El pasado 6 de mayo, fecha con sobrecarga de eventos musicales en Madrid, algo menos de cien personas se dieron cita en la sala Trashcan para disfrutar de una noche de hardocre y punk rock de la mano de Delabruja y Anti – Idols.
Miguel, Sandra, Vicente, Yer y Rober fueron los primeros en salir al escenario del número 30 de Cardenal Cisneros para ofrecer un repaso por su discografía prestando especial atención a su último trabajo de larga duración “Hay motivos para que las palabras tiemblen” publicado a finales de 2019. La banda, que desarrolló un proyecto acústico paralelo entre diciembre de 2020 y la primera mitad de 2021, y que no actuaba en eléctrico desde hacía seis meses exactos la noche que compartieron cartel con La Excavadora en Independance; hizo gala, desde el primer baquetazo hasta el último acorde, de su espectacular puesta en escena, sus ritmos rápidos y potentes, sus cuidadas melodías y sus letras desgarradoras con una fuerte carga social y política. [ crónica ]