Es indudable el salto cualitativo dado por los murcianos Darknoise en "Kronos" con respecto a su disco debut, porque aún siendo aquel un fantástico álbum de rock/metal melódico, hay que reconocer que en el terreno en que se mueven la competencia es feroz y esas buenas sensaciones creadas tenían que verse refrendadas por una continuación sólida que los confirmara como una formación estable al margen de cualquier moda. En mi opinión, dicho objetivo lo han conseguido de sobra, huyendo del auto plagio pero sin apartarse apartarse de su sonido ya característico, endureciéndolo considerablemente y que al mismo tiempo suenen mucho más melódicas y accesibles, con la inmejorable ayuda en la producción del afamado Alberto Seara (Sôber, Hamlet). Nos hemos puesto en contacto con su bajista Luis Armero para saber más sobre la grabación y contenido de "Kronos"
Que mejor para empezar, que nos hagáis un resumen de la trayectoria de la banda hasta ahora
Bueno pues la verdad es que llevamos bastantes años haciendo rodar a Darknoise, de hecho este año se cumplen diez de la primera formación del grupo. Sin embargo, fue en 2009/2010 cuando decidimos dar el paso más importante, con la publicación de “Insomne”, nuestro primer disco.
A partir de ahí empezamos a ampliar nuestro ámbito de trabajo y a expandirnos más allá de nuestra región. Hemos ofrecido una gran cantidad de conciertos y teloneado a bandas muy importantes del panorama nacional. Se puede decir que hemos ido evolucionando poco a poco hasta llegar a este punto, en el que creo que estamos bien consolidados y trabajamos cómodamente y de forma fluida. Esperamos que con “Kronos” subamos algún que otro escalón más. Ese es el objetivo de todo músico: cuanta más gente nos escuche, mejor.
Supongo que la experiencia de grabar este segundo disco “ Kronos” ha sido muy distinta a "Insomne". La gente sabe de vuestra existencia y espera algo más de vosotros ¿Cómo os ha afectado ello? ¿Que sensaciones tenéis respecto a él ahora mismo?
Notamos un cambio intenso desde el momento en que escuchamos las primeras maquetas de Kronos, preparando el disco. Es verdad que la experiencia ganada con la época Insomne nos ha hecho maduros y perfeccionistas a la hora de componer, pero creo que la gran diferencia con respecto al anterior disco se debe en gran parte a los nuevos componentes, José Tudela y Claudio Casas. Ellos nos han aportado cosas nuevas que no acostumbrábamos a hacer y las canciones han cogido un carácter más directo y enérgico. Lo hemos trabajado mucho y la gente está respondiendo bien, además de que se está dando cuenta del cambio y de la evolución de la banda. Se podría decir que hemos ganado en intensidad, por encima de muchas otras cosas y nos hemos dejado llevar por el devenir de las canciones.
¿Sois de la clase de grupos que dejan poco margen para la improvisación y la magia de estudio o todo lo contrario?
La verdad es que para bandas como nosotros es muy difícil dedicar demasiado tiempo al estudio con el fin de experimentar. Aún así, gracias a Alberto Seara hemos podido perfilar muchas cosas que habíamos trabajado antes. Su labor de producción nos ha ayudado muchísimo a la hora de modificar ideas que ya llevábamos en la cabeza, él las perfecciona y el resultado es brutal. Estamos muy contentos con el resultado final. Como casi siempre, de lo que sale del local de ensayo hasta lo que se escucha en el disco hay un gran salto de calidad en lo que a lo musical se refiere, pero por supuesto que nos habría gustado dedicarle más tiempo a la grabación.
”Kronos” es un disco que presenta una mayor variedad de influencias, dando la impresión de no querer que se os encasillen en un estilo en concreto y manifestando que sois unos músicos receptivos a nuevos sonidos y tendencias musicales. ¿Creéis que habéis ido un paso más allá con respecto a vuestro anterior trabajo? ¿Donde encaja Darknoise en el panorama actual?
La verdad es que la etiqueta nunca la he tenido muy clara. Son inevitables las comparaciones, pero hay que tener en cuenta que dentro de Darknoise hay mucha variedad de gustos musicales, así que para componer nos basamos en las ideas que nos vienen a la mente y en lo que nos pide el cuerpo. Nos encanta elaborar cosas distintas, dentro de los límites que nosotros mismos nos marcamos.
No vemos necesario ir de extremo a extremo en lo que tocamos, pero creo que en este disco se pueden observar los cambios ambientales y los altibajos que hemos creado cuando se escucha el disco hasta el final. Una de las diferencias más importantes con respecto al anterior disco es esto, la variedad. Pero si tenemos que definirnos, diremos que hacemos un rock alternativo con momentos oscuros para menear la cabeza de un lado a otro, mezclado con sonidos ambientales que te alejan por un momento de lo que estabas escuchando hace 30 segundos. No me atrevo a ponernos una etiqueta, pero seguro que alguien lo hará, eso no lo dudes.
En la mitología griega, Kronos era el hijo de Urano y Gea, el miembro más joven de la primera generación de Titanes que tras ser encerrado junto a los demás descendientes divinos en el Tártaro por su padre, se reveló a fin de cumplir la petición por parte de su madre, quien estaba disconforme al cruel acto de su marido; de convertirse en el rey de los dioses. ¿Qué es lo que habéis querido transmitir a través del título, que es hora de rebelarse contra todo lo que sea injusto y afecte a la dignidad humana?
Es eso lo que queríamos transmitir, pero haciendo referencia a la siguiente generación. Kronos hizo lo mismo que su padre, se comía a sus hijos para que no pudiesen destronarle, hasta que uno de ellos fue liberado y ocultado a Kronos, para así poder destronarle y cambiar las cosas. Eso simboliza la situación en la que estamos.
El que llega a un punto determinado del poder, se acaba corrompiendo; eso es lo que vemos día a día, y ya se empiezan a ver síntomas de cambio, de alguien que se rebela contra la mentira y la opresión. Es algo en relación con nuestro primer single, “Chemtrail”, en el que vemos la parte que juega el escalón más alto, haciendo uso de toda manipulación para tenernos controlados y así seguir con su propio juego de ajedrez, en el que nosotros somos los simples peones utilizados, los sacrificados. |