Si hay un estilo que está siendo maltratado en Cantabria por el público y por la desidia de las instituciones ese es el Heavy Metal, y eso que tenemos muchas y muy buenas banda que practican dicho estilo.
Uno de los más longevos grupos son Airare Nuf, con casi dos décadas de trayectoria, por la que han pasado muchos músicos que después han estado en otras bandas de la región y que está viviendo una segunda juventud, gracias a una mayor estabilidad en la misma, lo que ha posibilitado la creación de este fantástico disco llamado "Muerte y condena", publicado esta primavera.
La banda esta actualmente integrada por Moisés Arce a la voz, Miguel Gutiérrez a la voz, Miguel Cuevas a la guitarra y coros, Francisco Oceja al bajo y coros, y José Domingo Venero a la batería, formación que ya lleva 3 años asentada y que ha grabado este tercer disco de la banda.
El citado disco consta de 19 temas, siendo los primeros 11 de nueva factura y las otras 8, subtitulado "...de las cenizas", revisiones de temas de su anterior trabajo pero con la actual formación y la colaboración de algunos de los amigos de la banda, siendo grabado, mezclado y masterizado en los Sonoarc por Oscar Arce, toda una garantía, en los dos últimos meses del pasado 2017.
El disco cuenta con una fantástica portada obra de Virginia López Santander, con ese inquietante cuervo observando la devastación que hay a su alrededor, siendo además autora tanto del libreto como del logo de la banda, mientras que la fotografía ha sido obra de Cristina Minchero y la caricatura de la banda, incluida en el disco, obra de Pedro Echevarría (Cheva Tatoo).
Y vamos a empezar a desgranar el disco que se inicia con la inquietante y acertada introducción, "Llanto de guerra", obra del Santi Novoa, teclista de Warcry, para dar paso a una entrada de bajo y batería que nos introduce en "Muerte y condena", un tema muy guitarrero y constante que nos sirve de carta de presentación de lo que nos espera en todo el disco, con un Moisés que ya demuestra sus grandes facultades como vocalista, dando forma a un tema muy constante y potente y con un buen trabajo de las guitarras en toda la pieza.
Más rápido y guitarrero es el comienzo de "Por lo que pueda pasar...", con un sonido que se base en una guitarra constante, hasta toparnos con un estribillo muy pegadizo donde los coros arropan de manera brillante la voz principal, con un buen solo de guitarra en la parte central, siendo un tema de esos que es fácil que se te queden grabados.
Como si fuese la continuación de la anterior, nos encontramos con "...pasar a la acción", con unas guitarras mucho más veloces, escudadas por una sección rítmica muy potente, mientras la voz vuelve a lucirse, muy bien rodeado de unos coros que redondean más un tema que es de lo más potente del disco.
Como si estuviéramos alrededor de una fogata aparece el comienzo de "Mañana al amanecer", arropada por las voces liricas de Felisa Palacio, un autentica delicia de tema, que empieza de manera lenta y tranquila hasta que este coge fuerza y nos topamos ante un gran himno de batalla, donde todo está perfecto desde la letra hasta la estructura, destacando la aportación de Raúl de Emboque que hace coros en este tema y en buena parte del mismo. De lo mejor del disco, que ya es decir mucho.
Y si la anterior me ha encantado, "Sirenas" es de las que primero me engancharon, con ese sonido tan power metalero y rápido que desemboca en un estribillo de esos que se te graban a fuego, con una letra muy guapa y unas guitarras que se lucen, como en casi todo el disco, sin dejar atrás a una sección rítmica brillante en todo el tema y una voz que demuestra sus enorme nivel, algo que queda contrastado en la parte final del tema. Totalmente adictiva tanto por su música como por su letra.
Vamos avanzando con "No quiero verte sufrir", que cuenta con la colaboración a los coros de otro amigo de la banda como es Rafael Pérez Seoane, de Capitán Guinea y Zen, entre otros proyectos, un tema que habla sobre las adicciones y que cuenta con un ritmo muy constante y unas voces que dan mucho lustre al tema, pero con una buenas aportaciones de las guitarras, sobre todo en la parte final del tema.
Unos latidos y unos caballos dan entrada a "Corazón de fuego", una canción que empieza lenta y pesada hasta coger velocidad y encarar un tema con un toque épico tanto por la letra como por la música, con una batería muy contundente, bien acompañado por el bajo, mientras las guitarras se muestran muy potentes y con partes más rápidas, junto a la siempre brillante voz de Moisés.
Como podéis ver en la temática del grupo, todas las canciones tienen una temática como de decepción y amargura, algo que también está presente en "Aléjate de mí", con un sonido más Hard rockero, que cuenta con un estribillo muy pegadizo y un ritmo muy constante, de esos que se te quedan marcados, concluyendo con una nueva demostración de la calidad de su vocalista.
