Juicio Final, una joven banda de Pradoluengo (Burgos), presenta su primer LP: Al lÃmite del tiempo. Arranca con una intro de lo más buenrollera, que en escasos segundos presenta un crescendo para introducir las ganas de baile en el cuerpo. Es una perfecta presentación del disco, ya que resume de maravilla las cualidades del grupo: humor, pasión por la música, una instrumental bestial y una combinación de géneros camaleónica, con toques ska, punk, metal e incluso un toquecillo charanguero.
Sus letras se basan principalmente en vivencias personales. "Balas perdidas" es un canto a la amistad, a la gran relación que une a estos músicos y a las muchas historias que comparten. Por su parte, "
Nuestra voz" y "RaÃces" están dedicadas a los pueblos, concretamente a Pradoluengo, destacando las muchas ventajas de vivir en estos. Yo, habitante de pueblo también, he de decir que es una pena ver como los pueblos se mueren, especialmente en invierno, y a la vez oÃr quejarse a los cosmopolitas de lo mucho que tardan en aparcar, de lo complicado que es encontrar una terraza libre, o de la mucha gente que va al gimnasio a su misma hora.
En el disco también nos encontramos dos colaboraciones. La primera de David Sendino (a quien ya hemos reseñado en esta casa), en el tema "Quiero volver", y la segunda de Adrián Treceochenta en "
Ni una más". Y aquà he de parar porque este me parece uno de los temas más completos del disco, en el que hacen un hueco incluso al reggae y al rap, una canción con mucha energÃa, muy trabajada, con grandes cambios de ritmos y una melodÃa muy pegadiza.
Y aunque también dejan un hueco para un tema más relajado, como es "
Y que más da", la verdad es que la traca es para el final. "Un dÃa más", "Al lÃmite del tiempo" y "Gritaré" probablemente sean las canciones más potentes del disco, con una voz más agresiva de lo escuchado hasta ahora, y haciendo gala de coros. Yo, personalmente, animo al grupo a que abuse más de ellos siempre que puedan, porque ese derroche de energÃa se transmite directamente a los oyentes. Pero, vaya siempre por delante, que cada quien hace su música como quiere, y que este "Al lÃmite del tiempo" es un discazo igualmente.