El pasado viernes se me olvidó traer las invitaciones impresas asà que nos pasamos por el locutorio que hay frente a la sala Penélope. El dueño nos preguntó, sorprendido, por el concierto. Nos comentaba que habÃa chavales haciendo cola desde por la mañana. Total, que decidimos cargarnos de paciencia en una cola más lenta de lo normal: la media de edad era muy joven y estaban pidiendo el D.N.I. a propios y extraños. Cuando conseguimos entrar Auxili habÃan empezado hacÃa unos diez minutos ¡Y ya tenÃan a todo el mundo bailando! [ crónica ]