Ultimo viernes del mes de marzo y como el de la semana pasada regresaba al Rock Beer The New de Santander, en este caso para disfrutar con el evento que había organizado el colectivo Palos y Piedras, con las actuaciones de los cántabros Ídolos del Extrarradio y los leoneses Gente Muerta, con música antes de los conciertos y fiesta posterior a cargo de Coremanías Dj’s.
La verdad es que, cuando llegué, ya se veía una buena presencia de gente, algo que se iría incrementando a lo largo de la velada, que comenzaría con más de veinte minutos de retraso sobre la hora prevista, mientras escuchábamos de fondo algo de música con la que nos iban deleitando para hacer más amena dicha espera.
La primera banda en subir fueron los de casa, los chicos de Ídolos del Extrarradio, que este año cumplen 2 décadas en activo y a los que hacía más de un año que no veía en directo, estando la formación integrada, desde hace tiempo, por Alex Pis, bajo y voz, Fuzio, guitarra, y Gutxi, batería.
En estos 20 años han grabado ya los trabajos “Quien necesita amor teniendo una pistola”, del 2007, “El depresivo cuadro de los chicos eléctricos”, del 2009, el EP “Guerras bipolares”, del 2011, ese split con Sierra Nevada “Ídolos del Extrarradio / Sierra Nevada”, del 2012, el Ep “Vorágine”, del 2014, “La llamada del oso”, del 2017, “Discurso caníbal”, del 2019, y ,“La muerte y la pena”, del pasado año y que estuvo entre mis favoritos del 2024.
Ídolos del Extrarradio
Después de presentarse, aunque no hacía mucha falta ya que son muy queridos y conocidos, comenzaron su descarga con “Grecia”, recogido en su Ep del 2011, un tema con fuerza y que contó con un bajo muy marcado, para volverse más intenso y rápido, tras el que nos pidieron que nos acercásemos más, antes de empezar el repaso a su más reciente trabajo con “María Magdalena”, recordando la edición de dicho disco, una gran canción, con un inicio potente, pero que tuvo diversos cambios de ritmo.
Viajaron hasta su plástico del 2017 con “Sangre de obrero”, un tema que empezó lento, pero que se volvió más intenso y que contó con muchos cambios de ritmo, mostrándonos un corte ya clásico en su repertorio, para, después de agradecer a Palos y Piedras y a los chicos de Gente Muerta su trato, volver a su más reciente álbum con “Ojitos de caracola”, una canción que comenzó con un sonido quedón, que tuvo un pegadizo estribillo y que fue muy bien acogida.
No dejaron ese mismo trabajo con “Si se puede bailar, no es mi revolución”, un tema que empezó con fuerza, pero que luego combinó partes más lentas con otras más potentes, intensificándose al final, para retroceder hasta el 2017, año en el que publicaron aquel disco que contenía el conocido “Cosas de críos”, una pieza que se inició de manera guitarrera, dejándonos una canción muy quedona y bailable, además de muy constante.
Ídolos del Extrarradio
Momento de pasar por su anterior disco con el tema que le daba título, “Discurso caníbal”, el cual empezó con el sonido rasgado de la guitarra, contando con un bajo marcado y siendo un corte muy intenso y oscuro, además de muy celebrado, antes de regresar a nuevo álbum con la que le daba inicio, “Tierra Z”, vacilando entre ellos, una canción con una sección rítmica muy potente, ofreciéndonos una pieza muy pegadiza y poderosa, con parte muy rápidas y un final más calmado.
Mientras la gente pedía más y sin dejar ese mismo disco, continuaron con “Algo soviético”, y es que a veces te levantas poco católico y otras como dice el título de este corte, el cual fue muy movido y enérgico, mostrándonos un tema rápido y directo, para continuar con su compañera de plástico “No finjas que todo va bien”, una pieza que empezó tranquila, contando con esas pausas y un estribillo pegadizo.
