COLABORACIONES
 Reseña
 
Carburo "Ex nihilo"
  30/09/2020     
  Txutxy Cano
 
No todo tiene que ser malo y se suele decir que al mal tiempo, buena cara y lo cierto es que aunque este 2020 está siendo nefasto en casi todos los factores de la vida, también nos está trayendo algunas alegrías en forma de grandes discos, curiosamente muchos de ellos de la escena local.
 
Y sin duda alguna uno de los mejores trabajos que se han editado en este 2020 es el segundo lanzamiento de larga duración de los Carburo, "Ex nihilo", una banda cántabra formada hace 10 años y que cuenta, además de con el mencionado plástico, con un Ep de título homónimo que sacaron al año de su formación y su ópera prima, "No te preocupes por mi", que registraron en 2014.
 
Desde entonces hasta ahora ha habido algunos cambios en el grupo, que sigue contando con sus fundadores Héctor Santalla a la voz y la guitarra y Rubén Menéndez a la otra guitarra, a los que les acompañan desde hace 2 años dos músicos de gran calidad como son Carlos Estirado al bajo y Chus Gancedo a la batería.
 
Este disco viene presentado con un bello trabajo artístico y gráfico de Mutta Estudio, junto a la fotografía de El Rey Lagartón, habiendo sido grabado por Chus Gancedo en sus propios estudios de Hinojedo durante el pasado 2019, siendo mezclado y masterizado por Gorka Dresbaj, que también ha hecho las labores de productor, en los estudios The Room de Barcelona durante los dos primeros meses de este 2020.
 
Durante las 9 canciones que durante más de 36 minutos completan este segundo disco de la banda nos vamos a encontrar diferentes invitados, amigos del grupo, que aportaran su calidad a unos temas cuyas letras son obra de Héctor Santalla, mientras que la música la compusieron entre todos los componentes de la formación.
 
Y sin más preámbulos vamos a sumergirnos en este "Ex nihilo" que se inicia de manera potente con "Despídete del cielo", con la batería sonando contundente y marcando territorio junto a ese aire inquietante que tiene en su arranque, para que las guitarras remarquen la fuerza del corte, con la sección rítmica sonando fantástica, encontrándonos con la voz de Héctor casi susurrante para luego volverse más cañera, dando paso a un estribillo realmente pegadizo, siguiendo la pieza con esa gran letra y un montón de detalles que nos demuestran la calidad de la banda, continuando con ese ritmo lento y pesado y muchos detalles técnicos, encarando la recta final del mismo con ese estribillo que va cogiendo intensidad y velocidad a medida que va progresando. Una maravilla para comenzar.
 
Llega el turno del que ha sido adelanto del disco, "Contracorriente", que comienza con un sonido como desde la lejanía que estalla con la contundencia de las guitarras, presentando la intensidad que tendrá el corte pese a que la voz de Héctor parece querer despistarnos al principio para que, a continuación, ese certero sonido de batería nos introduzca en un estribillo de los que se te va a meter en la cabeza sin remedio y no podrás parar de cantarlo, todo un himno a luchar por lo que quieres, jugando la canción con esos cambios de intensidades entre la fuerza del estribillo y las partes más melódicas previas, para que, después del segundo nos encontremos una parte más lenta pero potente que recupera el estribillo hasta el final del tema. Un himno y desde ya un clásico de la banda.

Nos encontramos ahora con la que es la pieza más extensa del disco, "La sombre de tu sombra", en donde aparece el gran Javi Prieto, guitarrista, entre otros, de Mordor y Reality Check, siendo un corte que se inicia de manera poderosa, con mucha fuerza, con la sección rítmica dejándose notar, para que, siguiendo ese ritmo contundente, entre la voz de Héctor que nos lleva a un estribillo pegadizo aunque siempre dentro de ese contexto más metalero que tiene el tema, mientras la batería está omnipresente, surgiendo un esplendido solo de guitarra que da un toque de distinción al mismo, apareciendo luego una parte más relajada con guitarras acústicas, resurgiendo la fuerza del mismo, dejándose llevar la canción por una parte que parece expandirse en el infinito antes de retomar el sonido inicial hasta la conclusión. Muy cañero y contundente.
 
Tras la fuerza del corte anterior es momento de relajar un poco el ambiente con "La vida contra el tiempo" que empieza de manera calmada, con la música, sin perder la energía que desprende la banda, más comedida y la voz como susurrando, hasta que la canción coge esa fuerza que estaba escondida, pero llevando siempre ese ritmo lento aunque cada vez más potente, con Héctor dejándose la voz y trasmitiendo mucho sentimiento en cada estrofa, mientras, después de cada estribillo, la música sigue con ese sonido metalero y potente que contrapone la calma inicial. Muy bella y lograda pieza.
 
