Dentro de la vorágine de fiestas patronales en distintos municipios de la Comunidad de Madrid durante el mes de septiembre, Ciempozuelos ha venido consolidándose como parada obligatoria. Y más aún si el cartel de las mismas lo componen artistas del nivel de No Konforme y El Drogas.
Así que el pasado día 10 de septiembre pusimos rumbo a este pequeño municipio del sur de Madrid para disfrutar de una noche con un extraño contraste entre el rock más subversivo y las tradiciones más arraigadas. Y prueba de ello es que la banda de punk rock de Vallecas inició su espectáculo en un momento en el que los primeros baquetazos de Hugo Laborda se confundían con los últimos pasos de la procesión; como si estuvieran esperando a que ambos eventos no se solapasen para evitar una escena como la del final de “El mundo es nuestro”. [ crónica ]