Tenía bastantes
ganas de volver a ver a Silencio
Absoluto en Directo. La primera vez fue con Boikot
en la sala Bilborrock y la verdad que la experiencia fue
bastante positiva.
Venían los riojanos
presentando su tercer disco "A
brincos entre la luna y el sol" y salieron
del Rebujas como unos de
los triunfadores de la noche. Así como quizás
con sus discos te dejan algo indiferentes, la puesta en
escena es impecable, con un sonido muy currado.
Hay quien le recuerda
al directo de Celtas Cortos
pero yo creo que los Silencio
tienen su propia identidad sobre el escenario. Esperemos
volver a verles por Cantabria en breve.