Mediamos el disco con "Tu experimento cruel" y ese guitarrero comienzo, perfectamente secundado por una genial sección rítmica, antes de dar paso a la voz de Héctor que aquí nos cuenta en la letra algo que mucha gente se podía aplicar, con un fantástico estribillo y apareciendo como invitado el gran Raúl, cantante de Emboque, cuyos coros dan más calidad aún al tema, para, tras el segundo estribillo, parar la intensidad del mismo y aparecer unas voces robotizadas tras la que, poco a poco, ir recuperando la intensidad del corte y toparnos de nuevo con ese estribillo que suena aún con más fuerza. Una muy interesante letra para una canción muy recomendable.
 
Y vamos ahora con una de las que se te quedarán en la cabeza casi a la primera escucha, "No sé qué día es hoy", que comienza con Héctor gritando el titulo de la pieza, para luego ser la guitarra la que de inicio a la misma, con una bateria muy potente acompañando, surgiendo el vocalista de manera calmada mientras la bateria y el bajo van dejándonos diferentes signos de su enrome calidad, desembocando en un machacón estribillo en donde Héctor saca a relucir toda la potencia de su voz, para , tras el segundo estribillo, dar la impresión de que la canción concluye, pero no es así, dejándonos un muy buen sólo de guitarra, antes de que sea la batería la que tome el protagonismo y desembocar en ese coreable estribillo que se intensifica hacía el final del corte. De las que se disfrutaran en directo como si no hubiera un mañana.
 
Llega el momento de la relajada, al menos en su inicio, "Tormenta" ya que, después de ese tranquilo inicio, la pieza se endurece levemente, con Héctor mostrándonos sus grandes registros, mientras que los músicos van dejándonos contemplar su calidad, para que, cuando llega el estribillo, el corte coja mucha más fuerza, algo que se incrementará con ese gran solo de guitarra que nos deja la banda, antes de que, en la recta final, sea el estribillo el que se vaya intensificando, concluyendo el tema de manera más rápida y contundente. Un bello medio tiempo que demuestra que el grupo se sabe desenvolver también en partes más melódicas pero sin renunciar a su esencia.

No voy a ser nada objetivo si digo que la siguiente canción, la titulada "Traición", es mi favorita del disco, comenzando con ese redoble de bateria que da paso a ese contundente sonido de guitarra que se ve frenado cuando aparece esa voz más oscura y agresiva de Héctor, contando con una letra realmente directa y que nos engancha con un estribillo que tiene esa frase tan lapidaria que dice "lo más triste que tiene la traición es que nunca proviene de tus enemigos", llevándote, con su potencia y fuerza, a no poder dejar de mover la cabeza y apretar los puños, surgiendo ese cambio de ritmo tras el segundo estribillo en donde la pieza tiende a intensificarse, sobre todo a raíz de ese solo de guitarra, tras el que la voz relaja la canción y surgen esos coros en donde colaboran Mara Mena y Marta Rocanrol, enfilando la recta final del corte con más fuerza y acelerando el mismo, con una magnifica exhibición técnica, acabando en fade out. Una maravilla.

Y llegamos al final de este genial disco con "Dentro de ti", que se inicia con unas guitarras acústicas y la voz principal, con esos coros que casi susurran la letra de la canción, que se ve acompañada por el resto de instrumentos en su modo más calmado, con el piano de Luis Cano dando más énfasis y dramatismo al corte, que transcurre de manera pausada aunque con esa rabia guardada y que aflora en la forma de encarar las voces y en la manera de tocar la guitarra, añadiendo más dramatismo aún en la parte final del tema gracias a la forma de cantar de Héctor. Una muy dulce forma de poner el punto y final a este álbum.
 
Enorme el paso adelante dado por esta banda que despertó el interés de muchos desde sus inicios por esa propuesta en donde combina el Metal y el Rock, algo que aquí aún se ha profundizado más, aportando un toque algo más progresivo y con una grandísima calidad musical, pero siempre puesta al servicio de unas canciones todas ellas con una personalidad propia, aunque también mostrando un sonido muy compacto entre sí.
 
La sección rítmica suena bestial durante todo el disco, las voces de Héctor, combinando melodía y fuerza pero siempre sonando potentes, dan mucha personalidad al grupo, al mismo tiempo que las guitarras tienen un gran protagonismo en ciertos momentos, sin olvidar las letras, uno de los puntos fuertes de la trayectoria de la banda.
 
Si os había gustado lo que había hecho el grupo hasta ahora, sin duda este "Ex nihilo" os va a encantar, porque nos trae a una banda en un momento muy dulce y que, esperamos, puedan presentar en una gira en condiciones normales cuando todo esto pase.
 
Este "Ex nihilo" de Carburo es uno de los mejores discos de este 2020 y seguro estará en mi top 10.
 
¡Una maravilla!
 
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