Se supone que el punk es un estilo visceral y directo, sin necesidad de adornos ni florituras que tapen lo verdadero esencial de esta música, que no es otra cosa que expresar aquello que te interesa y te sale del interior, sea importante o banal, y todo sin tener que dar explicaciones.
Por desgracia, en general el punk está ya sometido a unas reglas y unos asuntos sobre los que tratar, provocando que muchas veces las temáticas de los grupos y los eslóganes se repitan sea una banda de aquí o de Australia.
Pero siempre hay gente inquieta que quiere romper esa especie de sonido predefinido, algo que va en contra de lo que se supone que es este estilo, y se rebelan contra todo, ofreciéndonos algo bastante diferente de lo que estamos acostumbrados a engullir.
Una de esas bandas que hacen lo que les da la gana y porque les sale de las narices son las chicas de Berrinche, un dúo torrelaveguense integrado por Sara a la voz y la guitarra y Nuria a la batería y los coros, que se formaron en la primavera del 2019 y que no han parado desde entonces de ofrecer conciertos ni de dar que hablar, ya que son un grupo que no deja indiferente a nadie, como deber ser.
En septiembre del pasado año, y como tarjeta de visita a lo que era su primer concierto, subieron a su bandcamp una maqueta titulada "4 canciones de mierda", de la cual han hecho una muy limitada tirada en marzo de este 2020, para mostrarnos que, como ellos misma dicen, son "una banda innecesaria para un público obnubilado".
Lógicamente, el disco esta grabado por ellas mismas y autoproducida y vienen en un bolsa de seda virgen de color rosa, uno de los dos colores corporativos de la banda junto al negro, en cuyo interior nos vamos a encontrar nada más que el Cd eso si, con esa presentación imitando a los antiguos vinilos.
Como bien dice su nombre, estamos ante 4 canciones que en su totalidad no llegan a los 7 minutos de duración, siendo la primera ese auténtico himno en que se ha convertido "Embarazada de mierda", que se inicia con la voz de Sara y esa guitarra distorsionada, con la batería arropando, mientras dan paso a una pieza con un sonido constante, cruda y directa y con un estribillo realmente pegadizo. Un clásico ya.
Con una locución en la que un ayatolá del buen gusto nos muestra su doctrina, nos adentramos en "Vulgar" y es que hay mucha gente con poco gusto y que estorban, y de eso es de lo que trata dicho tema, con una batería que suena potente y contundente y Sara cantando con esa energía que posee, dejándonos un corte muy directo. Brutal su letra.
Aunque sean punkis también tienen su corazoncito y el siguiente corte, "Grasa", es una balada sobre todos esos productos que fomentan coger unos kilos y que se inicia de una manera relajada con la batería y la voz en primer plano, para luego coger fuerza con otro estribillo pegadizo y jugando con esa combinación de intensidades, dando como resultado el tema más largo del disco. Una maravillosa oda al colesterol.
Y llegamos al final del disco con "Fiebre", que no es sino una adaptación libre del "Fever" de Peggy Lee, ese clásico de los años 50 que ellas llevan a su terreno, con un inicio que parece que sigue la línea original del tema, pero la batería ya parece anticiparnos que algo va a cambiar, para acelerarse y mostrarnos una ejecución libre y cada vez mas acelerada, acabando con el sonido de los platillos posados sobre la batería.
Directo y al mentón, así es este primer trabajo de Berrinche, una banda que ha venido para inyectar un soplo de aire fresco a un estilo que se ha vuelto demasiado conformista y en la que ellas proponen algo más punki que es hacer lo que te apetece sin tener que rendir cuentas.
Las canciones son directas, bien ejecutadas dentro de lo que ellas van buscando que es algo que suene natural y sin demasiados miramientos y es que si algo te gusta como ha quedado no es necesario darlo más vueltas y este trabajo ha quedado muy bien.
Por cierto, si este "4 canciones de mierda" os ha gustado y pasan cerca de vuestra localidad, no dudéis en pasar a verlas; yo ya les he visto varias veces y puedo asegurar que sus directos son únicos y crean adicción.
¡Punk directo, sin adornos ni nada parecido y con unas letras muy logradas!
21/04/2020 
Txutxy Cano 
