No siempre las cosas se hacen en los plazos que uno se marca y es que, a veces, surgen imprevistos en la vida que hacen variar aquellos planes que uno tenía fijados, e, incluso, puede que lo planificado no valga y haya que empezar de cero.
Algo o mucho de esto puede decir la gente de Sez-Naus a los que, desde la edición de su Retales #3 en el 2017, les ha pasado de todo, bueno y malo, lo que ha provocado que la banda haya tenido que replantearse algunas de las cosas que tenía en mente para terminar este bloque de Ep´s que, bajo el nombre de Retales, llevaban publicando desde el 2015 y que se debería haber cerrado en el 2018, pero por lo anteriormente citado, este cuarto y último trabajo ha salido editado este 2020.
Pero, a diferencia de lo que cabía esperar, este último "Retales" no ha seguido la numeración que se presumía y le han titulado "Retales#Zero", siendo un disco que han presentado en directo el pasado mes de enero en su Suances natal, habiendo dado varios conciertos más a partir de esa fecha.
El disco se nos presenta con un diseño grafico obra de Sutu y Sarpanet Soluciones Web, habiendo sido grabado por la propia banda, es decir, Joaki voz y guitarra, Mon guitarra, Juan bajo y Santi batería, durante el pasado 2019, mientras que la mezcla tuvo lugar en los Estudios Rocketes en diciembre del mismo año.
Tampoco debemos olvidar que, con este disco, se entregaba una lograda caja donde poder incluir los cuatro álbumes editados bajo el nombre de Retales, junto a un libreto, con un bello dibujo de Lucrecia Fraile y diseño de Sarpanet, en el que incluyen los agradecimientos a todos aquellos que han estado involucrados en esta aventura.
Y si algo caracteriza a este disco, de 6 canciones y algo más de 25 minutos de duración, es la diversidad y variedad de los temas que lo componen, arrancando con esas frases que nos lanza Joaki a capela en medio de una ventisca, hasta que toda la banda grita el nombre de la canción, "Lima", siendo seguido de unas guitarras arropadas por la sección rítmica, acelerando la pieza, para luego relajar y acelerar la misma, y, posteriormente, frenarse y darle un tono más potente al estribillo, jugando con ambas intensidades, hasta que, de repente, el corte tiene un parón para que surja las voces de Adrian G. Villarín y de Bambax que rapean unas frases, con la música de la banda de fondo, concluyendo de manera abrupta tras retomar la velocidad inicial. Muy original y de las que entran muy bien.
Pasamos ahora a "Perfectamente imperfectos", que se inicia de manera muy contundente y agresiva, más en la línea habitual de la banda, pero con un gran sonido, donde la batería destaca en el inicio, para luego toparnos con un tema donde los coros y la voz principal cobran protagonismo, mostrándonos una pieza lenta pero potente, con una letra muy revindicativa, para luego pasar a una parte más rápida, mientas nos encontramos con un buen solo de guitarra, manteniendo la canción esa tensión entre la melodía y la contundencia, algo que ellos saben hacer muy bien. Un buen corte marca de la casa y muy pegadizo.
Una inquietante guitarra, seguida de un redoble de batería, da inicio a "La manada (Púdrete)", con unas guitarras muy agresivas, para luego relajarse un poco el corte cuando entra la voz de Joaki, volviendo a coger velocidad con unos coros que dan más énfasis al tema que se trata, ralentizándose la pieza y cobrando mucha importancia tanto la voz como los coros, con esas frases reiterativas que les sigan, para luego recuperar poco a poco esa velocidad previa y una letra que habla de la violencia machista y que acaba de manera abrupta. Muy machacona y muy bien trabajada.
Para "El mismo error", que comienza de manera relajada, cuentan con un invitado muy especial como es Raúl de Emboque, que colabora con su voz, cogiendo el corte fuerza y potencia a medida que va avanzando, con una sección rítmica muy contundente y las guitarra luciéndose en la primera parte, disfrutando con la gran combinación entre las dos voces, que, pese a ser muy diferentes, se unen muy bien, mientas la música va jugando con ese sonido continuo y reiterativo pero eficaz y que le da dinamismo al mismo. Muy buen tema, con una buena combinación de estas dos voces y un estribillo muy pegadizo.
La voz de Joaki es la que da comienzo a "Tiempo cero", acompañada por una guitarra muy pausada y tranquila, tras la que se desata la tormenta y aparecen el resto de los músicos dando cera, para que vuelva a surgir la voz con mucha más agresividad, siendo un corte lento pero muy pesado, donde el bajo suena muy rápido durante el estribillo, pero manteniendo la esencia del tema que no pierde la fuerza, para, en la recta final del mismo, empezar a acelerarse, con un buen solo de guitarra, y la sección rítmica mostrando sus virtudes. Una pieza donde se puede apreciar más claramente la calidad de los integrantes de la banda.
Y llegamos al final del álbum con "En el cajón", que se inicia con un sonido muy tranquilo de guitarra y que cuenta con la participación especial de Ivan Longo de ADN a la voz, consiguiendo compaginar muy bien con la de Joaki, siendo un corte muy relajado para lo que suele ser habitual en Sez-Naus, donde las acústicas tienen más papel que las eléctricas, con la sección rítmica teniendo un peso aún mayor y con muchos matices que pueden no apreciarse a primera escucha. Un final de disco diferente pero muy bueno.
Ha sido un camino largo y difícil hasta poder sacar adelante este "Retales#Zero" pero la espera ha merecido la pena ya que estamos ante un disco muy variado y con muy buenos temas donde Sez-Naus han abierto ligeramente su estilo más habitual pero sin abandonarlo, para dar cabida a otros sonidos que no han hecho sino enriquecer el producto final.
Sin duda alguna han sabido dar un buen carpetazo final a estos 5 años de Retales con su trabajo más variado y donde se puede ver el enriquecimiento musical, tanto en la parte técnica como de las experiencias vividas y es que el crecimiento de la banda ha sido muy grande en este período, tanto en estudio como, y sobre todo, en directo.
Muy buen disco de unos Sez-Naus que siguen creando su propio mundo y nosotros que lo veamos.