Después de preguntarnos qué tal todo, con positiva respuesta de la concurrencia, volvieron a su trabajo de hace 6 años con “Como tú”, un corte que se inició con el bajo muy marcado, siendo un tema rápido y bailable, a la vez que corto y directo, regresando a su más reciente obra con “Fuego amigo”, la cual empezó con el sonido de la batería, una pieza muy potente y movida y que contó con un sonido constante.
Bromearon sobre que iban a ir acabando que había que tomar la pastilla, siendo el turno de “Neo opio”, de su anterior referencia, un tema que se inició con ese sonido inquietante, siendo un corte potente y movido, acelerándose al final y acabando de manera muy rápida, continuando en ese mismo álbum con “Fuego en el estarbax”, presentada como una canción bonita si te cobran 5€ el café, la cual empezó de manera muy animada y que fue muy celebrada, contando con un bajo muy marcado y con esos quedones coros finales.
Ídolos del Extrarradio
A esta altura de la velada Fuzzio y Alex se pusieron cabeza con cabeza y bromearon entre ellos, siendo el turno de “La llamada del oso”, el tema que abría y daba título a su disco del 2017, con ese inicio tan intenso y celebrado, siendo un corte con mucha fuerza y un contundente final, el cual fue unido cono el sonido de batería a “Bajo mi puta piel se esconde el cosmos”, una canción de su ópera prima, reconociendo que hacía mucho que no la tocaban, dejándonos una pieza con un bajo muy marcado y que resultó muy cañera y potente.
Así y tras estar sobre las tablas aproximadamente 50 minutos, concluía este concierto de los Ídolos del Extrarradio, los cuales nos ofrecieron una actuación que se pasó en un suspiro, demostrando que son un grupo muy querido dentro de la escena cántabra, algo que se han labrado gracias a sus intensos directos, no exentos de mucha calidad y de un montón de temas que son ya clásicos.
Y es que, pese a que faltaron algunos temas que también podían haber entrado en el repertorio, ninguno de los que tocaron esta noche sobraron, ya que han logrado hacerse con una base de canciones que pueden entrar o salir de su listado sin que la actuación desmerezca y eso se debe al buen hacer de estos magníficos músicos, que en directo son un verdadero vendaval.
No se prodigan mucho en directo Ídolos del Extrarradio o no tanto como nos gustaría, por lo que yo que tú no me los perdería, si puedes ir a verlos en concierto.
Fue un cambio bastante rápido, apenas veinte minutos, y enseguida estaban sobre las tablas los chicos de Gente Muerta, un cuarteto que se crea en Santa María del Páramo, estando compuesto por Chumy, guitarra y voz, F, guitarra y coros, Branche, bajo, y Adri, batería, los cuales han grabado ya un ep, llamado “Ep”, del 2021, y su disco debut “Turismo emocional”, del pasado 2024, el cual también recoge las canciones del citado Ep y que repasarían en su totalidad, salvó el último tema.
Y comenzaron su andadura con “Necesidad”, un tema que empezó tranquilo, pero que fue cogiendo paulatinamente fuerza, mostrándonos un corte con mucha clase, relajándose, antes de recuperar la intensidad precedente, para, tras pedir algún ajuste de sonido, continuar con “Entropía”, una pieza que iniciaron con un bajo muy presente y un aire denso, llevándonos a un estribillo muy contundente y quedón, siendo una canción con una parte en la que el batería tuvo su momento de lucimiento, la cual sonó muy vibrante y que tuvo un explosivo final.
Prácticamente unido con la anterior llegaba “Animal”, un tema con un inicio muy rápido, sonando de manera muy intensa y siendo un corte que fue cantado con mucha fuerza, relajándose y llevándonos a una parte casi hipnóticas, pero que luego fue ganando energía, agradeciéndonos nuestra acogida, presentándose y pidiendo algo de bebida, para continuar con “MAL”, una canción que empezó sosegada, aunque con un ritmo muy bailable y con ese momento en que casi se para y el bajo tiene más presencia, recuperando la potencia paulatinamente, para estallar de golpe y dejarnos una gran pieza.
