que luego cobró fuerza e intensidad, con unos coros muy logrados, siendo un corte muy rápido, con una muy contundente batería, volviéndose más potente y machacón, pasando a casi pararse, para retomar la potencia, ofreciéndonos una composición veloz y cañera, a la vez que pegadiza, en la que contamos con un buen y juguetón solo de Ernesto, concluyendo la misma de manera muy acelerada.

Nos informaron de que iban a ir relatándonos las aventuras de Murdeity y de que teníamos diferente material de la banda en su puesto de merchán, siendo Arturo el que nos dio la introducción de “Goldensun”, invitándonos a repetir el título de la canción, la cual empezó con mucha fuerza, pero relajándose levemente, sin perder ese aire épico, con los coros reforzando la contundencia de la pieza, que fue intensificándose y acelerándose por momentos, pero siempre manteniendo esa potencia que la misma poseía, así como ese estilo grandilocuente, terminando de manera poderosa y explosiva.

Ahora le tocaba el turno a Iván, que fue el que relató la entrada de “Mankind’s last stand”, un tema que empezó con mucha fuerza e intensidad, además de ser un corte muy poderoso y machacón, pero con partes más aceleradas y otras más calmadas, recuperando la potencia previa, aunque relajándose al final del mismo, para seguir con “Bastards of the moon”, una pieza que fue tocada a toda velocidad, muy cañera y con energía, a la vez que con un ritmo más movido y animado y que contó con muy buen solo de Ernesto, relajándose levemente, para recuperar la contundencia precedente, y que concluyó de manera muy rápida.

Y con una outro muy épica grabada, concluía este concierto de Murdeity, tras estar sobre las tablas 50 minutos, dando una poderosa actuación y notándose una gran mejoría en relación con la anterior vez que los vi, mostrándonos una propuesta muy elaborada y en la que se ve que tienen las cosas muy claras y que siguen haciendo crecer este gran aventura que han creado.

La verdad es que Murdeity esta noche nos dejaron con la boca abierta a todos los allí presentes y es que, pese a que ya sabía de las habilidades de sus músicos y conocía su propuesta, se aprecia las horas y el cariño que han ido dedicando, logrando que la concurrencia no quitase la vista de lo que estaba pasando sobre el escenario, gracias a los cambios de intensidad de sus temas y a la calidad de estos.

Ojo con estos Murdeity, que tienen las ideas muy claras y una colección de muy buenos temas, los cuales en directo suenan muy bien y que van a dar mucho que hablar; no te los pierdas en vivo en cuanto tengas la ocasión de verlos.

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Tras un cambio rápido, teníamos sobre las tablas a To the Burial, un quinteto formado hace 8 años y que está integrado por Dridri, voz, Gerar, guitarra y coros, Felipe, guitarra, Dani, bajo, y Aarón, batería, a los que había visto en directo por última vez hace más de dos años, habiendo publicado el disco “Humanity”, del 2019, y “Anima”, que están grabando y del que hoy repasarían buena parte del mismo.

Con una intro sonando de fondo, iniciaron su velada con “Awakening”, un tema que habían subido a redes unos días antes y que empezó con mucha fuerza, siendo un gran corte, muy pegadizo y quedón, para continuar, tras pedir ajustes en el sonido y agradeciendo a Murdeity el acompañarlos, con más canciones que todavía no han sido publicadas como “Nightfall”, la cual comenzó potente y constante, ofreciéndonos una pieza muy intensa y en donde se puede apreciar ese sonido más contundente que la banda ha dotado a estas nuevas creaciones, con una más que interesante contraste entre la voz principal y los coros de Gerar, contando con un sonido muy machacón, antes de un  buen solo de Gerar, concluyendo de manera explosiva.

Turno para recordar los temas de su único album editado hasta la fecha, siendo la ocasión de escuchar “Heart”, un corte con mucha fuerza y potencia, además de ser pegadizo, incitándonos a hacer un wall of death, algo que lograron, volviéndose constante y cañero, recordándonos que iban a alternar composiciones viejas y nuevas, volviendo a ese disco de hace 6 años con “Blood”, no sin antes solventar levemente unos problemas de sonido, que estropearon en gran parte la velada, comenzando con energía y contundencia, con momentos machacona, casi parándose, contando con un quedón estribillo y acelerándose al final.

