En la localidad riojana de Alfaro, el pasado sábado 6 de noviembre, tuvo lugar la celebración del Alfarock, festival que cuenta con diez años de historia y por el que han pasado grupos de la talla de Kaotiko, El Ultimo Ke Zierre, Gatillazo, Piperrak o Saratoga.

El formato de esta edición presentaba algunos cambios con respecto a años anteriores. Así, el festival se llevó a cabo el primer sábado del mes de noviembre y no de octubre como en ediciones pasadas, y la duración del mismo descendió de dos jornadas a una única jornada.

En cuanto al cartel, tuvo un notable acento alfareño. Junto a grupos de renombre como Koma o Mojinos Escozíos y otros menos trillados como Azero se encontraban dos de las bandas percusoras del rock riobajeño, los legendarios Hékate y Randall. Después de quince años lejos de los escenarios, los dos grupos se reunieron el pasado verano en un concierto a favor de las víctimas del terremoto de Haití.

En un principio, ese reencuentro iba a ser único. Pero la insistencia de la organización del Alfarock para contar con estas dos bandas en su décimo aniversario, hizo posible la presencia de los dos grupos la noche del 6 de noviembre.

Partíamos de Vitoria a eso de las dos del mediodía y tras unas dos horas de viaje nos plantábamos en Alfaro. Pese a la inexistencia de carteles indicadores no nos resultó complicado dar con el polideportivo donde iba a tener lugar el festival. Retiramos nuestra pulsera en taquilla y entramos al Polideportivo Municipal de Alfaro, recinto donde a partir de las 17.00h. iban a tener lugar los conciertos.

Teníamos tiempo de sobra, así que aprovechamos esos minutos para echar un vistazo al diseño de las camisetas de esta nueva edición, al precio de las bebidas (Katxi de kalimotxo o cerveza 4€, cubatas 5€) y también la zona de acampada, situada a la salida de la instalación deportiva. La superficie de dicha zona no era todo lo cómoda que hubiera gustado a los que allí decidieron pasar la noche, ya que en el suelo había numerosas piedras. Esperamos que al menos el frío no les impidiera descansar durante unas horas.

Llegó la hora de inició de los conciertos, Azero, fue el primero en subirse a las tablas. Los de Teruel, que cuentan con cinco trabajos de estudio en su haber, intentaron animar con sus ritmos acelerados al escaso público que se citó para ver la inaugural actuación de la décima edición del Alfarock.

Pero solo unos pocos valientes se animaron a acercarse a la primera fila, tampoco ayudo el sonido. Durante los primeros temas no fue nada bueno, afortunadamente con el paso de los minutos ese problema se solventó. Mientras tanto Azero descargaba temas como “A desalambrar” o “Sangre en la manifestación”. Buena parte del muestrario lo formaron canciones incluidas en “Manos arriba”, el último álbum del grupo que vio la luz en el año 2009.

Se acercaba el final del concierto y la cantidad de público aumentó considerablemente, y es que, nadie quería perderse la siguiente actuación.

Después de escuchar una interesante mezcla de temas de punk y de rock entre los que incluso se coló alguna balada, llegó el momento de Segismundo Toxicómano, grupo asiduo a este tipo de eventos de un día.

Dieron comienzo a la función con “Apunta”, tema que se incluye en “Una Bala”, último álbum de la banda que cuenta con poco más de un año de existencia y del que siguen repartiendo ejemplares de manera gratuita allí donde van. De esta publicación interpretaron en total alrededor de seis temas, y es que pese a contar los cortes del séptimo y último disco con bastante aprobación entre sus seguidores, los temas míticos no podían ni debían faltar.

Así “Gaupasa”, “Patrones” o “Asturiax” fueron de las más aclamadas por los allí presentes. Éstos saltaron, botaron y poguearon sin parar y es que, a poco que los vitorianos ofrezcan, sus fans responden efusivamente.

Aprovecharon la presencia de Luís de Punk Guerrilla, que echó una mano a los miembros de la organización, para que tomara el micro en el tema “Euskadi”. No es la primera vez que lo hace, en la grabación de “Balance de daños”, disco de directo, durante la interpretación del mismo corte también acompañó a los gasteiztarras sobre el escenario de la sala vitoriana Hell Dorado.

Antes de que llegara la hora de la despedida, quisieron deleitar a sus seguidores con “Botes de humo”.  Una vez más los Segis se mostraron totalmente entregados y extraordinarios sobre las tablas.

Minutos después de que el cuarteto vasco dijese adiós, sonaron los primeros acordes de una composición de Randall.

Randall es un grupo que surgió en el año 1991 y que cuenta con grandes influencias del rock urbano de los años noventa. Un año más tarde de su formación telonearon a Su Ta Gar en un concierto ofrecido en la plaza Cervantes de Alfaro y a los meses grabaron su maqueta homónima.

Recorrieron cientos de kilómetros realizando un buen número de conciertos, pero a finales del año 1995 se despidieron de sus seguidores. Una buena cantidad de público se acercó a presenciar la función del cuarteto de Alfaro. El respetable se mostró participativo y coreó de manera incansable los estribillos de temas como “Falsos rumores”, “Ley de leyes”, “Cuentos de rock”… demostrando así, que conocían al dedillo sus temas.