Gente Muerta
Turno ahora para “Carta a las persianas cerradas”, un tema que empezó muy guitarrero para luego relajarse, aunque con un ritmo movido y que fue un corte cantado con mucha fuerza, con partes más machaconas y un potente final, para pasar a tocar la canción con la que se abre este disco y la que casi le da nombre, “Turista emocional”, la cual comenzó calmada, pero que fue ganando energía y potencia, tranquilizándose de nuevo, antes de ganar contundencia otra vez, dejándonos con un final muy sosegado.
Turno para dar gracias a la organización, a la sala, a los asistentes y a Ídolos del Extrarradio por el trato recibido, recordando que tenían un puesto de merchán con diverso material de la banda, siendo el turno de “Idealizar, desaparecer”, un tema que empezó relajado, para luego acelerarse y coger velocidad, siendo un corte muy movido y potente, sosegándose y permitiendo que el bajo se notase más, antes de volverse de nuevo muy rápido.
La sección rítmica fue la encargada de dar inicio a “Pupilas dilatadas”, un tema que comenzó de manera relajada, pero que fue ganando fuerza muy poco a poco, para intensificarse en su estribillo, siendo unido, precisamente por el sonido de la sección rítmica, con “Una sombra”, una pieza que empezó calmada, con el bajo y la voz muy presentes y que fue ganando paulatinamente contundencia, cogiendo la canción mucha energía al llegar estribillo y contando con diversos contrastes de potencia.
Gente Muerta
Después de ésta se subió Manu, del colectivo Palos y Piedras, para agradecer a las bandas su presencia, recordando que había material de ambas en el puesto de merchán y que la fiesta seguiría después, continuando el concierto con “Masa crítica”, un tema que empezó tranquilo y con el bajo, presente cogiendo más energía y potencia a medida que avanzaba, volviéndose muy intenso, antes de llegar a ese estribillo pegadizo, alternando momentos más calmados y otros más rápidos, para dejarnos un relajado final.
Y su actuación llegaba a su fin con “#16161D”, una pieza que empezó con el sonido de la batería y de manera tranquila, para luego intensificarse e ir ganando potencia y tener mucha fuerza en el estribillo, dejándonos una canción con energía, pero que luego se paró, dando pie a un momento en que el bajo destaca, antes de recuperar esta contundencia previa paulatinamente, hasta concluir de manera explosiva.
De esta manera y tras casi una hora sobre las tablas, concluía este concierto de unos Gente Muerta que, al menos para mí, fueron un gran descubrimiento, demostrando ser una banda con mucha clase y con una propuesta musical muy variada, ofreciéndonos un gran repertorio y logrando que, en todo momento, la gente mantuviera la atención ante lo que estaba sucediendo en el escenario.
Gente Muerta
Indudablemente, esta propuesta, con tantos contrastes, puede no ser accesible para todos los oídos, pero no creo que a ellos esto les importe mucho y lo cierto es que demostraron tener una buena colección de temas con mucha calidad, que fueron perfectamente ejecutados por estos 4 músicos, los cuales lograron que muchos de los allí presentes nos subiésemos a su barco.
Una banda con mucho futuro por delante, estos Gente Muerta, y que son una formación a la que os animo a seguir y, sobre todo, a ver en directo.
Y la fiesta seguía, pero para mí ya era bastante tarde, cosas de trabajar los sábados por la mañana, por lo que me fui del Rock Beer The New de Santander con el disco de Gente Muerta debajo del brazo y el buen sabor de boca de las actuaciones de este grupo leones y de los cántabros Ídolos del Extrarradio, que nos brindaron una gran noche y todo gracias a la gente de Palos y Piedras, a las propias bandas y a la citada sala; por más veladas como ésta.