¿Lo importante es siempre el camino mas que el destino?
Sí, es que aparte nunca vas a acabar porque no hay un momento en la música, como en tantas otras cosas en la vida, que en un día vas a entrar por una puerta y ya está. Ya lo vas a tener solucionado. La música, y yo creo que todas las artes del mundo creativo es así, nunca acabas.
En todo este tiempo ¿Has perdido algo en este recorrido ya transitado?
Perdido no. No he perdido las ganas, toco mejor que hace 20 años. No. Yo no me quejo e intento siempre transmitir la idea a mis compañeros de que somos músicos vocacionales. Que no lloremos, que no nos quejemos. Reivindiquemos lo que tengamos que reivindicar como colectivo, pero que lo que hay que hacer es luchar y con alegría, con actitud positiva, incluso ahora.
Si tú te pones a pensar en la historia, imagínate ser músico en la posguerra aquí en España, o ser músico judío en la Alemania de la segunda guerra mundial o ser músico en una zona segregada de los EEUU en los 50´s. Que no nos podemos quejar, que lo que hay que hacer es reivindicar nuestro sitio en la sociedad, pero sin quejarnos
Cómo animal de escenario que eres ¿Quién te ha impresionado mas sobre las tablas?
Yo siempre digo que me impresionó mucho el tocar con Nick Curran, que murió hace unos años, y que para mí de Rock & Roll es de lo mas fuerte que he vivido. Después hay otros músicos que tocan muy bien, pero lo que es la explosión de energía me quedaría con él.
Mambo Jambo no son flor de un día, el tiempo os va dando la razón ¿Ves algún tipo de techo?
No. Hoy un periodista me decía: hace un tiempo que podías pensar que Mambo Jambo son un grupo de un par o tres de discos y ya está. Pues no, llevamos 10 años y 5 discos, mas todas las colaboraciones que hemos hecho con Barrence Whitfield, August Tharrats o Nikki Hill. No me gustaría pensar en la idea de un techo. Yo creo que lo importante es seguir profundizando en el lenguaje personal, en este lenguaje singular que hemos sabido crear entre los cuatro, entre la composición, los arreglos y el directo. Seguir el camino, no hay otra.
El hacer música instrumental abre de par en par las puertas para tocar en cualquier parte del mundo, cosa que ya hacéis. ¿Crees que se os valora mas fuera que dentro?
No, por igual. Yo me siento, nos sentimos, muy queridos aquí. Noto aprecio por parte del público, somos una banda querida. Cuando vamos fuera, si que la gente se queda un poco impresionada, porque aquí siempre nos han visto mas, pero bien la verdad estoy muy contento tanto dentro como fuera.”
¿Es Barcelona un buen sitio para hacer música?
Ahora tenemos que ver, después de todo esto que nos ha pasado a ver la música en directo como va. Es difícil esto, es difícil. Justo antes de la pandemia estábamos en un momento en el que había o grandes, grandes conciertos, o grandes, grandes festivales o locales muy pequeños. Yo creo que la zona media es la mas complicada. Las salas de 200, 300 o hasta 500 personas son las que me da miedo que con la pandemia hayan cerrado en toda España. Estas son las salas comprometidas, pero a la vez son donde se cuece mucha afición, donde se hace mucha escuela. Han ayudado a la música de este país.
El tiempo se me ha pasado volando, como final. ¿De qué estaría Dani Nel.lo hablando de forma incansable, que es lo importante para ti?
De lo que siempre me gusta hablar es de mi instrumento, el saxofón. Después, yo valoro mucho la importancia del equipo humano. Creo que aparte de tocar con músicos, tú tocas con personas. Hemos tenido mucha suerte de habernos encontrado Los Mambo Jambo, cada uno de nosotros, que venimos de campos musicales afines y no tan afines, pero que el factor humano es importantísimo. En la música, cuanto mejor trabajado y mas afín se es personalmente, se toca también mejor y con mas gusto. Creo que hay que valorarlo mucho. Mis mejores amigos siempre son con los que toco y esto, para mí, es un tesoro.
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