Randall quiso homenajear mediante una canción al grupo Alarma, banda de pop de los años ochenta. Su estilo me recordó al de Rosendo, por tanto no fue muy de mi agrado, pese a ello, he de reconocer que realizaron un concierto correcto y animado.

Poco tardaron en salir Uzzhuaïa a escena, los valencianos fueron a cuchillo desde el primer instante. Abrieron su concierto con una intro y tras ella comenzaron a desengranar temas de sus cinco obras.

El quinteto aprovechó su actuación en Alfaro para presentar las nuevas canciones, las incluidas en “13 veces por minuto”, trabajo que ha salido al mercado recientemente. Durante la descarga de las mismas el público se mostró algo parado y pasivo, tan solo daban muestras de estar disfrutando los situados en las primeras filas. Eso cambiaba cuando sonaba un temas más antiguo, todo un acierto alternar los nuevos con los viejos cortes.

Los valencianos exhibieron contundencia, fuerza y rabia sobre el escenario, de esta manera fueron contagiando su energía a los más reacios a su música.

La emoción de apoderó de los fans de Hekate al ver sobre el escenario al cuarteto local. Hekate es leyenda en La Rioja, con su heavy rock con tintes urbanos visitaron numerosas ciudades del estado y en marzo de 1991 grabaron una maqueta de nombre homónimo compuesta por seis temas.  Tras conciertos inolvidables como el que les llevó a telonear a Asfalto, en 1994 se despedían.

El 19 de junio de 2010 se reunieron en un acto benéfico. En aquella ocasión su batería, Carlos Catalán no pudo participar por causas laborales, por lo que el concierto de Alfaro fue muy emotivo.

Durante el show nos deleitaron con temas tranquilos y melancólicos como la canción de desamor “Dardos envenenados” o “Teatro de vivir” y “Juégatelo”. Estoy seguro de que los fieles a Hekate disfrutaron de lo lindo, el resto nos mostramos algo impacientes ante la inminente aparición de los Mojinos Escozíos sobre las tablas.

Los sevillanos portando un curioso y divertido vestuario y liderados por un simpático “El Sevilla” supieron ganarse al público desde el comienzo.

Presentaron un puñado de canciones de “La leyenda de los hombres más guapos del mundo”, el último disco de la banda, pero no dejaron de lado temas carismáticos como, “Que güeno que estoy”, “Al carajo”, “Me has dicho borracho” o “Las niñas del Colegio de la Salle”.

Las letras graciosas y desvergonzadas de sus canciones hicieron las delicias de los allí presentes que a su ve disfrutaban con las bromas de “El Sevilla”, un autentico showman que se mostró incansable.

Entre charla y charla del vocalista, a más de uno y una se le escapó algún bostezo y es que sus monólogos en ocasiones resultaban algo cansinos. 

Después le tocó el turno a Lendakaris Muertos a los que hemos visto antes en multitud de ocasiones, pero pese a ello, su actuación nos pareció de lo mejor del festival. Los navarros trajeron consigo buen rollo y aquella noche quedó patente el tirón que tienen allí donde van.

Desde el inicio se menearon sin parar sobre el escenario, calentando aún más si sabe un ambiente ya caluroso. Su vocalista Aitor, no tuvo el más mínimo reparo en tirarse varias veces del escenario e incluso en ascender a las gradas del polideportivo para animar a aquellos que las ocupaban a descender a la pista. El resto de compañeros tampoco dudaron en mezclarse entre el público durante varias canciones, dejando en alguna ocasión a Potxeta solo en el escenario.

Nos deleitaron con una gran cantidad de buenos temas “Besos gaztetxeros”, “Centro comercial”, “Gora España”, Fuimos ikastoleros”, “Héroes de la clase obrera”… Para el final dejaron “Veteranos de la kale borroka”, uno de los temas más coreados por los allí presentes.

Brigi, vocalista de Koma, que esperaba el comienzo de su actuación tampoco quiso perderse el show de los Lendakaris, le pudimos ver durante unos minutos observándoles con atención, seguro que el también se lo pasó en grande.

No fue ningún error dejar para el final la actuación de los dos grupos navarros, y es que debido a la cercanía existente entre Alfaro y Navarra, gran parte del público congregado en el festival provenía de esta última región.

Cerraron la décima edición del Alfarock Koma.

Dieron inicio a su actuación con agresividad, contundencia y sin respiro. Durante la primera parte del concierto ofrecieron varios temas de Sakeo, el último trabajo de la banda, que vio la luz en el año 2007. Llevábamos tiempo reclamando nuevo material de los navarros, pues bien, hace escasos días se dio a conocer que ya han comenzado a grabar su nuevo disco, el cual se llamará “La Maldición Divina”.

De sus temas de siempre nos ofrecieron “El catador de vinagre”, “El muro de Berlín”, Aquí huele como que han fumao”, El Marques de Txorrapelada”.

Debido al cansancio decidimos ver la parte final de su concierto desde los asientos, y es que las casi doce horas de conciertos se nos estaban haciendo algo duras. “Mi jefe” sirvió para dar por concluida la actuación de Koma y poner punto y final a esta nueva edición del Alfarock, la del décimo aniversario.

Era la primera vez que asistíamos al festival y de allí nos trajimos muy buenas sensaciones y un agradable sabor de boca, seguro que en el 2011 repetimos.

Nuestras felicitaciones y agradecimientos para todos los miembros de la organización del Alfarock.