Muchas novedades nos esperaban en una nueva edición del Karma Metal Fest, que no se conforma con afianzarse en el calendario festivalero astur, sino que cada año va creciendo en todos los sentidos. Lo primero y más llamativo, cambio de ubicación, el Prau La Chalana, en las afueras de Pola de Laviana, sirvió de paraje idÃlico para una más que maratoniana jornada.
Recinto al cual no le faltaba de nada, destacando una zona de descanso de la que podÃan tomar nota festivales con diez veces más afluencia. Todo ello acompañado un año más por un sol de justicia, atÃpico por estas fechas, pero que resaltaba más el espléndido paisaje del Valle del Nalón. [ crónica ]