Se mostraron encantados de tocar en Torrelavega, siendo el turno de “Reflections”, un tema que aparecerá en su próximo lanzamiento, el cual empezó poderoso y con intensidad, contando con unas voces cañeras, mostrándonos un corte muy pegadizo y con momentos más constantes, para recuperar las canciones de su ópera prima con “Flesh”, la cual habla sobre el canibalismo y que comenzó con ese inicio juguetón y potente, una pieza rápida, llevándose a cabo un circle pit entre el público, y que terminó de manera mucho más lenta y machacona.

Tras vacilar con la gente, continuaron con “Catalyst”, otro corte todavía no editado, el cual sonó a toda velocidad, un tema muy intenso y agresivo, motivándose otro gran circle pit y con un potente y machacona final, pasando a saludar a la gente del pub La Reserva, de esta misma localidad, para continuar con otra pieza nueva, “Horizon”, la cual empezó poderosa y rápida, siendo una canción muy cañera y con momentos más constantes.

Comentaron  la diferencia entre los conceptos de Murdeity y los suyos propios, regresando a su único disco con “Mind”, el cual comenzó con mucha fuerza y potencia, un tema con un ritmo movido y animado, pero que concluyó parándose en seco, para continuar, después de recordar que también tenían un puesto de merchán, con la que cierra ese mismo trabajo, “Bones”, una pieza que empezó de manera constante y poderosa, con mucha energía, dejándonos una canción pegadiza y quedona, además de intensa y machacona.

Nos avisaron de que iban llegando al final y que no iban a hacer el paripé de irse y volver, siendo el turno de la versión del “Dark days”, de Parkway Drive, un tema que tuvo un comienzo juguetón e intenso, siendo un corte muy rápido y con momentos para que la gente coreásemos, volviéndose machacón y constante después, para pasar a tocar una pieza del nuevo disco, “Elevation”, pidiéndonos que nos acercásemos, una canción muy cañera inicialmente, con potencia y momentos pesados, contando con un buen solo de Gerar, y concluyendo de manera lenta y contundente.

Agradecieron nuestra asistencia, al mismo tiempo que nos recordaban que tocarían a finales de marzo en Madrid, para tocar otro tema de su único disco hasta la fecha, “Senses”, un corte con mucha energía inicial y que sonó muy poderoso, contando con un parón para recuperar la fuerza previa y que tuvo un final machacón, antes de dejarnos con una pieza que irá en ese nuevo trabajo, “Daybreak”, la cual se inició de manera brutal y con mucha potencia, muy rápida, aunque se relajó levemente, antes de dar paso a un buen solo de Gerar.

Y, aunque nos habían dicho que la anterior era la última, todavía hubo tiempo para el tema que restaba de su único disco, ese “Soul” que precisamente lo abría, agradeciendo a la gente de los medios, a la sala y a Murdeity el haber hecho esto posible, presentando a los integrantes del grupo y animándonos a sacar los móviles, ya que este corte comenzó de manera calmada y sosegada, pero luego fue cogiendo más fuerza, bajando Gerar a tocar un breve tiempo entre el público, parándose la canción, para, después, retomar la intensidad precedente.

De esta manera y tras estar sobre las tablas una hora y cuarto, concluía este muy buen concierto, pese a los problemas de sonido, de unos To The Burial que demostraron tener una gran colección de temas y que en directo suenan muy potentes, habiendo ganado en contundencia con las nuevas composiciones y eso es algo que esta noche pudimos comprobar en la sala torrelaveguense.

Y es que este grupo se ha ido consolidando poco a poco y, sobre todo, reforzando su sonido, logrando que su música guste, no solo a los habituales a estos estilos, sino a aquellos que podemos no estar no tan metidos en los mismos, y todo ello se debe al gancho que tienen sus composiciones, así como a la poderosa que suena su propuesta en directo, en donde logran una gran comunión con los asistentes.

Ojo que este 2025 puede ser un año muy especial para To The Burial, por lo que os animo a que los sigáis la pista y, sobre todo, a que los veáis en directo.

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Tras las actuaciones de ambas bandas hubo un sorteo de material de las mismas, en el que algunos salimos beneficiados de que muchos de los asistentes ya se hubieran ido, llevándome una camiseta de cada grupo, tras el que me marché del C.S. Ítaca, que se ha animado a volver a hacer conciertos, como los que esta noche disfrutamos de Murdeity y To The Burial, dos formaciones que demostraron que el metal sí que gusta a las nuevas generaciones, pero el más actual, y que dieron dos grandes veladas; gracias al centro y a los músicos por hacer que este viernes fuese especial.