Tengo que reconocer abiertamente que, cuando escuché por primera vez el nuevo disco de Robe, tuve unos sentimientos y emociones bastante encontrados. Me sorprendió muchísimo, pero, por otro lado, esa atmósfera tan intensa que posee "Destrozares", me causó en un principio algo de estupor. Sentí ese miedo, necesario y motivante, que se suele sentir ante las novedades, esa inquietud que imprimen los retos, y ese cosquilleo que le dan sal a la vida.
 
Tenía unas expectativas puestas en este álbum, siempre se tienen, aunque realmente no sabía en qué se materializaban mis pensamientos, no supe ponerles música ni letra. Y finalmente, al escuchar este disco un par de veces, en seguida me di cuenta de que estaba ante una obra de tal calado que quedará para la posteridad, las futuras generaciones hablarán de ella.
 
Sin ánimo de resultar grandilocuente, sí que quería empezar resaltando dos cosas importantes: La primera de ellas, es que valoro la honestidad por encima de todo, y creo que el señor Robe Iniesta, es cuando menos honrado, al tratar este proyecto de forma paralela a otras formaciones con las que trabaja. No hay nada peor que tener que hacer algo que no te apetece, y menos cuando no tienes necesidad. Robe es un proyecto diferente y como tal debe ser tenido en cuenta.
 
La segunda de las cosas que quería comentar, es que todo en esta vida tiene su momento, su tiempo y su lugar. Todos maduramos, crecemos, experimentamos y evolucionamos. Este nuevo disco es una auténtica obra de arte, lo mires por donde lo mires. Opino que hay que saber valorar las cosas por lo que son, no por lo que nos gustaría que fueran, o comparándolas con otras con las que nada tienen que ver.

Dicho lo cual, que resume muy bien el punto de partida de esta reseña y mi opinión general, voy a hablar del nuevo disco de Robe, que lleva por título "Destrozares". Este trabajo está compuesto por diez temas, y cuenta con un sonido espectacular. Ha sido grabado en los estudios MuxikOn por Iñigo Etxebarrieta, y en los estudios Small Room y 360 Global Medio por José Luis Crespo. Siendo el resultado demoledor.
 
Además, los aspectos visuales del disco, la portada, contraportada, y las ilustraciones del CD (Diego Latorre), el libreto (Eduardo Navarro), y la fotografía artística del interior del libreto (Sonia Valle), están cuidados al detalle. Todas las personas que han participado en ello han hecho un trabajo sobresaliente. Y si tuviera que destacar algo, me quedaría con las fotografías del libreto. ¿Por qué?. Pues porque me han puesto literalmente los pelos de punta, y porque ilustran a la perfección las canciones.
 
Además, hay que comentar que "Destrozares" es un disco denso. Denso en el sentido de que no es banal ni arbitrario. Al escucharlo uno se plantea cómo se puede llegar a sentir una persona para componer esos temas, y para ponerle a las canciones esa música en particular. Este disco destroza, nunca mejor dicho.
 
Estas canciones a mí me relajan, me dan alas, me conmueven y me liberan. Está clarísimo que es el alma y la vida del señor Iniesta reflejada en diez temas. Es un disco personal, que estremece y que mueve los cimientos. Da paz y a la par provoca unas ganas de gritar tremendas, pero de gritar para dentro. "Destrozares" hace estallar el mundo interior.
 
En cuanto a la música, me parece simple y llanamente sublime. Y ese es de los primeros pensamientos que tuve cuando lo escuché. No creo que podamos oír en mucho tiempo algo tan potente, que no ruidoso (no confundamos los términos, por favor). Es mágica y digna de mención la labor de Carlitos Pérez (violín y voces), de David Lerman (bajo, saxo, clarinete y voces), de Alber Fuentes (batería y voces), de Lorenzo González (voz), de Álvaro Rodríguez Barroso (piano, teclados y acordeón), y de Robe (canciones, voz y guitarra). Sí, sí, con muchos "des" entre uno y otro, porque dan valor y remarcan, porque todos son necesarios en este engranaje, y porque entre ellos han creado algo con un valor incalculable.
 
"Destrozares" es un trabajo que hay que escuchar con una gran amplitud de miras y con la idea de dejarse llevar. Tal vez no te guste, y eso no será ni mejor ni peor. Pero si logra conquistarte, te rendirás irremediablemente a los encantos de un gran disco. De algo que refleja un gran esfuerzo y que se merece el mayor de los aplausos.
 
Espero poder disfrutar de estas nuevas canciones en directo, y así vivir la experiencia de sentirlas en toda su magnitud.
 
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