No sé si nos estamos acostumbrando, o es que se está haciendo demasiado habitual el tener que asistir a la despedida de buenos grupos en este país, pero esta noche era otra vez tener que decir un hasta luego (o eso esperamos ) a una buena banda. Belo y los Susodichos se despedían en Madrid y lo querían hacer a lo grande. [ crónica ]