Si la semana pasada comenté en la reseña de un disco el buen estado de forma de las bandas punks cántabras, ahora me sigo reafirmando ya que me toca hablar del nuevo trabajo de otro grupo de la tierruca. Ellos son Karne Cruda y nos presentan sin muchos remilgos ni concesiones una criatura formada por 14 temas y titulada "Días como navajas".
 
Sin duda alguna esto que ahora escuchan mis oídos se ha hecho bastante de desear pero también hay que decir que no hay momento para la indecisión ni las medias tintas al decir que la espera ha merecido la pena.
 
El tono de la banda es un punk contundente, por decirlo de alguna manera, y como bien ellos comentan brutal y agresivo, y es que a veces no hay nadie mejor que uno mismo para definirse.
 
Las letras de las canciones de este "Días como navajas" son las absolutas protagonistas de una historia que comienza con una lenta introducción al caos de las guerras y que cabalga entre los pobres que luchamos por recoger las migajas que nos dejan los ricos, de los niños que revuelven en la basura para sobrevivir y de la hipocresía de tratar de "ayudarles" en la época navideña… Y también hay hueco para homenajear al más puro y bestial sexo, a la lucha incesante por trabajar y trabajar, envejecer y morir mientras curramos, o para hacer una declaración de intenciones y decir que su causa es el "Punk & Roll".
 
Es probable que al leer así la temática general de las canciones a uno le pueda dar la impresión de ser más de lo mismo, pero no hay más que dejarse un poco el oído y querer escuchar, y no sólo oír, para ver que Karne Cruda cuenta con unas letras muy pero que muy trabajadas y que son todo lo contrario de planfletarias y facilonas.
 
En cuanto a la música hay de todo un poco como en botica, temas más melódicos, otros más duros y crudos, y otros en los que parece que las cuerdas de las guitarras se van a romper y las baquetas se van a partir. Y destaca sobre manera una voz tosca, dura y ronca, unos coros muy adecuados, unas guitarras omnipresentes y que se hacen imprescindibles, y unos estribillos que te taladrarán la mente ý no se te olvidarán a la primera de cambio.
 
No me va vergüenza alguna al comentar que me siento muy pero que muy orgullosa de poder ver casi cuando me apetezca, o con relativa facilidad, a bandas como Karne Cruda. Y es que sería de necios no alabar la genialidad de algunas de las canciones de este "Días como navajas" como "Requiem mundial", "Niños rata", "El club de los poetas muertos", "Sexo y alcohol", "Muerto en vida" o "Todo está podrido". Al final en esto de la música creo que es muy pero que muy importante ser humilde, pero como lo cortés no quita lo valiente también opino que Karne Cruda pueden llevar la cabeza bien alta allá por donde vayan.
 
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www.myspace.com/karnecrudaantipapardos