Muy bueno es el empiece constante de "Los buenos tiempos no vendrán", que cuenta con la colaboración de Dani de Darksun y unos cuantos grupos más, que le da su toque personal a un tema muy rápido, donde el duelo de estos dos grandes vocalistas hacen que sea una pieza realmente deliciosas de escuchar, con una temática negativa o realista, depende de cómo se mire; de esas canciones que a medida que la escuchas más te gustan.
Y acabamos la que podríamos llamar parte nueva del disco con "Triste final", un tema que empieza lentamente, con el tic tac de un reloj y una guitarra acústica, hasta encontrarnos con la voz de un Moisés, que aquí está aun mejor que en el resto del disco, topándonos con el resto de los músicos una vez la canción ha avanzado un par de minutos, siendo un tema realmente desgarrador que habla sobre una persona que se va a suicidar y los motivos que le llevan a hacerlo; realmente una de esas canciones que si no te sobrecogen al escucharlas es que estás hecho de horchata, ejecutada con una gran brillantez y que es una pieza que, sin duda, ya es historia del heavy metal cántabro.
Y pasamos ya a las canciones ya publicadas en su anterior disco, editado en el 2014, pero que han sido grabadas por la actual formación, comenzando por la rápida y pegadiza "Luz interior", una canción que, mantiene en parte la esencia de la banda, pero con más matices que la banda, sobre todo en su parte vocal, ha ido incorporando en los últimos años y que son fácilmente apreciables.
Seguimos ahora con "Un mundo de gloria", con esa cabalgada inicial, adentrándonos en una pieza, que, como en el caso anterior, ha perdido esa crudeza en favor de una mayor variedad y una mayor presencia de la melodía, enriqueciendo la canción, al menos para mí, en relación a la original. Si se me permite el símil y evitando comparaciones, es como cuando Mago de Oz regrabó parte de su primer disco en aquel Ep de 5 canciones.
Si hasta ahora habíamos visto mejoras, lo de "Hacia mi libertad" parece directamente otra canción, sobre todo por la gran aportación del gran Ángel Rubín, uno de los mejores vocalistas del estado, y que aquí hace un dúo perfecto junto a Moisés, dotando cada uno su propia personalidad a un tema que suena fantástico. Pese a que ya era un gran tema, de los que más me gustaban de la anterior etapa de la banda, la mejora es muy significativa.
Una nueva colaboración aparece en "Hijo del diablo", con Putu (Ex Mordor, Fatal Portrait y Bittencross entre otros), dotando un aire enigmático al tema, haciéndolo crecer de manera más que evidente, y dándolo un toque muy singular que la diferencia en lo vocal de buena parte del resto de las canciones.
Uno de los mejores temas de su anterior disco, al menos para mí, era "Cazador" que ha sido mejorada aquí de manera más que importante, con muchos matices, sobre todo con unas voces más trabajadas que en su versión original, aunque manteniendo la esencia de la original.
La balada del anterior disco era "Hermano del cielo", para esta revisión ha contado con las voces de Cristina Minchero que, unida a las de Moisés, han dado aun más dramatismo y melodía a un tema que ha ganado en melodía sobre la primera grabación, algo que es apreciable a primer escucha y que, de verdad, hace que la canción suene mucho mejor de principio a fin.
Vamos encarando la recta final del disco con "Solo quiero luchar", otro de mis temas favoritos del anterior disco y que aquí sigue manteniendo la esencia de la primera grabación pero que, como en todos los precedentes, suena mucho mejor, no solo ya en la parte vocal, ampliamente mejorado, sino también en la parte musical que ha ganado, ya que suena todo mucho más claro y reconocible.
Y acabamos el disco con la guitarrera "Ave Fénix", que cuenta con la colaboración del Icko Viqueira de Aquelarre, que contrapone muy bien su voz con la de Moisés, dándole un toque más power al tema, que en su totalidad ha sido mejorado sobre la grabación inicial, dotándolo de un sonido más fresco.
Y así termina este extenso y gran disco de los funerarios, como son conocidos estos Airare Nuf (si so preguntáis porque mirar el nombre al revés), que han demostrado con este disco que ese momento dulce que estaban viviendo en sus actuaciones, no era algo casual y han sabido plasmarlo en un disco, este "Muerte y condena", repleto de muy buenas canciones nuevas y de una gran selección de canciones clásicas de la banda que también parecen nuevas.
Pese a que siguen fieles a su estilo, se han enriquecido aportando matices que han dotado al disco de más variedad y las canciones están muchos más trabajadas que en etapas anteriores, todo ello con una fantástica producción.
Si te gusta el Heavy Metal no dejes de escuchar a Airare Nuf, ya sea en directo, donde son una garantía, o haciéndote de ese disco, que se convierte en uno de mis favoritos en lo que va de año.