Cuando te acercas a Candeleda, lo primero que observas son las cumbres de la Sierra de Gredos acariciando el cielo. Desde hace cuatro años, y durante unos dÃas de agosto, hay un pico más que sobresale del suelo hacia el cielo: el del escenario del Shikillo. Esta es posiblemente la crónica más complicada y delicada que haya escrito hasta ahora de un concierto o de un festival, y las razones son mayormente técnicas, por problemas de la organización. Pero antes un poco de orden, para explicar el por qué de todo esto. Por asuntos personales sólo he cubierto las jornadas del viernes y del sábado, por lo que desconozco si también se presentaron problemas técnicos el jueves y el viernes, como en el concierto de Marea, por ejemplo, uno de los más esperados de esta edición. [ crónica ]